Asegura Arturo Gómez Pompa, asesor
de la UV
No hubo progreso, se destruyó el medioambiente
y la pobreza sigue igual
De importancia histórica,
recursos del Conacyt otorgados al Citro, añadió
David Sandoval
Hace 35 años iniciaba al sur de Veracruz
la reubicación de comunidades indígenas oaxaqueñas
en el valle del río Uxpanapa, para tal labor fueron
desmontadas 85 mil hectáreas de selvas altas tropicales
que no habían sido estudiadas; en esa época,
científicos mexicanos se dirigieron al gobierno alertando
sobre el inminente peligro de dicha acción.
Semejante desplazamiento poblacional era consecuencia de la
construcción del vaso que conformaría la presa
Cerro de Oro, iniciada en 1981 y terminada en 1988; aunque
el trabajo de desmonte, considerado por los mismos académicos
como un crimen ecológico, comenzó en 1973.
Entre los científicos, destacaba la figura de Arturo
Gómez Pompa, responsable en aquel entonces del proyecto
“Flora de Veracruz” de la UNAM y actual asesor
científico de la Universidad Veracruzana (UV) y del
Centro de Investigaciones Tropicales (Citro), quien habló
sobre la importancia del financiamiento recién obtenido
por dicho centro para evaluar especies en peligro de extinción.
“Sabíamos desde ese tiempo que el estado de Veracruz
era muy importante por su biodiversidad, y fue en este proyecto
donde colaboraron algunos estudiantes de la UV, con apoyo
de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos”,
explicó el académico.
Es así que el Citro retoma las experiencias de investigación
de muchas décadas en la región del Uxpanapa,
abordadas algunas en el proyecto “Evaluación
de la distribución, tamaño poblacional y vulnerabilidad
de especies amenazadas para determinar áreas y estrategias
de conservación prioritaria en la región Uxpanapa”,
coordinado por la investigadora María Cristina Mac
Swiney González.
“Desde el punto de vista histórico es muy importante
que sea Conacyt en un convenio con el Gobierno del Estado
los que decidan apoyar un programa de la UV para llevar a
cabo estudios de lo que quedó en el Uxpanapa y tener
una posibilidad de recomendación de acciones que pudieran
ayudar fundamentalmente a la recuperación ecológica
de la región y a los campesinos que siguen en la zona
tan pobres como estaban antes”, destacó Gómez
Pompa.
Agregó que en este momento “es tan importante
que la UV con el Conacyt proponen un proyecto precisamente
para evaluar hoy en día qué fue lo que pasó,
qué es lo que queda todavía y ver si hay algo
que pueda rescatarse”, ya que “como Centro de
Investigaciones Tropicales tenemos que contribuir, aunque
sea con un granito de arena, a tratar de cambiar la dirección
que ha tenido el país por tantos años”.
Ello se relaciona con la expectativa gubernamental que impulsó
tal deterioro ambiental: la erradicación de la pobreza;
sin embargo, señala Gómez Pompa, “la pobreza
no se eliminó, ése es uno de los grandes problemas
de México; se ha destruido, se han contaminado nuestras
aguas con la idea de que el desarrollo va a traer una maravilla
para el país y no: se ha destruido y la pobreza sigue
igual”.
Arturo Gómez Pompa
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