A través de la colección Singulares

Rescata Conaculta obra de autores poco conocidos

No sólo se nutre de autores rescatados de un injusto olvido, sino que también
lo hace de otros que, de una u otra forma, eran difíciles de hallar: Rafael Antúnez

Susana Castillo Lagos

A través de la colección Singulares, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) pone al alcance de los lectores –especializados o no– una gama de autores poco conocidos, de obras que solamente fueron editadas una vez o hace muchos años y que, de otra forma, serían muy difíciles de conseguir, en esto coincidieron los escritores Álvaro Enrigue y Rafael Antúnez, en el marco de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) 2011 de la Universidad Veracruzana (UV).

Antúnez expresó que la colección agrupa a un número de autores que literariamente comparten poco o nada, pues lo mismo se contempla a radicales como (Osvaldo) Lamborghini, que a incómodos polemistas como (Rubén) Salazar Mallén. Agregó que uno de los muchos aciertos de Singulares es que no sólo se nutre de autores rescatados de un injusto olvido, sino que también lo hace de otros que a lo largo del tiempo han corrido con un amplio reconocimiento crítico pero que de una u otra forma eran difíciles de hallar. Amén de su “atinado” catálogo, destacó las virtudes de su diseño editorial. A propósito de éste, Álvaro Enrigue, director Editorial de la Dirección General de Publicaciones (DGP) del Conaculta, explicó que cada portada se ilustró con un grabado hecho ex profeso.

Álvaro Enrigue

Rafael Antúnez

Mencionó que la premisa central de la colección es que fueran libros que tuvieron una sola edición –por lo cual sus ejemplares son muy difíciles o imposibles de conseguir– o que tengan mucho tiempo sin una edición reciente.

Algunos de los títulos que reúne la colección Singulares son Cuentos (casi) completos de Calvert Casey, Tadeys de Osvaldo Lamborghini y La ruina de la casona de Maqueo Castellanos. También se pueden encontrar libros de autores como José María Benítez y Pedro F. Meiret.