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Hay que analizar los orígenes sociales de la criminalidad, dice
Hemos reemplazado a Dios
por el sistema penal: Zaffaroni
Los sistemas penales en AL, derivados del sistema en Estados Unidos, pretenden resolverlo todo a través de la venganza”
Edith Escalón
Al pensar que el sistema penal puede resolver la toxicodependencia, las crisis ecológicas, el narcotráfico, la marginación social y todos los problemas que viven hoy en día nuestros países vamos camino a la catástrofe, aseguró en la Universidad Veracruzana (UV) el penalista argentino Eugenio Raúl Zaffaroni.
“Estamos viviendo una idolatría penal, hemos remplazado a Dios por el sistema penal”, alertó el tratadista, autor de más de 30 libros en esta materia, juez en tiempos de dictadura, legislador, conferencista y actual ministro de la Suprema Corte de Justicia en Argentina. |
En la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de Xalapa, donde se congregaron más de 400 estudiantes de Derecho de la UV y otras universidades, el abogado penalista considerado uno de los más influyentes en toda América Latina (AL) habló de unos de los mayores desafíos del Derecho penal: reconocer las limitaciones
del sistema.
Para el jurista, el poder punitivo puede ser eficaz en casos extremos, pero no se puede generalizar su eficacia ni considerarlo “todopoderoso”, pues es muy limitado lo que puede hacer en sentido positivo: “Los castigos ejemplares no revierten las tendencias criminales, al contrario, las potencian”, comentó el abogado que en 2009 recibió el Premio Estocolmo en Criminología.
En su opinión, el verdadero reto de los gobiernos es analizar los orígenes del los problemas sociales: “Revertir el desastre que generó en las últimas décadas el festival del mercado, la polarización de riqueza, la exclusión social, todo lo que conocemos que ha llevado a la polarización social y, por ende, a la potenciación de todos los conflictos”.
Derivados del sistema penal en Estados Unidos que a través de la venganza pretenden resolverlo todo, los modelos en los países latinoamericanos sólo han generado fracasos. De acuerdo con el jurista, el narcotráfico es un ejemplo. “Hace 40 años estamos con esta política punitiva y ¿qué hemos logrado?, la difusión del uso de la cocaína. ¿Cuántos muertos lleva México en esta lucha?, muchos más de los que han muerto por el abuso de sustancias ilícitas”.
Aseguró que la única solución que tiene el problema del narcotráfico es la legalización: “Bajar el precio para acabar con el negocio, no hay otra, mientras tenga una rentabilidad tan alta lo único que hacemos con la incidencia del poder punitivo es potenciarla”.
El penalista criticó la ‘brutalización’ de los sistemas penales, autonomización, corrupción e ineficacia de las fuerzas policiales: “Los políticos están presos del mensaje vindicativo, y el que se opone pierde… Es un concurso a ver quién es más macho proponiendo penas más brutales, ésa es la realidad”.
Zaffaroni, quien ha recibido 17 doctorados Honoris Causa en universidades de Brasil, Bolivia, Italia, Perú, Argentina, Costa Rica, España, República Dominicana y México, fue profesor de la Facultad de Derecho de la UV a finales de la década de los sesenta.
Estudiantes de Derecho de la UV y otras universidades atestaron el auditorio
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