Sus egresados encuentran empleo

Filosofía: 58 años de amor a la sabiduría

"Se ha generado una cultura académica que incorpora la investigación y la vinculación”: Marcelino Arias Sandí

La Facultad tiene el reto de mejorar las cifras de su matrícula

David Sandoval

El 18 de febrero de 1956, hace 58 años, se fundó la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Veracruzana (UV), siendo su primer director Fernando Salmerón Roiz, quien posteriormente se convertiría en rector de la institución de 1959 a 1963, mientras que la trayectoria de la Facultad se desplazaría de una orientación a la docencia en sus orígenes, a las tareas de investigación y vinculación con las cuales cumple hoy en día.

Las primeras instalaciones de la Facultad se compartieron con Pedagogía, en el edificio con el número 55 de la céntrica calle de Juárez, y posteriormente se separó de Letras, que se convertiría en Letras Españolas.

Marcelino Arias Sandí, actual director de la Facultad, comentó que ésta se creó con la idea de formar docentes, “con una orientación ortodoxa, abordando la historia de la filosofía y lógica en particular”.

Actualmente se ofrecen 70 lugares en cada periodo escolar y la mayoría de sus egresados transitan hacia el posgrado en la UV o en otras universidades.

Señaló además que su planta docente se ha ido modificando. “Tenemos actualmente profesores con maestría y doctorado, algunos forman parte del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), nos vinculamos bastante con nuestros posgrados, tanto la maestría que forma parte de la Facultad, como el doctorado que se imparte en el Instituto de Filosofía”.

Arias Sandí puntualizó que de esta Facultad surgió la iniciativa, con la puesta en marcha del Modelo Educativo Integral y Flexible (MEIF) –entonces conocido como Nuevo Modelo–, de la creación de un área básica de formación general que abordara en particular las habilidades del pensamiento crítico y creativo, impulsado originalmente por el profesor Ariel Campirán Salazar.

En ese sentido, subrayó que Filosofía fue una de las primeras en integrarse al MEIF, cuando fue directora Angélica Salmerón Jiménez. “A lo largo de los años se ha participado con mucha iniciativa en los programas universitarios y su fortalecimiento, considerando la calidad de los egresados”.

Refirió que se ha generado una cultura académica distinta al interior de la Facultad, “menos centrada en la docencia y que incorpora la investigación y la vinculación, lo que ha fortalecido en gran medida la formación de los estudiantes”.

Por otro lado, se cuenta con vínculos en cuestiones de fenomenología con universidades como la Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, “en cuestiones de hermenéutica con universidades de Argentina, y en cuestiones de epistemología con Colombia; es decir, vamos creando redes con profesores de otras instituciones, ha sido un proceso de consolidación a lo largo de los años”, dijo.

Actualmente todos los académicos publican, agregó: “Básicamente 90 por ciento están publicando en revistas nacionales e internacionales como en libros colectivos e individuales”.

Cuentan con un cuerpo académico consolidado –Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación en la Sociedad del Conocimiento– que es coordinado por José Antonio Hernanz Moral, actual titular de la Dirección General de Desarrollo Académico e Innovación Educativa.

“La Facultad ha ido consolidándose en la lógica del desarrollo de la UV durante los últimos 20 años, lo que la ha
fortalecido; los estudiantes participan en eventos con ponencias desde el segundo semestre”, agregó.

Arias Sandí mencionó que el primer premio “Arte, Ciencia, Luz” a trabajos recepcionales, lo ganó Jesús Alberto Islas Aguilera, estudiante de la licenciatura, además obtuvieron menciones honoríficas Víctor González Osorno y Rubén Sánchez Muñoz, al igual que Dhalia Antonio Romero, ganadora en tesis de posgrado egresada de la Facultad,
aunque cursaba la Maestría en Literatura Hispanoamericana.

Marcelino Arias Sandí

Remedios Álvarez

Maestría en PNPC y licenciatura acreditada en Coapehum
La Facultad es sede de la Maestría en Filosofía “y se puede garantizar un núcleo académico de buen nivel” dado que sus profesores tienen doctorado e inclusive son miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y forman parte del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

“Al día de hoy son tres las generaciones de maestría que han sido beneficiadas con el recurso de la beca Conacyt, que representan un total de 96 por ciento del total de los estudiantes matriculados desde 2011.”

Precisó que desde 2009 el programa de licenciatura de la Facultad fue acreditado por el Consejo para la Acreditación de Programas Educativos en Humanidades (Coapehum) y este año se buscará su reacreditación.

“Ha habido un trabajo colaborativo al interior de la Facultad y hay un esfuerzo de los académicos para prepararse y mejorar su perfil, así como el apoyo de las autoridades universitarias”, mencionó.

Entre los retos que tiene la entidad está mejorar las cifras de la matrícula y la retención de los estudiantes, así como acortar los tiempos de titulación, reconoció.

Filosofía se encuentra en una nueva etapa dado que la Facultad de Pedagogía se ha trasladado a las nuevas instalaciones localizadas en el Arco Sur, por lo tanto habrá aulas disponibles para impartir experiencias educativas durante la mañana, explicó Arias Sandí, porque durante muchos años la mayoría se cursaban por la tarde, ello redundará en que los estudiantes acomoden sus horarios de acuerdo a sus necesidades.

