Transparencia:
sello de la autonomía
La UV es de las primeras universidades
en certificar sus procesos de transparencia y de acceso
a la información
Varones menores de 25 años
solicitan más los servicios de Mkatsiná
Los principales emas son información escolar
y oferta académica
La UV recibió 306 solicitudes, mientras que el
IVAI 225
Alma Espinosa
La Universidad Veracruzana (UV) es de las primeras
instituciones de educación superior en el país
en certificar sus procesos de transparencia y de acceso
a la información ante un organismo internacional;
sin embargo, quiere ser la mejor, estar a la vanguardia
y convertirse en referente nacional e internacional. |
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Tras un periodo de intenso trabajo, la Coordinación
Universitaria de Transparencia y Acceso a la Información
(CUTAI) se hizo acreedora del Certificado CA-306209 por disponer
de un sistema de gestión que cumple con los requisitos
de la Norma ISO 9001:2008 por sus procesos de transparencia
y acceso a la información.
El Certificado otorgado por la Agencia para la Certificación
de la Calidad y del Medio Ambiente, cuenta con el aval del
Foro Internacional de Acreditación y la Entidad Mexicana
de Acreditación; la UV ha comprobado que el trabajo
realizado por la CUTAI desde 2006 ha sido el correcto, pero
todavía existen metas por alcanzar.
Si bien la UV había realizado algunos esfuerzos para
transparentar sus procesos al publicar estados financieros
y resultados del examen de admisión, fue a partir de
noviembre de 2006 cuando surge la CUTAI. En marzo de 2007
se crea la página electrónica de Transparencia
y Acceso a la Información de la UV (www.uv.mx/transparencia)
y en agosto de ese mismo año se pone al servicio de
la comunidad universitaria y de la sociedad en general el
sistema electrónico de Acceso a la Información:
Mkatsiná (que en totonaco significa “el que informa,
enseña y da a conocer”).
Hasta el momento son pocas las universidades que cuentan con
un sistema como Mkatsiná (www.uv.mx/transparencia/acceso/informacion),
que permite a cualquiera que lo solicite, desde cualquier
lugar del mundo y hora, obtener información de esta
casa de estudios.
La efectividad y el tiempo de respuesta
de esta herramienta le han permitido a la UV situarse
como la institución que no ha tenido ningún
recurso de inconformidad, lo que significa que todas las
preguntas que han formulado han recibido una respuesta
satisfactoria y dentro del tiempo legalmente permitido.
Además, los avances también se reflejan
en el informe de Consulta Mitofsky, que de 39 universidades
calificó a la UV como la que más esfuerzos
ha hecho para elevar sus índices en materia de
transparencia y acceso a la información.
Pero, ¿qué falta por hacer en la materia,
hasta dónde llegará la UV para transparentar
sus procesos y mantener informada a la población
sobre su quehacer? De acuerdo con la titular de CUTAI,
Clementina Guerrero García, la certificación
significa sólo el haber construido los cimientos
de lo que queremos para nuestra casa de estudios. |
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“El reto es mantenernos y mejorar el quehacer diario.
En cuanto a transparencia y acceso a la información,
queremos ser una universidad posicionada no sólo a
nivel nacional, aunque ya somos de los primeros en certificarnos.
Queremos ser reconocidos internacionalmente y obtener la calificación
más alta. Ésos son nuestros retos y todos los
universitarios estamos convencidos de ello”, aseguró.
Lo que se tiene por delante, explicó, es seguir trabajando
con calidad en lo cotidiano y refrendar diariamente nuestro
compromiso con la mejora continua. Como universidad pública
tenemos un fuerte compromiso social y necesitamos tener un
aval más que nos sirva para incrementar en la sociedad
su credibilidad y su confianza en la UV.
“Pensamos que con los procesos certificados estamos
más cerca del ser y del parecer; quisiéramos
estar a la vanguardia de las universidades públicas
del país y ser un referente nacional e internacional.
Sólo es cuestión de que todos tengamos disposición
hacia esta nueva cultura que debe permear a toda la Veracruzana”.
Rumbo a la transparencia
Desde 1977 la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos establecía en su artículo
sexto que la información será garantizada por
el Estado; sin embargo, el tema de la transparencia comenzó
a utilizarse en 1991 y fue en el sexenio de Vicente Fox cuando
adquirió mayor relevancia.
En 2002 se publicó la Ley Federal de Transparencia
y Acceso a la Información. El 8 de junio de 2004, el
entonces gobernador Miguel Alemán Velasco emitió
la Ley de Acceso a la Información del Estado de Veracruz
de Ignacio de la Llave, que no contemplaba a la UV como Sujeto
Obligado.
Se derogó la ley y el 27 de febrero de 2007 surgió
la Ley de Transparencia y Acceso a la Información del
Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave, ese mismo año,
el 20 de julio se reformó el artículo sexto
de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos.
En lo concerniente a la UV, el 10 de marzo de 2008 el Consejo
Universitario General (CUG) aprobó el Reglamento de
Transparencia y Acceso a la Información. Es un documento
vanguardista, pues, según Clementina Guerrero, incluye
tanto lo relativo a la ley estatal como a la reforma constitucional,
así como obligaciones de transparencia, propias de
una institución educativa, que posteriormente se incorporarían
en la Reforma a la Ley de Transparencia y Acceso a la Información
del Estado de ese mismo año.
