Año 6 • No. 235 • agosto 28 de 2006

Xalapa • Veracruz • México
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Sin embargo, es factible canalizarlo
Sin interés en la sexualidad,
estudiantes de Enfermería
Carolina Cruz
Veracruz.- El 75 por ciento de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la Universidad Veracruzana (UV), en la región Veracruz, adopta una postura de neutralidad o indiferencia hacia la sexualidad, mientras que la actitud del restante 25 por ciento es desfavorable, de acuerdo con un estudio realizado por la académica Blanca Flor Fernández.

Independientemente del contexto sociocultural predominante, del cual la académica piensa tuvo mucho que ver en las respuestas, lo importante es que “al predominar una actitud indiferente o neutral, las posibilidades de transformar dichas actitudes son aún más viables que si las alumnas  presentaran actitudes fuertemente arraigadas a una postura específica”.

En su opinión, que los estudiantes tengan una actitud definida a la sexualidad es importante porque en la profesión de Enfermería “la educación para la prevención de la salud  física y mental tienen implicaciones  profesionalmente importantes en la detección y diagnóstico, y la planeación de procesos de atención en el patrón de la sexualidad”.

Ante esto, la catedrática sugiere establecer estrategias de enseñanza para la formación profesional de la enfermera; las propuestas están orientadas dentro del MEIF, basado en la formación integral del estudiante universitario, y se enfocan al desarrollo armónico y equilibrado en diversas dimensiones de la estudiante de Enfermería, que la lleven a formarse en lo intelectual, humano, social y profesional.

La académica sugiere que la institución debe abordar abiertamente la sexualidad con los estudiantes, a través de un programa institucional integrado al MEIF, conformado por alguna materia que se dedicara a hablar de una sexualidad consciente y responsable, o bien esquematizar talleres y  conferencias periódicas, aunque considera que lo ideal es que en cada facultad existiera un Departamento de Orientación, para éste y otros temas que tradicionalmente ha sido tabúes.

¿A qué se adjudican estos hallazgos en una población joven que hipotéticamente debe mostrar interés o curiosidad por una esfera de su vida próxima a desarrollar? En su opinión, las respuestas de indiferencia emitidas por las estudiantes estuvieron tamizadas por herencias culturales, como temor o pena por expresar sus inquietudes o dudas o aceptación hacia sus propias sexualidades.

Es el mismo caso para las contestaciones que aludían a actitudes desfavorables: “Estamos socialmente condicionados a que la sexualidad no se exprese abiertamente, no es aceptado en el medio, y las jóvenes responden con los estereotipos, mitos y tabúes que han prevalecido”, además de considerar que la sexualidad femenina se ve desde otro ángulo: no es favorable para ella misma, para su carrera ni su profesión.

La muestra seleccionada por muestreo probabilístico aleatorio simple, contempla 166 alumnas con diferentes grados de escolaridad; el instrumento utilizado fue una escala de medición de actitudes hacia la sexualidad y se realizó tratamiento estadístico mediante análisis de varianza y prueba de Duncan.