En la UVI Huasteca
Reflexionan sobre derechos indígenas
y sus demandas
La mejor forma de conmemorar
la Revolución Mexicana es conservando el ejido y la
comunidad agraria: Celerino Felipe
Para el pueblo Triqui, el hombre
sabio es el que sabe el camino, el que orienta; el hombre
que aprende es el profesionista que estudia fuera de la comunidad:
Sósimo Ortega
La salud es de los derechos
más importantes, porque si no se tiene salud no se
disfrutan los demás: Huerta Lara
Daniel Bello López y David Islas Bravo
Con la participación de intelectuales
indígenas que han destacado como profesionistas y luchadores
sociales comprometidos con los movimientos por la defensa
y ejercicio de los derechos indígenas, se realizó
el Foro Experiencias y Demandas del Movimiento Indígena
por el Reconocimiento de sus Derechos, convocado por la Universidad
Veracruzana Intercultural (UVI) sede Huasteca.
En el evento –realizado en el municipio de Ixhuatlán
de Madero, Veracruz– participaron Celerino Felipe Cruz,
abogado purépecha, quien colabora con el Grupo Interdisciplinario
de Tecnología Rural Apropiada A.C., de Patzcuaro, Michoacán;
Sósimo Ortega González, abogado que se desempeña
en el Poder Judicial en la Ciudad de México; Rosario
Huerta Lara, defensora de derechos humanos en Veracruz e investigadora
del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad
Veracruzana (UV).
Celerino Felipe abordó el tema “Reglamentos comunitarios
para la defensa del territorio y el reconocimiento de los
derechos indígenas”, señaló que
el principal problema de la comunidad indígena es que
no tiene reconocimiento pleno como sujeto de derecho, como
sí lo tienen los ejidos, las comunidades agrarias.
Por ello es necesaria la elaboración de reglamentos
o estatus comunales (ejidos o comunidad agraria) o estatus
de autonomía comunitaria (comunidad indígena),
fundamentados en el Artículo 2º de la Constitución
Federal. Tales reglamentos se pueden elaborar de manera mixta,
modulando la ley, siempre y cuando no se contravenga la misma,
incorporando usos y costumbres.
Agregó que la mejor manera de conmemorar la Revolución
Mexicana es conservando el ejido y la comunidad agraria, manteniendo
la propiedad social de la tierra, “pues no se debe olvidar
que para las comunidades indígenas, la tierra no es
algo parcelado, es un territorio que le pertenece a todos
los que nacieron y viven ahí”.
Sósimo Ortega abordó el tema “El desempeño
de los abogados indígenas: entre las instancias judiciales,
el litigio y el movimiento indígena”; comentó
que los abogados están acostumbrados al juego de la
máscara, pero que las comunidades también lo
han aprendido, por eso entre sus autoridades nombran como
secretario al que puede hacer relaciones hacia afuera y conoce
cómo hacer trámites ante las instituciones,
pero como máxima autoridad nombran al hombre que sabe.
Para el pueblo Triqui, el hombre sabio es el que sabe el camino,
el que orienta; el hombre que aprende es el profesionista,
el que estudia fuera de la comunidad. En este sentido, valoró
el caso de la UVI, pues la función del profesionista
indígena es apoyar y comprometerse con su pueblo, “porque
los indígenas pensamos desde lo colectivo, desde el
ámbito de la comunidad, a diferencia del mestizo que
piensa y elabora un derecho desde lo individual”.
Rosario Huerta habló sobre los “DESCA: derechos
económicos, sociales, culturales y ambientales como
Derechos Colectivos de los Pueblos Indígenas”
y centró su exposición en el derecho a la salud,
una de las demandas más sentidas de los pueblos indígenas
de la Huasteca veracruzana y en especial en los de Ixhuatlán
de Madero. Comentó que la salud es de los derechos
más importantes porque se puede tener todo, pero si
no se tiene salud, no se disfrutan los demás derechos,
aunque reconoció que es obligación de cada persona
cuidar la propia.
Huerta Lara abordó el caso de la comunidad mixteca
del municipio de Metlatonoc, Guerrero, que obtuvo un amparo
contra la Secretaría de Salud y el Gobierno del Estado
de Guerrero por no construir un centro de salud digno. Acudir
a las comisiones de derechos humanos es poco pertinente ante
el carácter no vinculante de sus recomendaciones. El
caso de Metlatonoc es además extraordinario por ser
un amparo colectivo que puede sentar jurisprudencia, pues
el juicio de amparo es de carácter individual, lo que
dificulta obtener y garantizar ese derecho para demandar y
ejercer derechos de carácter colectivo, por lo que
el derecho a la salud se debe defender jurídicamente
pero también con organización, agregó.
Entre los asistentes al foro estuvieron principalmente estudiantes
de la UVI, autoridades y ex autoridades municipales, un nutrido
grupo de tepehuas y otomíes, además de representantes
de importantes organizaciones como el Fondo Regional Chikometepet,
A.C., y actores sociales que han participado en actividades
promovidas por la UVI.
S
Las ponencias permitieron el diálogo, en el que se
respondieron dudas, se escucharon comentarios y se abrió
un espacio para asesoría jurídica sobre asuntos
en los que algún miembro de la comunidad o su familia
está involucrado.
|