Dirección de Comunicación
Universitaria
Departamento de Prensa
Año 10 • No. 470 • Febrero 7 de 2012 Xalapa • Veracruz • México Publicación Semanal

Coatza • Mina • Acayucan

Con un enfoque sustentable

CIRES impulsa investigaciones
enfocadas al ahorro de energía

Cecilia Escribano

El Centro de Investigación de Recursos Energéticos y Sustentables (CIRES) de la Universidad Veracruzana (UV) realiza una serie de proyectos de investigación en materia de energía sustentables, en los cuales participan 12 estudiantes por semestre como investigadores.

Jorge Alberto Andaverde Arredondo, coordinador general del CIRES, comentó que el proyecto del Metro denominado “Diseño y construcción de un prototipo para generar energía aprovechando el aire desplazado por los trenes en movimiento”, a cargo de Carlos Rivera Blanco, cuenta con dos líneas de investigación.

La primera es aprovechar la circulación del aire dentro del interior de los túneles del Metro de la Ciudad de México, donde ya se han hecho mediciones y se ha obtenido una evaluación del potencial energético. Informó que como parte del proyecto, el lunes 30 de enero montaron los primeros aerogeneradores que producirán electricidad, los cuales serán evaluados durante un mes.



Perforación de pozos

La segunda línea de investigación es el acondicionamiento climático, debido a que en algunas estaciones del Metro se cuenta con bajas temperaturas y en otras altas; se evaluarán los procesos de intercambio de calor, para ello se hará la experimentación dentro de las instalaciones del Metro con la finalidad de probar cuáles son los mejores mecanismos de intercambio de calor con el interior de la tierra, “en este momento ya se tienen los diseños y los modos de perforación”, sostuvo.

Otro proyecto es el que se tiene con la empresa Mexichem, enfocado en la licuación de cloro; ya se realizó la simulación en el proceso de la licuación y se presentaron los resultados a la empresa. “Mexichem está comprometida con el mejoramiento de los procesos y con la generación de la energía eléctrica, es por ello que le ha pedido a la UV que se realice una evaluación energética de sus procesos para tratar de determinar qué otros métodos se pueden incluir para ahorrar la electricidad que la empresa consume”, afirmó Jorge Andaverde.

Los inicios del CIRES
A fines de los años ochenta y principios de los noventa comienza en la UV la insaciable necesidad de aumentar y profesionalizar los conocimientos en cuanto a energías se refiere, la visión y propuesta del entonces director de la Facultad de Ingeniería, Ciro Castillo, hizo que se impartiera un diplomado en energía, el cual fue un parte aguas para la Facultad.

“Hubo un gran número de asistentes tanto de la UV como de la industria petrolera; a raíz de ese diplomado se le dio la importancia en el aspecto energético a la región Coatzacoalcos-Minatitlán”, recordó Carlos Octavio Rivera Blanco, investigador de la Facultad de Ingeniería y miembro del CIRES.

Posteriormente, el deseo de expandirse no sólo a otras regiones sino también a otros países, hizo que se buscarán contactos en el extranjero. Cuba sería el primer objetivo y la Universidad de Matanzas permite la creación de la Maestría en Termoenergetica Industrial.

“La UV apoya a la creación de la maestría y por cuestiones de logística y disponibilidad de tiempo la toman los directivos de Ciencias Químicas, quienes se dan cuenta de su importancia; así, se apoya y beca a los profesores que toman la maestría. Cabe destacar que también asiste gente de la industria”, dijo Carlos Octavio Rivera.

El grupo de investigadores del CIRES comenzó a formarse por iniciativa del ingeniero Ciro Castillo, el maestro Alfredo Gonzales Fuente Villa y el doctor Carlos Octavio Rivera Blanco. Actualmente el grupo está conformado por 10 especialistas y se continúa reforzando con el apoyo de la Rectoría y la Vicerrectoría.

“La idea de crear el Centro de Investigación de Recursos Energéticos y Sustentables no es nueva, es consecuencia de una serie de pasos que se han venido dando; actualmente nuestro Rector apoya la idea que un grupo de Ingeniería le presentó a fines de 2010 y se da la aprobación.”

En octubre de 2011 se consolidó la creación del CIRES; Jorge Alberto Andaverde Arredondo fue nombrado coordinador general e hizo el compromiso de generar investigaciones que resuelvan problemas de la sociedad, la industria y el estado. Agregó que el CIRES se dedicará al desarrollo de iniciativas propias surgidas del quehacer diario de crear, preservar y difundir el conocimiento, centrándose en la formación de los estudiantes futuros responsables de la sociedad.

Previendo a futuro
A mediano plazo los miembros del CIRES planean consolidarse como un grupo fuerte en el que se lleve a cabo investigación en las áreas de energías tanto renovables como no renovables, además de formar fuertes vínculos y redes de investigación con otras universidades.

“Se ha creado una primera Maestría en Ingeniería, ya trabaja desde agosto del año pasado y queremos seguir creciendo con más maestrías y trabajos académicos de excelencia, que podamos destacar como universidad este año; tenemos dos especialidades en Refrigeración y Térmica y para este año tenemos pensado una en Energías Renovables”, finalizó, con la esperanza de un futuro prometedor.



