Veracruz-Boca del Río

Con financiamiento de la SE y del Conacyt Microna se fortalece con equipo de alta tecnología Adquirieron un cromatógrafo de gases acoplado y un microscopio electrónico de barrido de emisión de campo Alma Martínez Maldonado Boca del Río, Ver.- El Instituto de Micro y Nanotecnología (Microna) de la Universidad Veracruzana (UV) se coloca a la vanguardia con la adquisición de un cromatógrafo de gases y espectrómetro, así como un microscopio electrónico de barrido de emisión de campo, equipos que servirán para darle continuidad al proyecto “Desarrollo de catalizadores para la hidrosulfuración de gasolina y diesel”, financiados por la Secretaría de Energía (SE) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Teresa Hernández Quiroz, Leandro García González y Pedro García Ramírez

En este proyecto se realizan catalizadores de hidrosulfuración que permiten obtener diesel y gasolina de ultra bajo azufre, esto permite mejorar los combustibles actuales y proteger el medio ambiente, lo cual se traduce en un avance en la industria petroquímica.

Pedro García Ramírez, director de Microna, remarcó que es importante que la comunidad universitaria conozca que se poseen estos equipos multidisciplinarios porque su aplicación tiene injerencia en el ámbito biológico, farmacéutico, alimenticio, cosmético, petroquímico y ambiental.

Además, el uso de estos equipos también permitirá ofrecer servicios a otras facultades e institutos para el desarrollo de la investigación, colocando a la UV como punta de lanza en la región, agregó Pedro García.

Actualmente ya existe un microscopio en la Facultad de Ciencias Químicas campus Orizaba y otro en Servicios de Apoyo de Resolución Analítica, pero no son de última generación que permite una resolución más detallada, como el recién adquirido por Microna.

Ambos equipos se instalarán en el edificio nuevo que albergará los laboratorios del Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología.

Nuevas adquisiciones
El cromatógrafo de gases acoplado a masas de reciente adquisición consiste en dos equipos: un cromatógrafo y un espectómetro de masas, la función de ambos es separar los componentes de una muestra e identificar cada uno de ellos.

El cromatógrafo separa la muestra y el espectrómetro de masas puede identificar un compuesto puro, analiza muestras rápidamente de hasta un microgramo, mencionó Teresa Hernández Quiroz, investigadora de este Centro y encargada del manejo de este equipo.

Su uso es amplio: en la industria farmacéutica, identifica los diferentes principios activos; en la cosmética, señala algunos alérgenos presentes en cremas y perfumes; en la industria alimenticia, reconoce los componentes de un alimento, si tiene toxinas; en la contaminación ambiental, registra los componentes presentes en el aire, agua y suelo.

Por otro lado, el microscopio electrónico de barrido de emisión de campo que se compró permite la observación, división y caracterización superficial de materiales inorgánicos y orgánicos, entregando información morfológica del material analizado, explicó Leandro García González, investigador de Microna.

Con él se pueden realizar estudios de los aspectos morfológicos de zonas microscópicas de diversos materiales, además del procesamiento y análisis de las imágenes obtenidas.

El tipo de filamento que utiliza puede analizar sin ningún problema organismos orgánicos e inorgánicos, lo que abre el campo a otras áreas como la forense, biológica, energética, entre otras.

Un comparativo es que un microscopio óptico puede ver hasta mil x, mientras que un microscopio electrónico de barrido alcanza a observar hasta un millón x.