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Año 12 • No. 509 • Enero 28 de 2013 Xalapa • Veracruz • México Publicación Semanal

Nueva Sala de Conciertos de la Universidad Veracruzana

Bosque de niebla se extenderá en Tlaqná

Hiroyuki Okumura realizó modificaciones al mural para que no interfiera en la acústica

" Empecé como con un grano de arena, trabajé cada una de las dos mil 272 placas y cuando las vi montadas en los muros de la Sala de Conciertos no lo podía creer. Estoy muy contento con el resultado y a la vez estoy impresionado con las dimensiones”: Hiroyuki Okumura

Alma Espinosa

Tlaqná, la Sala de Conciertos de la Universidad Veracruzana (UV), se construye con tal detalle que se cuidan hasta las posibles variaciones en la acústica que podría ocasionar el mural que realiza el artista japonés Hiroyuki Okumura.

En entrevista con el artista, quien tiene 25 años de radicar en Xalapa, comentó que actualmente está enfocado en hacer pequeños ajustes a su obra, como suavizar el ángulo de los murales, pues hay partes muy profundas o cuadradas.

Las pequeñas modificaciones mejorarán la obra, aseguró Hiroyuki Okumura, quien dijo que las recomendaciones que le hizo el acustólogo Larry Kierkegaard enriquecerán la estética de los murales colocados en las cuatro paredes de la Sala de Conciertos.

Kierkegaard declaró en una entrevista que dio en septiembre de 2008 al periódico Universo (número 324) de la UV, que comentó con el arquitecto Enrique Murillo las condiciones que requerían los muros que forman la caja acústica para que el sonido fuera reforzado, distribuido y reflejado de manera ideal para los artistas y la audiencia.

En aquel entonces, el acustólogo dijo que se requerían materiales que le den una “pátina” al sonido, que lo pulan, y fue así como el arquitecto Murillo sugirió invitar a Okumura para que realizara los murales para la Sala de Conciertos. A partir de esa idea el artista comenzó a trabajar con ellos para definir el espacio y los materiales que debería ocupar para crear una obra de amplias dimensiones.

La obra de arte de Okumura comenzó hace poco más de cinco años con un boceto que tuvo que cuadricular para trabajar los murales por placas. “Al inicio era una locura porque es la primera vez que realizo una obra tan grande. Tenía un boceto con el dibujo que imaginaba, pero realizarlo en esta dimensión es otra cosa.

”Empecé como con un grano de arena, trabajé cada una de las dos mil 272 placas y cuando las vi montadas en los muros de la Sala de Conciertos no lo podía creer. Estoy muy contento con el resultado y a la vez estoy impresionado con las dimensiones”, expresó.

El artista detalló que cada placa le implicó esfuerzos y tiempo distintos, incluso llegó a tardar tres horas en una placa por la cantidad de capas que tiene, además de que tenía que hacerlas en negativo para que el vaciado saliera en positivo. En total tardó nueve meses de trabajo intensivo de 16 a 18 horas sin descansar, “era como un maratón que estaba corriendo”.

Al hablar del detalle de los murales, comentó que están inspirados en Xalapa, su neblina, su gente y edificios. El nombre que le dio a su obra es Bosque de niebla. Sobre los materiales dijo que es precolado de concreto de cemento blanco mezclado con grano de mármol para que tenga la textura y consistencia parecida a la piedra.

En la actualidad, Hiroyuki Okumura trabaja de 7:00 a 19:00 horas y con ello consideró que en dos meses estará lista su obra, pues lo único que falta es darle los retoques y limpieza. Posteriormente supervisará la iluminación ya que es importante para el resultado final de la obra.