“En la medida en que las leyes sean reflejo de una necesidad social y ética, en esa medida podrán ser comprendidas cabalmente y respetadas por el ciudadano”, aseguró Rebeca Elizabeth Contreras López, investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Veracruzana (UV), al referirse a la legitimidad en las leyes y la definición de las mismas durante la presentación de su texto La tutela penal de bienes jurídicos, en el marco de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) 2006.

Hoy en día, aseguró la investigadora, tenemos una estremecedora realidad: “En México no hay legisladores como tales. Aquí cada legislador es un político que ha asumido circunstancialmente el papel de legislador. Y aunque es frecuente que el político-legislador cuente con algún tipo de capacitación en la elaboración de leyes, falta la exigencia ciudadana de que estas personas sean razonables, moralmente responsables de las barbaridades que con frecuencia cometen”.

“Vemos que nuestros legisladores lo que buscan son los intereses de partido; no hay en ellos la convicción de un verdadero acercamiento a los problemas reales. Otra de las cosas que se plantean en mi texto es la necesidad de evaluar las leyes, observar sus resultados, saber hasta dónde cumplen con sus objetivos y analizar si resuelven los problemas para los cuales han sido creadas”.

Mencionó el tema de la posible indefensión del ciudadano común ante la legislación surgida de políticos habilitados como generadores de leyes. Son los casos en que las disposiciones de Estado autoritariamente rebasen los límites de .los derechos de los ciudadanos.

Respecto a su libro, contó que es el resultado de una estancia posdoctoral que realizó en la Universidad de Granada, España, y que originalmente estaba destinado a ser publicado como homenaje a la también universitaria María del Pilar Espinosa Torres.

Asimismo, lo consideró como “una disertación casi colectiva” por apoyarse en múltiples opiniones y dudas de sus alumnos, aunque también contiene “la audacia de la primera investigación”. Y aseveró que contiene temas que fueron redactados de una forma que no haría en la actualidad: “porque nos damos cuenta de que muchas realidades no cobran la forma que deberían tener o que nosotros desearíamos que tuviesen; la realidad supera con mucho las propuestas teóricas.”

Finalmente, agradeció a sus compañeros del IIJ el apoyo en este acontecimiento y a la organización de la FILU por el espacio para la presentación (“que supuse nunca llegaría este momento”) del texto considerado.