Orgullosos egresados
Remedios Álvarez Santos es actualmente coordinadora de la Maestría en Filosofía y “orgullosamente egresada de la Facultad en 1994”, posteriormente cursó una maestría en humanidades en la Universidad Anáhuac y un doctorado en la UNAM.

“Siempre tuve la idea de regresar a mi Facultad, regresé a hacer una estancia posdoctoral al Instituto de Filosofía y al finalizar dicha estancia comencé a coordinar la maestría en septiembre de 2011”, detalló.

“He de decir que estoy muy feliz de regresar y hacer lo que me apasiona: la academia, la investigación y actualmente soy parte del SNI.”

Álvarez Santos opinó que la filosofía “sigue siendo una justificación en mi vida, la docencia y la investigación le otorgan a mi vida un inmenso sentido, si me dieran a elegir nuevamente qué carrera estudiar, diría Filosofía. Es mi eje y es lo que me orienta, me sigue apasionando”.

Consideró que la filosofía es un modo de vida que no radica solamente en aprender manuales de memoria, “es mucho más que eso, es una congruencia entre el pensar y el hacer, entre el saber y el hacer, esto, en muchos sentidos lo provee la disciplina”.

No obstante reconoció que hay profesores que en la práctica se distancian de lo que han aprendido, alejándose de la definición etimológica de filosofía que significa “amor a la sabiduría”; “es un compromiso, en mayor medida cuando uno se dedica a la docencia”.

Subrayó que con la finalidad de que la filosofía incida no solamente en los estudiantes sino en la sociedad, es importante que se vincule con todas las disciplinas y salir “de esta especie de nicho en la que se ha enfrascado durante los últimos años, siempre estoy siendo incisiva con eso, tenemos que vincularnos cada vez más”.

En el sector educativo se tienen los vínculos entre instituciones, sin embargo falta una vinculación con el sector empresarial, falta establecer estos puentes inclusive con las ciencias duras como la ingeniería.

Para la académica es necesario dar ese salto y una de las cuestiones que ayudarían a hacerlo posible es “la desprofesionalización de la filosofía, como dice Richard Rorty, el filósofo no es quien tiene un montón de títulos en sus paredes, es quien se apropia de la filosofía y en la vida diaria muestra esa conformación”.

Luis Antonio Romero García, profesor en la Facultad desde hace cinco años, ha impartido las asignaturas de Lógica, Ética, Antropología Filosófica y Teoría del Conocimiento y expresó que “estudiar filosofía cambió por completo mi vida, no sólo a nivel profesional sino de mi vida en general. Lo he dicho antes en muchos foros: puedo dividir mi vida en dos, antes y después de estudiar filosofía; cambió mi forma de ver el mundo, la realidad, la sociedad, mi forma de pensar”.

Romero García afirmó que a nivel profesional le dio herramientas para insertarse en el mercado de trabajo, donde comenzó de forma tradicional, como profesor de bachillerato, posteriormente cursó la Maestría en Filosofía y actualmente cursa el doctorado en la UV.

“Suena romántico pero disfruto ver cómo de momento con algunos cuestionamientos filosóficos se sorprenden los alumnos, sobre todo de nuevo ingreso, observo mi pasado como estudiante y trato de no cometer los errores que posiblemente cometieron conmigo mis formadores, para mí es un orgullo estar aquí después de haber sido formado en la Facultad.”

Félix Aude Sánchez es profesor en la Facultad desde hace 12 años, egresó en 1997 y comentó que cuando recién salió tuvo la oportunidad de impartir asignaturas de todo tipo. Con el transcurso de los años se enfocó a la asignatura de Historia de la Filosofía.

“Tuve la oportunidad de seguir estudiando y prácticamente tengo la sensación que desde que entré –en 1993– estoy aquí, realmente nunca me fui; en ese sentido sí tengo un fuerte apego a la Facultad. Un sentido de identidad fuerte con la institución.”

En su caso, y a diferencia de muchos de sus compañeros, el apoyo de su familia fue patente, no obstante a que se inclinaba por estudiar una carrera relacionada a la comunicación le sugirieron estudiar Filosofía. Accedió y su primer semestre fue excelente, “lo demás vino solo y me gustó, aunque no había tenido un contacto previo con la disciplina, fuera de lo visto en preparatoria que eran clases dadas por profesionales en otras áreas”.

Aude Sánchez aseveró que “hasta que llegué a la UV tuve contacto con la filosofía y fue una actividad que me llenó, me abrió una visión diferente de ver las cosas, de entender mi contexto, tuve la oportunidad de quedarme aquí y ha sido muy interesante, sí lo veo como un proyecto de vida”.

Consideró crucial que en su hogar natal siempre hubiera literatura, desde novelas hasta periódicos, “eso alimentó en mí el hábito de la lectura y creo fue lo que me dio las herramientas para llegar aquí y comenzar a leer filosofía; el hábito y la disciplina de leer fue el gran legado que me dejó mi padre”.

Actualmente cursa el Doctorado en Filosofía donde realiza una investigación de corte histórico analizando a un autor del siglo XVII, Carlos de Sigüenza y Góngora, quien es poco estudiado, no obstante fue prolífico y sus obras se han ido perdiendo.

El personaje es autor de la obra La libra astronómica y filosófica que analiza con el objetivo de tratar de establecer las relaciones del pensamiento escolástico y medieval con el pensamiento ilustrado en la Nueva España, así como buscar las relaciones del autor con otros escritores europeos.

Luis Antonio Romero

Félix Aude Sánchez