Año 7 • No. 276 • Agosto 13 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
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  Matemáticas, sedentarismo y depresión en el nuevo número
Festeja La Ciencia y el Hombre
20 años ininterrumpidos
Gina Sotelo
La revista La Ciencia y el Hombre que edita la Universidad Veracruzana (UV) está de fiesta pues acaba de aparecer el número uno del volumen XX de esta importante publicación orientada a la divulgación de la ciencia y la tecnología, tarea que no ha sido nada sencilla en los ya 20 años de trabajo ininterrumpido.

Es en la editorial de este número donde se hace un recuento de su historia, misma que inició bajo la atinada dirección del escritor colombiano Marco Tulio Aguilera Garramuño a lo largo de 12 años y que continúa desde hace ocho Rafael Bullé-Goyri.

La Ciencia y el Hombre se ha vuelto una de las muy pocas revistas en su género en nuestro país, constancia a la que suma una innegable calidad en los contenidos de cada uno de sus números; es por eso que se ha preparado un programa que dé cuenta del esfuerzo realizado mediante diversos actos acordados por el Comité Editorial.

Quieren, en primer lugar, conocer de cerca los problemas que implica la publicación de otras revistas como ésta, para lo cual han participado un simposio de editores de las revistas de divulgación científica que mucho les servirá para establecer contactos, fijar rumbos y empaparse de todo aquello que concierne a esta apasionante labor.

Quieren escuchar también las voces más lúcidas en el área de la divulgación en México, de modo que han procedido a organizar un ciclo de conferencias que, dictadas a lo largo del año, les permitan conocer los diversos puntos de vista que existen en este terreno en la voz de renombrados especialistas.

Dichas conferencias serán integradas en un número especial, de modo que puedan ser accesibles a todos nuestros lectores y a los interesados en las formas de divulgar el conocimiento científico y tecnológico, el cual seguramente verá la luz a fines del año que corre o a comienzos del próximo.

Como una forma de recompensar el empeñoso trabajo de sus colaboradores, La Ciencia y el Hombre ha establecido el Premio de Ensayo Científico, el cual se otorgará anualmente a los autores que hayan contribuido con sus textos en el año inmediato anterior, en el marco de un acto de celebración durante la ya tradicional Feria Internacional del Libro Universitario que se lleva a cabo en la UV.

Los lectores de este Número 1 del Volumen XX encontrarán la diversidad acostumbrada en sus contenidos: desde las nuevas tecnologías en la cocción de las tejas, hasta las propiedades medicinales de las plantas; desde los efectos neuronales de diversos agentes tóxicos, hasta la descripción detallada del papel de las mujeres en la ciencia.

Entre los artículos publicados destacan Las matemáticas en la Estética, de Ramón Ortiz Fernández. Explica que a lo largo de su historia, el hombre ha tratado de representar lo que lo rodea de distintas maneras y utilizando para ello una gran variedad de técnicas. Esas representaciones han tenido diversos fines y, por lo tanto, han tomado formas acordes a estos objetivos.

“Desde las pinturas rupestres más antiguas, con sus primigenios esbozos de una creatividad artística, aun y cuando su verdadera finalidad debió ser más cercana a una representación mística o mágica de la naturaleza que al deseo de satisfacer una necesidad estética, el hombre ha dado señales de que la representación, la imitación o la duplicación de su entorno constituyen formas de tener una mejor comprensión de una realidad que muchas veces lo desborda y que parece ser simplemente devastadora.”

O La Depresión, de Jorge Sánchez Mejorada, donde nos dice que la depresión es, sin duda alguna, una de las psicopatologías de las que más se ha hablado a lo largo de los años, no sólo desde una perspectiva neuroquímica, clínica o terapéutica, sino también desde los más diversos ángulos.

La literatura, el teatro, el cine, la sociología, la antropología o la historia nos hablan de personajes y experiencias depresivas, aunque no necesariamente las identifiquen como tales. En la medicina hubo ya una identificación clara de los síndromes melancólicos desde la Grecia clásica; Hipócrates, por ejemplo, incluye al “humor melancólico” en sus descripciones caracterológicas.

“La psiquiatría de los siglos XIX y XX, basada en la observación y en la descripción detallada y cuidadosa de los cuadros clínicos, se ocupó ampliamente de su estudio y tratamiento; sin embargo, será hasta el último tercio del siglo XX que el tratamiento de la depresión dé un gigantesco brinco cualitativo gracias a los avances de las neurociencias y de la psicofarmacología.”

La revista aparece por vez primera en el mes de enero de 1988, a iniciativa de investigadores y académicos interesados en dar a conocer los adelantos de la ciencia y la tecnología. Inicialmente, sus contenidos, técnicos o especializados, eran consultados sólo por algunos instruidos en ellos, y es a partir del año 2000 que adopta una forma de divulgar amena, llana y precisa estos avances, y por consiguiente, alcanzar día con día un mayor número de lectores se ha convertido, de una mera pretensión, en una satisfactoria realidad.

Mayores informes al apartado postal 97, teléfonos y fax (228) 818-59-80 y 818-13-88, Código Postal 91001 y al correo electrónico: ciencia_hombre@uv.mx.