Además, estipula que el titular de la Coordinación
Universitaria y Acceso a la Información es designado
por el CUG y está obligado a dar ante el mismo un informe
anual, situación que no ocurre en otras instituciones
de educación superior.
Antes de continuar, es preciso aclarar qué se entiende
por transparencia y acceso a la información. La transparencia
significa que las instituciones deben hacer pública
cierta información aunque nadie la solicite; es decir,
que haga públicas sus obligaciones de transparencia,
lo cual la Universidad hace en la página correspondiente
(www.uv.mx/transparencia/infpublica/index).
De acuerdo con el Reglamento, la información que se
publica debe ser completa, verídica y oportuna. Debe
ser actualizada dentro de los 20 días posteriores a
que ocurra alguna modificación o al principio de cada
año.
El acceso a la información es que las personas, sin
importar si son universitarias o no y sin necesidad de acreditar
interés alguno o justificar su utilización,
tienen acceso gratuito a la información pública,
a sus datos personales o a la rectificación de éstos.
Es decir, puede obtener información que no esté
publicada en la página de Transparencia, mediante los
sistemas electrónicos Mkatsiná o Infomex.
Toda la información es pública, salvo la que
es catalogada como reservada o confidencial (domicilio, patrimonio,
preferencias sexuales y/o religiosas, enfermedades). Este
tipo de información sólo podrá hacerse
pública si existe una orden judicial de por medio o
bien si el dueño de la información así
lo decide.
Existe un Comité de Información de Acceso Restringido
que se encarga de clasificar la información como reservada
o confidencial. Una vez clasificada la información,
se publica el acuerdo en la página, lo cual da la certeza
a quien formula una pregunta de que si la información
no fue previamente clasificada, es pública.
Veracruz en las estadísticas
Pareciera que los términos de transparencia y acceso
a la información hubieran sido acuñados recientemente;
sin embargo, en Suecia surgió la primera ley sobre
acceso a la información, al aprobarse la Ley de Prensa
en 1776. Casi 200 años después, se promulgó
la ley en Estados Unidos en 1966. México hizo lo propio
en 2002, conjuntamente con Jamaica, Perú, Tayikistán,
Uzbekistán, Zimbabwe y Angola.
Fue hasta el año 2000 que se dio un repunte mundial
de leyes en la materia. Aun cuando pudiera pensarse que los
países que tienen estas normas son más transparentes,
no siempre es así; los mapas que publica Transparencia
Internacional dan evidencia de ello (www.transparency.org).
De acuerdo con un estudio anual de dicho organismo, de 180
países los menos transparentes son Somalia y Myanmar;
México ocupa el lugar 72 con 3.6 puntos de 10, empatado
con China, Perú, Bulgaria, Surinam, Trinidad y Tobago,
Swazilandia y Macedonia. Los más transparentes son
Dinamarca, Suecia y Nueva Zelanda (empatados con 9.3 puntos).
(Consulte www.transparency.org/surveys/#cpi).
En nuestra nación, a pesar de que todos los estados
tienen sus respectivas leyes de transparencia y acceso a la
información, el desarrollo en este campo no ha sido
uniforme y se replica el fenómeno mundial.
Veracruz se encuentra en el lugar 26 empatado con Tabasco
y Tamaulipas, según publicó Transparencia Internacional
en 2008. El Estado de México y el Distrito Federal
están en los últimos lugares, no así
Colima y Aguascalientes que son de los más transparentes
(www.transparenciamexicana.org.mx/ENCBG).
En el concierto universitario, de 39 instituciones de educación
superior, la Universidad Veracruzana está en el lugar
seis con 87 puntos. Ocupa el primer lugar en esfuerzos realizados
al avanzar desde el sitio 27 al sexto en un año.
Para ello el trabajo de CUTAI fue invaluable, pues se agregó
más información al sitio web y se mejoró
el sistema de acceso a la información. La apuesta es,
dijo Clementina Guerrero, estar en el número uno de
la lista.
En la página de Transparencia de la UV se reciben solicitudes
de información por tres vías: personal mediante
escrito libre, en formatos previamente establecidos, y electrónica
ya sea por el sistema Infomex o Mkatsiná. Los electrónicos
son los que prefieren los ciudadanos, Infomex con 15 por ciento
y Mkatsiná con 85 por ciento.
De agosto de 2007 a diciembre de 2008 el número de
solicitudes fue de 306, mientras que para el Instituto Veracruzano
de Acceso a la Información (IVAI) fue de 225. Según
los datos ingresados por el solicitante al sistema de acceso
a la información Mkatsiná, quienes más
lo utilizan son los jóvenes menores de 25 años,
en su mayoría varones. La información que más
se requiere es la escolar y la oferta académica, lo
cual se hace con mayor insistencia en periodo de inscripciones.
El tiempo de respuesta promedio es de una semana, aunque legalmente
el plazo es de hasta 20 días hábiles. Guerrero
García aclaró que aunque el funcionamiento ha
ido mejorando es necesario que más personas se acerquen
a hacer uso de esta herramienta que la Universidad pone al
alcance de todos.
“Como universidad pública tenemos un gran compromiso
social y uno de los objetivos que tenemos es generar en la
sociedad credibilidad y confianza. Pensamos que una sociedad
más informada es más democrática. Como
ciudadanos debemos hacer uso del Derecho a la Información”,
convocó Clementina Guerrero.
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