![](images/biofertilizante.gif)
Garantizada su efectividad en más
de 30 cultivos: universitarios
Biofertilizante hecho en la
UV: listo para el mercado
Sin ninguna contaminación, las plantas
captan más nutrientes, aceleran su desarrollo,
resisten más a enfermedades y soportan mejor climas
extremos o falta de agua
Con un financiamiento externo por 1.5 millones
de pesos, la UV instalará una
planta piloto que será la primera de su tipo en el
país
Edith Escalón
Tras demostrar su efectividad en más de 30 cultivos
agrícolas ornamentales y forestales de la entidad,
la Universidad Veracruzana (UV) iniciará en 2009 la
producción masiva del biofertilizante Micofert, creado
y perfeccionado por académicos y estudiantes de la
Facultad de Ciencias Agrícolas campus Xalapa.
En 15 años de experimentación (en laboratorio,
vivero y parcelas agrícolas) han comprobado que los
hongos-micorriza, materia prima del fertilizante orgánico,
hacen que las plantas capten más nutrientes, adelanten
su desarrollo, resistan enfermedades sin necesidad de plaguicidas
y soporten climas extremos, todo, sin contaminar.
“Los productores están sorprendidos de sus resultados”,
cuenta Enrique Contreras, estudiante de Agronomía,
quien este año demostró en parcelas de agricultores
de Actopan que con el biofertilizante la papaya que cultivan
adelanta un mes su brote y crece 20 por ciento más
que sin él.
Como Enrique, decenas de estudiantes han llevado hasta los
productores veracruzanos las ventajas del biofertilizante,
en prácticas de campo o como parte de sus tesis de
licenciatura y posgrado y muchas veces con recursos propios;
sin embargo, este año la UV iniciará una nueva
etapa en este proyecto.
Con un financiamiento externo por 1.5 millones de pesos instalará
en Veracruz la primera planta piloto de producción
masiva que detonará como nunca la transferencia de
tecnología. “Es un impulso enorme a la distribución
social del conocimiento”, en palabras de Dora Trejo,
quien propuso hace 15 años la iniciativa que hoy es
un proyecto institucional.
Tecnología 100 por ciento
mexicana
El biofertilizante se basa en el uso de tres especies
de hongos veracruzanos (llamados micorrizas) que crecen
como arbustos dentro y alrededor de las raíces
vegetales y funcionan como “extensiones” para
captar nutrientes y agua, explicó la investigadora.
Gracias a ellos aceleran su desarrollo, resisten más
a enfermedades y plagas y soportan mejor condiciones extremas
del clima o falta de agua, lo que disminuye los costos
de producción.
Trejo sostuvo que éste es el primer biofertilizante
a base de hongos “100 por ciento mexicano”,
porque además de haber sido desarrollado, probado
y perfeccionado por la UV, utiliza hongos nativos de Veracruz,
a diferencia de las compañías que comercializan
biofertilizantes similares.
Además de que introducir hongos ajenos al ecosistema
puede ser peligroso a largo plazo, advirtió que
en México, ninguna de las 31 compañías
dedicadas a este rubro es respaldada por una universidad
o institución sin fines de lucro: “No tienen
un compromiso social con el sector agrícola, como
sí lo hay en la UV”, aclara. |
Enrique Contreras, estudiante
de Agronomía UV |
Dependencia de agroquímicos
Según datos de la UV, en México se consumen
1.4 millones de toneladas de fertilizantes inorgánicos
por año, más de la mitad importados. El costo
para los agricultores estaba por arriba de los 400 millones
de dólares y se duplicó en años recientes
por la crisis económica.
Es debido a esos precios que los universitarios consideran
imprescindible para el sector agrícola mexicano cambiar
la visión de la nutrición vegetal con alternativas
que sean más eficientes y no contaminen: “Ésa
es la gran ventaja de los hongos micorrízicos”,
afirmó Dora Trejo.
Con Micofert las plantas crecen
más rápido desde las primeras semanas.
En la imagen, dos de papaya de la misma edad |
De hecho, uno de los objetivos de la instalación
de la planta piloto –que será financiada
por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
(Conacyt) y el Gobierno del Estado– es ofrecer una
opción a los agricultores para sustituir las importaciones
de fertilizantes agroquímicos y biológicos.