Equipo de evaluación

Seis nuevos proyectos
Biocombustibles:
Se pretende encontrar nuevas especies para extraer aceite, se buscará la colaboración de la Facultad de Ingeniería en Sistemas de Producción Agropecuaria (FISPA), conocedores de la región de Los Tuxtlas, para que proporcionen un inventario de las posibles especies productoras del aceite. “Lo conveniente para este tipo de proyectos es que se pueda extraer fácilmente y que exista una buena cantidad de plantas”.

Refrigeración: A cargo de Carlos Octavio Rivera y José Vidal, el proyecto se enfoca en aprovechar el calor proveniente del sol para refrigerar y se pretende adaptarlo a la región de Coatzacoalcos; sin embargo, Jorge Andaverde afirmó que “se tiene que luchar con dos factores: la humedad y la corrosión de la zona”. Asimismo, dijo que “aunque esto se ha hecho en otros lugares, por ejemplo en México y Cuernavaca, se tiene que adaptar a las condiciones de Coatzacoalcos”.

En este momento el proyecto está en la etapa de pruebas, donde se están cargando los reactivos; además, ya se construyó el equipo de refrigeración solar intermitente, el cual durante el día origina un tipo de reacciones para aprovechar el calor del sol y durante la noche se utiliza para refrigerar.

Todos los proyectos de la UV “están enfocados a procesos energéticos ya sea para el ahorro de la energía o la generación de la misma; en el caso del proyecto de refrigeración se pretende el ahorro de la energía, además de poder utilizarlo en comunidades donde no hay acceso a la electricidad”, puntualizó Jorge Andaverde.

Simulación: Este proyecto, a cargo de Francisco Espinoza y Beatriz Escobar, radica en la simulación de los procesos físicos o químicos mediante una solución computacional numérica o matemática, es decir, que los procesos se desarrollan sin tener que hacerlos físicamente, esto trae ventajas como el bajo costo y distinguir las características para poder evaluar las condiciones en las que mejor se dan los procesos, teniendo esas condiciones se construyen los equipos y se da la evaluación experimental, además de evitar riesgos o accidentes.

Acondicionamiento climático: Se enfoca en tratar de acondicionar y climatizar las habitaciones a bajo costo aprovechando el calor del interior de la tierra. El proyecto está a cargo de Jorge Andaverde y Óscar Silva.

Se utiliza el calor del interior de la tierra (las condiciones térmicas), donde se usa la profundidad como sumidero de calor, es decir, retirar el calor de la habitación y enviarlo a la tierra.

“Se están diseñando intercambiadores de calor, se ha construido un equipo manual, sencillo y práctico para perforar pozos de seis metros de profundidad en menos de una hora, que sirvan para hacer mediciones, simular y experimentalmente poder probar los intercambiadores de calor.”

Este proyecto pretende sustituir los climas o pre-enfriar para utilizarlos en menor cantidad, beneficiaría a los usuarios por su bajo costo y representa un modelo geotérmico de coparticipación con los que ya existen, a fin de disminuir el consumo de energía eléctrica.

Energía eólica: Se cuenta con un convenio de colaboración con el Instituto de Investigaciones Eléctricas de Cuernavaca y el responsable del proyecto es Quetzalcóatl Cruz. Se enfoca en dos grandes líneas: en primer lugar, la evaluación de recurso energético para la generación de electricidad, en estos momentos ya se montó una torre en el campus Coatzacoalcos donde se mide temperatura, humedad y las condiciones de velocidad de viento; el objetivo es evaluar el recurso eólico con fines de generación de energía eólica.

El otro punto de este proyecto se enfoca en apoyar a las comunidades en la extracción de agua potable, se está haciendo la perforación de los pozos a bajo costo y el diseño e instalación de extractores que funcionen con la energía eólica en las comunidades.

Evaluación energética: Los responsables son Artemio Benítez y Ernesto Rodríguez, quienes lo enfocan en las condiciones de aporte de calor que se puede tener durante la combustión de la materia que se desecha en los ingenios, y que ese calor que se genera pueda servir para el proceso de la azúcar.

“Es como un reciclaje”, afirmó Jorge Andaverde, “todos los desechos que se tiran de la caña molida se evaluarán para utilizar su poder calorífico y aplicarlos a los procesos de refinación de la azúcar, es tratar de utilizar al máximo todas las propiedades que tiene la caña”; además, aclaró que se busca no dañar el medio ambiente.

Para finalizar, el entrevistado recalcó que todos los proyectos tienen en común los factores energéticos con el aporte de no contaminar.

En relación con el CIRES, sostuvo que la Facultad de Ingeniería adquirió madurez, “ahora nos dedicamos no sólo a las licenciaturas, sino a las maestrías, y se consolidó el CIRES que le da formalidad a los proyectos de investigación”.

Agregó que el compromiso de la UV y del CIRES es con el entorno social y preferentemente con los que menos tienen, “la Universidad utiliza los recursos del pueblo para el bien del pueblo”.