Construirán laboratorio para su reproducción

Orquídeas: bandera de la conservación en la UV

Edith Escalón • David Sandoval • Marcelo Sánchez Estudiantes y académicos de la Universidad Veracruzana (UV) han convertido a las orquídeas en especies “bandera” para la conservación de la biodiversidad en Veracruz, una prioridad para la institución que ha hecho del compromiso social y ecológico uno de los ejes de su trabajo cotidiano. La máxima casa de estudios no sólo concluirá en 2009 un laboratorio dedicado exclusivamente a poner en práctica nuevos métodos científicos para la reproducción –desarrollados en la UV en la última década–, sino que albergará en su orquideario una de las colecciones más representativas de la entidad y coordinará en el Parque Natura el primer centro para la conservación y difusión social del conocimiento sobre estas especies.

En estas iniciativas, los estudiantes han tenido un papel sobresaliente. Desde 2005, alumnos de Biología han apoyado la colecta de especies e investigación sobre orquídeas; durante 2006 y 2007 realizaron talleres de divulgación en escuelas primarias y secundarias donde participaron más de cinco mil personas, labor que les llevó a ganar el segundo lugar en la Expociencias 2008, y en octubre del año en curso organizaron el Seminario de conocimiento y conservación de orquídeas, que reunió a expertos de instancias de gobierno, centros de investigación, sociedad civil y la propia comunidad universitaria.

Así, la UV consolida su papel como promotora de la conservación de la biodiversidad, fortalece la investigación científica y la aplica a la realidad, mejora la docencia al involucrar a sus estudiantes en iniciativas de responsabilidad social, y promueve a través de la distribución social del conocimiento el respeto por el medio ambiente.

En marcha, construcción de orquidearios
El Parque Natura y el campus de la UV alterno a la USBI serán las áreas naturales donde funcionarán orquidearios que, además de trabajo científico, promoverán la conservación de las 444 especies que existen en Veracruz y el conocimiento de las mil 200 que hay en México, afirmó Rebeca Menchaca, académica del Centro de Investigaciones Tropicales de la UV y coordinadora de ambos proyectos.

Explicó que el del campus universitario –en proceso de construcción– funcionará como laboratorio de reproducción de orquídeas, donde a partir de técnicas científicas desarrolladas por la UV en los últimos 10 años, germinarán semillas para la propagación in vitro, pues de manera natural “sólo llega a ser adulta una de cada mil semillas; lo que hacemos nosotros es darles nutrientes de manera artificial y elevamos el éxito a 50 por ciento, o sea, hasta cinco de cada 10 sobrevive adulta”.

Con esas semillas harán la propagación y conservación en el Parque Natura, donde se instalará otro centro gracias al financiamiento de más de dos millones de pesos otorgados por el Gobierno del Estado, y promoverán incluso la venta legal de especies a partir de una Unidad de Manejo Ambiental (UMA), entidad que cuenta con la autorización gubernamental para la comercialización.

Difusión del conocimiento, gracias a estudiantes
Son 12 los estudiantes de la Facultad de Biología que integran la Asociación para la Conservación de Orquídeas Silvestres (ACOOS). Gracias a ellos, más de cinco mil personas, entre niños y jóvenes de escuelas primarias y secundarias, han conocido la importancia biológica, económica y cultural de las orquídeas.

Con el conocimiento y experiencia que obtuvieron en 2005, cuando apoyaron a maestros de su facultad en la colecta de especies e investigación sobre orquídeas, iniciaron en 2007 una serie de talleres, pláticas y exposiciones (más de 50) para sensibilizar a la población, promover y difundir la importancia de la conservación de la biodiversidad.

Gracias a ese trabajo ganaron el segundo lugar en la Expociencias 2008, el encuentro de innovación científica juvenil más importante en México y el mundo, y ganaron también un pase para participar en la fase latinoamericana de este encuentro científico en Chile, en 2009. Y fueron ellos quienes a principios de octubre organizaron Seminario de conocimiento y conservación de orquídeas, que reunió a expertos de instancias de gobierno, centros de investigación, sociedad civil y la propia comunidad universitaria, en torno a estas especies bandera.

La conservación, urgente
El Seminario sobre el conocimiento y conservación de orquídeas inició con la participación de Miguel Equihua Zamora, director del Instituto de Ecología (Inecol), A.C., quien explicó que en México existen 61 especies en peligro de extinción, principalmente por la deforestación de su hábitat, el saqueo, venta ilegal y la transformación de bosques en pastizales, tierras agrícolas o plantaciones forestales.

Advirtió que México, como muchos otros países, no ha podido garantizar su conservación “a pesar de los esfuerzos, más bien limitados, de las instancias gubernamentales”, de ahí que la Norma Oficial Mexicana (NOM) tenga registradas 183 especies en alguna categoría de riesgo de las mil 200 que existen en el país.

Una de las estrategias para enfrentar el problema, planteada en el encuentro, fue el fomento del cultivo de orquídeas, pues evita el saqueo y la venta ilegal, según dijo Judith Téllez Ramírez, secretaria de la Asociación Veracruzana de Orquideología, filial estatal de la Asociación Mexicana, que tiene en conjunto más de 25 mil especímenes en herbarios.
“Entre más éxito tengamos en el cultivo, menos depredación, menos compra y venta ilegal habrá”, dijo. Actualmente, la Asociación cuenta con 24 miembros en Xalapa, quienes se documentan constantemente para mejorar sus técnicas de cultivo y comparten experiencias con el fin de que sean cada vez más exitosos.

Los investigadores también abordaron aspectos científicos de estas especies. José García Franco, del Inecol, explicó que las orquídeas tienen el “más diverso rango de polinización”, desde las que engañan a los insectos para que se aproximen a ellas, las sacudan, y así adosen el polen a sus cuerpos para transportarlo a otras flores, hasta las que son hermafrodita, es decir, poseen órganos femeninos y masculinos para la reproducción.

Gerardo Salazar, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México, habló acerca del aporte de la genética al estudio de estas especies, pues permite observar su conformación molecular, más allá de las características físicas de las orquídeas, lo que precisa la información sobre patrones de distribución y características de las especies.
Pilar Ortega Larrocea, también investigadora del la UNAM, dijo que en muchas especies, son los hongos los que permiten a la orquídea crecer al 100 por ciento, pues gracias a ellos captan nutrientes esenciales para su desarrollo; sin embargo, reconoció que la investigación en el tema es escasa, por los que invitó a los universitarios a estudiar no sólo la planta sino también su relación con otras especies.

Finalmente, Rebeca Menchaca, de la UV, dijo que las orquídeas han sido apreciadas en diversas culturas y su uso se ha extendido desde el meramente ornamental hasta aplicaciones medicinales o pociones afrodisíacas. “Desafortunadamente, la rareza, belleza, aroma, simetría y estructura que tienen estas flores ha originado la depredación”, problema que, dijo, instituciones como la UV está enfrentando con acciones concretas que involucran a la sociedad.