UV promueve y garantiza igualdad de género en su interior

En el marco del Día Internacional de la Mujer, desarrollaron el taller “Violencia: Acoso y hostigamiento sexual”, con la participación de académicas y académicos de los cinco campus

Karina de la Paz Reyes

El Día Internacional de la Mujer no es para festejar, ni para regalar o recibir flores y dulces, sino para hacer un recuento de los avances y logros a favor de la equidad de género.

“Tenemos que pugnar porque las leyes se manejen con una perspectiva de género, y no nada más se castigue”, enfatizó María de Lourdes Lidia Guzmán Ibáñez, académica de la Facultad de Psicología, campus Veracruz-Boca del Río.

En ese sentido, recalcó que el feminicidio sigue siendo un grave problema en la entidad, un asunto del que pocos hablan.

A propósito del tema, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía publicó el 5 de marzo del presente año que entre 2007 y 2010 la tasa de defunciones por homicidios en las mujeres pasó de dos a 4.4 por cada 100 mil mujeres en el país.

Guzmán Ibáñez es integrante del Programa de Equidad y Estudios de Género de la UV y participó en el Taller “Violencia: Acoso y hostigamiento sexual”, que se impartió los días 4 y 5 de marzo en el Salón de Usos Múltiples del Instituto de Salud Pública de esta institución, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

En entrevista, Guzmán Ibáñez consideró que en la UV se viven momentos importantes, al abrirse a temáticas que durante mucho tiempo fueron consideradas tabú.

“Creo que es importante entender que hay un problema de inequidad, que hay un problema de violencia de género, algo que tenemos que abordar las académicas –en primera instancia– para poder convencer a los académicos e intervenir en aquellas áreas en las que necesitamos generar nuevas oportunidades de relaciones.

”Nosotros como docentes tenemos el compromiso de formar profesionales íntegros que tengan expectativas y la experiencia de que hay formas diferentes de relacionarnos hombres y mujeres”, expresó.

Compartió que en investigaciones realizadas al interior de la comunidad estudiantil, identificó que hay poca información respecto al tema del acoso y hostigamiento sexual.

“Nos dimos cuenta de la importancia de hacer visibles este tipo de problemas, porque lo que no tiene nombre, no puede ser definido.

Quizás, estoy acostumbrada a que en el autobús se paren cerca de mí y me toqueteen, pero lo justifico como una práctica cotidiana y no me doy cuenta que tengo derechos”, ejemplificó.

En ese contexto, la investigadora destacó que un grupo de académicas de la UV –al tener las mismas inquietudes– se unieron para crear el Programa de Estudios en Equidad de Género. “Vamos orientadas y orientados en equipo a tratar de resolver esos conflictos”.

Otra de las participantes del taller, Dalia Xiomara Ceballos Romero, responsable del Área de Educación Continua de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI), compartió que para el caso de las cuatro sedes, este tipo de actividades académicas está siendo muy pertinente: “Vemos mucha congruencia entre las necesidades que se tienen y que se han detectado entre el estudiantado y profesorado en las cuatro sedes”.

Incluso, adelantó que planean replicar este taller en las cuatro sedes de la UVI, toda vez que trabajar por la equidad de género en la UV –incluida la UVI– es una iniciativa que debe ser acogida por la comunidad universitaria en general. “Estos talleres hay que ampliarlos a todas las facultades e institutos que forman parte de la Universidad.

Tienen una importancia crucial, pues como comunidad académica no podemos dar la espalda o negar que existe discriminación y violencia, y qué mejor que empezar por casa, siendo conscientes, sensibilizar sobre el tema y capacitar.”

La encargada de impartir el taller fue Laura Martínez Rodríguez, directora y fundadora de la Asociación para el Desarrollo Integral de Personas Violadas, A.C (Adivac), que tiene como sede la Ciudad de México.

Martínez Rodríguez enfatizó que la importancia de que se impartan cursos de esta naturaleza en la UV, radica en aprender a identificar ciertos tipos de violencia, que se viven pero que sin embargo no se perciben.

Mencionó que las personas que tomaron el curso fueron 23 mujeres y un hombre. “Ahí es donde se ve la necesidad de invitar a toda la población para que se sumen a este trabajo de la erradicación de la violencia de género en un espacio como éste”. Recalcó que el ámbito académico, desde el punto de vista social, es de mucho impacto.

Al tiempo que consideró que desde la academia se pueden hacer múltiples actividades que contribuyan a la erradicación de la violencia, “pero la cuestión es que haya voluntad”. Tristemente, según distintas estadísticas, quienes más están viviendo este tipo de acoso, hostigamiento y violencia sexual, son las mujeres.

De ahí la importancia de concienciar a la población universitaria, pues en ocasiones la violencia –ya sea verbal, emocional y/o física– que padecen proviene de personas que tienen algún tipo de autoridad dentro de los espacios académicos, apuntó la presidenta de la Adivac.

En ese sentido, reconoció la iniciativa de la UV por contribuir en la erradicación de la violencia de género con la impartición de talleres, como el que tuvo a su cargo.

De igual manera, propuso que se involucre cada vez más a la población estudiantil, que habitualmente está en función de la guía del sector académico.

“Yo veo mucho interés, veo que todas las integrantes del taller están conscientes, sensibles. Algunas apenas están ingresando a este ámbito, pero se ve mucho compromiso.”

Para lograr que en una institución pública, como en la UV, haya una equidad de género, es necesario “caminar juntos, hombres y mujeres, eso generaría una sociedad más igualitaria”, serían valores que se transmitirían a las nuevas generaciones, lo que generaría un ambiente libre de violencia, dijo.

Laura Martínez dejó un mensaje para la comunidad académica y universitaria: “Hablen, no tengan miedo. Si están viviendo algún tipo de violencia díganla, y no sólo la que están viviendo dentro de la Universidad, también la que puedan estar viviendo en sus casas, con su pareja”.

Por otro lado, aconsejó empezar a cambiar esas formas de ser “hombre” y ser “mujer” para lograr una sociedad más armoniosa.

En tanto, la coordinadora del Programa de Equidad y Estudios de Género de la UV, María Eugenia Guadarrama Olivera, explicó que este taller fue una más de las actividades que realizan con apoyo del Programa Integral de Fortalecimiento Institucional de la Secretaría de Educación Pública.

Rememoró que el Programa de Equidad y Estudios de Género fue fundado hace dos años, con el propósito de impulsar actividades en la docencia, investigación y capacitación, para sensibilizar a la comunidad universitaria sobre las problemáticas de desigualdad e inequidad que existen en varios ámbitos.

La también investigadora del Instituto de Investigaciones Psicológicas aclaró que normalmente se piensa que en la Universidad –por estar conformada por personas preparadas ampliamente en diversas disciplinas– la inequidad de género no existe; sin embargo, a través de los talleres que se han impartido en los cinco campus, se identifican casos que revierten esa idea.

“Ya tenemos una Defensoría de los Derechos Universitarios, y considero que necesitamos que haya personas que puedan atender los casos de inequidad de género”, consideró.

Respecto al Programa de Equidad y Estudios de Género de la UV, dijo que le corresponde capacitar, informar y formar en los cinco campus que conforman a la institución.

Por tal motivo, dentro del citado programa, desde hace año y medio se conformó la Red Universitaria de Estudios de Género, donde participan alrededor de 30 académicos y académicas de los cinco campus.

“En la red damos experiencias educativas electivas como Perspectiva de Género en las Universidades, y cada uno de nosotros y nosotras tenemos nuestra experiencia con una perspectiva de género o con temas específicos, y eso va promoviendo el tema”, concluyó.