Luego de mostrar a productores de anturios que el biofertilizante
aceleró un mes la floración en sus viveros
y duplicó el número de flores, Saúl
De los Santos, estudiante de Agronomía, reconoce
que ellos pagan el costo de otros fertilizantes con sus
ganancias. “Es caro y lo pagan porque
lo necesitan; en cambio, en el fertilizante orgánico
de la UV encuentran más eficiencia, precios accesibles
y, además, un producto que no afecta sus suelos
como los agroquímicos, por eso se convencen de
que es mejor opción.” |
Y es que Micofert disminuye la estancia de las plantas en
vivero y evita así pago de jornales hasta en 10 por
ciento; incrementa la sobrevivencia en el transplante, por
lo que las pérdidas son mínimas; sustituye la
aplicación de fertilizantes inorgánicos hasta
en 100 por ciento; aumenta los rendimientos y la calidad,
e incluso genera una segunda producción fuera de época.
UV, a la vanguardia
Aunque más de una decena de instituciones científicas
investigan sobre estos organismos, su aplicación es
escasa; por eso, la UV estará a la vanguardia al contar
con una planta productora que permitirá compartir la
biotecnología con otras universidades y productores.
Aunque a decir de la coordinadora del proyecto no se ha definido
un sitio para la instalación de la planta, es un hecho
que trabajarán con productores de piña del sur
de la entidad y de plantas ornamentales de la zona centro,
acciones en las que contarán con el apoyo del Instituto
Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y
Pecuarias (INIFAP).
Isis Delgado Tejeda y Claudia
Álvarez Utrera |
Los recursos serán invertidos en
becas, viáticos, insumos, análisis de suelos
y gastos de implementación de las parcelas demostrativas
que establecerán con apoyo de Daniel Uriza, experto
nacional en cultivo de piña e investigador del
INIFAP, así como las fórmulas comerciales
de Micofert, que trabajarán con Maribel Vázquez,
de la Unidad de Servicios de Apoyo a la Resolución
Analítica (SARA) de la UV.
Además, la planta representará un espacio
de prácticas para los estudiantes de la Facultad
de Agronomía que cursan las experiencias optativas
Biotecnología I y II, impartidas por el cuerpo
académico que dirige la investigación en
esta línea. |
Éxito
garantizado en: |
|
Para los estudiantes involucrados,
la combinación de teoría y práctica
ha hecho de ésta una experiencia muy formativa:
“Hacemos investigación, trabajamos en vivero,
llevamos el producto al campo, preparamos el biofertilizante,
damos seguimiento a las plantas, comparamos sus resultados
científicamente; es una formación integral”,
coincidieron Isis Delgado Tejeda y Claudia Álvarez
Utrera.
De los cuatro estudiantes entrevistados, tres harán
sus tesis de licenciatura en esta línea, como lo
han hecho más de 20 egresados de licenciatura y
posgrado de la UV, según comentó Dora Trejo:
“Con cada tesis, los estudiantes han logrado socializar
el conocimiento, ése es un apoyo invaluable que
ahora, con la planta, será aún mayor”.
El cuerpo académico está integrado por Dora
Trejo Aguilar, Liliana Lara Capistrán, Ramón
Zulueta Rodríguez y César E. Moreira Arana,
quienes impulsaron en 2003 la creación de la Sociedad
Mexicana de la Simbiosis Micorrízica, que ahora
agrupa a los científicos mexicanos que siguen esta
línea de investigación. |
Papaya
Cítricos
Belén
Anturio
Violeta africana
Nochebuena
Chile (cinco especies)
Jícama
Mucuna
Cebolla
Zanahoria
Aguacate
Chicozapote |
Café
Piña
Maíz
Pimiento morrón
Tomate
Jitomate
Albahacar
Palma camedor
Cedro
Roble
Caoba
Primavera
Pasto
|
Contacto
Laboratorio de Organismos Benéficos. Facultad de Ciencias
Agrícolas, UV. Xalapa, Veracruz, México. Teléfono
(228) 817-27-93. Correo electrónico dtrejo@uv.mx
|