“Un honor, que Raquel Tibol esté aquí conmigo”, dijo

Jurado se reencontró con imágenes que produjo en Xalapa, en los setenta

Susana Castillo Lagos

Carlos Jurado se reencontró la mañana del domingo 26 de septiembre con más de 40 imágenes que produjo durante su estancia en Xalapa a partir de 1973, cuando llegó para tomar las riendas del entonces Taller que dio vida a la actual Facultad de Artes Plásticas de la Universidad Veracruzana (UV).

Acompañado de Raquel Tibol, del rector Raúl Arias Lovillo, así como de ex alumnos suyos, familiares, amigos, miembros de la comunidad universitaria y público en general, el artista plástico inauguró la exposición Carlos Jurado: vestigios de una memoria, en la Galería AP de la Unidad de Artes.

Carlos Jurado retratando a Raquel Tibol con la primera cámara comercial que lanzó Kodak en 1888

Minutos antes de recorrer la sala, Jurado expresó: “Estoy muy honrado de que esté aquí conmigo alguien sin quien no se explicaría la historia de la plástica en este país… ya saben quién es, ¿verdad?: Raquel Tibol”. Claudia Negrete, responsable de la Fototeca del Instituto de Artes Plásticas (IAP) de la UV y curadora de la muestra, calificó a la misma como una labor de rescate. Comentó que mucha de la práctica de las artes en los años setenta y ochenta obedecía a una propuesta plástica en donde los soportes eran económicos y, por lo tanto, efímeros. “Fueron tiempos de mucha labor en las artes, pero eso no siempre se ve reflejado en los objetos que quedan, por eso nombrarla ‘vestigios’: de toda esa práctica estas piezas quedan como vestigios del pasado.”

Recordó que cuando Jurado llegó a la UV, a hacerse cargo del Taller de Artes Plásticas, lo precedía una formación más bien autodidacta, por lo que gran parte de su trabajo fue mera experimentación técnica.

“Ésta implicaba una postura de búsqueda de conocimiento e investigación de soluciones fuera de lo establecido en la sociedad de consumo, en una atmósfera de colaboración colectiva con sus colegas y alumnos, donde la enseñanza y la producción personal fueron de la mano”, describió en el texto preparado para la exposición.

Una anécdota peculiar de este evento fue la confesión que el artista hizo de que no recordaba algunos de los trabajos realizados, y que fueron rescatados no sólo para esta exposición, sino para el libro Carlos Jurado y el arte de la aprehensión de las imágenes, publicado por la Dirección General Editorial de la UV, presentado ese mismo día en la FILU.

Entre otros, estuvieron presentes Adrián Mendieta; Per Anderson; Manuel González de la Parra, director del IAP; Carlos Torralba, director de la Facultad de Artes Plásticas; Javier Pucheta; Daniel Mendoza; Sergio Maldonado; Arturo Fuentes “El Chato”; Juan Carlos Valdez, director del Sistema Nacional de Fototecas; Alberto Tovalín, José Antonio Rodríguez y Byron Brauchli.