Año 2 • No. 68 • julio 1 de 2002 Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


 Páginas Centrales

 
Información General

 
Date Vuelo

 
Compromiso Social

 
Arte Universitario

 
Inter Nautas

 
Halcones al Vuelo

 
Tus cartas

Observatorio
de la ciencia


 
Contraportada


 Números Anteriores


 Créditos

  Más barata e inofensiva para el ambiente
C a z a b r o c a s
Nuestra arma efectiva contra la plaga del café
Enrique Bravo Morales
Antecedentes

El cultivo del cafeto constituye un importante renglón en la producción agrícola de Veracruz y el país, que cubre la demanda interna y parte del mercado internacional. La industria del café, además, es una importante fuente de empleo en los diferentes procesos que la abarcan: producción, cosecha, comercialización e industrialización.
La plaga más perjudicial de este cultivo es la broca del grano de café (Hypotheneus hampei), que puede ocasionar pérdidas de hasta el 80 por ciento de la producción.
Antonio García Hernández, catedrático de la Facultad de Ciencias Agrícolas, estudioso de la broca y las formas para combatirla, revela el origen de esta plaga, que apareció por primera vez en África en 1901 y llegó a América por un productor brasileño, en su afán por traer semillas o granos mejorados.
Esta plaga comenzó a dispersarse rápidamente por el Continente Americano hasta llegar a México, donde fue detectada por primera vez en el ejido Mixcum, municipio de Cacahoatán, Chiapas, en 1978, donde estuvo confinada durante 11 años hasta que en 1989 apareció en Oaxaca y en 1991 en cafetales de Puebla y Veracruz.
“Actualmente, la región de Coatepec, libre de broca hasta hace poco, tiene un problema muy serio de infestación de esta plaga, generado en parte por la baja de los precios del café, lo que ha ocasionado que grandes cantidades del producto se quede en el campo aumentando los niveles de infestación que comienzan a igualarse tanto en la zona alta como en la baja”, indicó.
El daño en el fruto comienza a manifestarse en junio, julio y agosto, temporada en la que la broca penetra para poner dos o tres huevos por día que, al eclosionar, se convierten en larvas que agusanan el café.
Esta etapa dura alrededor de dos semanas en las cuales los gusanos de la broca se comen el fruto.
En 28 días se desarrolla una generación de brocas (de larva a adulto) en un ciclo reproductivo corto, que en caso de no ser controlado, aumenta rápidamente la incidencia
de la plaga.

Control

Según la Norma Oficial 002 fito 2000, que establece la campaña contra la broca del café, de la Comisión Nacional de Sanidad Agropecuaria, expone que la broca del grano del café sólo puede controlarse a través de un manejo integral, lo que significa que se tiene que hacer uso de todas las alternativas de control.
Una de las técnicas para controlar la plaga es la recolección de frutos que hayan quedado en la planta después de la cosecha, para evitar que éstos se infecten y contagien próximas cosechas. Otras de las acciones es la regulación de la sombra de los cafetales y la eliminación de maleza, ya que un exceso de éstas favorece el desarrollo de la plaga.
Otro de los controles a realizar es el biológico, sustituto de los insecticidas químicos, con la aspersión del entopatógeno Beauveria bassiana durante julio, agosto y septiembre, en dos o tres aplicaciones a intervalos de 20 a 30 días entre una y otra, dependiendo de los porcentajes de infestación.
El problema con esta técnica es que necesita de humedad relativamente alta para que sea efectiva, lo que hace que en meses secos este método no funcione.

 
BICHO DESTRUCTOR
La broca es un insecto diminuto (gorgojo) del tamaño
de la cabeza de un alfiler, que penetra el fruto del café
entre los 80 y 120 días después de la primera floración, temporada en la que se debe tener el mayor cuidado.

 

Trampa cazabroca... alternativa de la UV

Otro de los controles es el propuesto desde 1995 por la Universidad Veracruzana. Desde entonces, Antonio García Hernández ha logrado resultados significativos en el combate de esta plaga.
El docente e investigador ha impartido cursos para fomentar esta técnica universitaria a fin de combatir la plaga en Guerrero, San Luis Potosí, Hidalgo y Puebla, cuya característica principal
es el bajo costo en la fabricación de la Trampa cazabrocas.
Actualmente, el tipo de control propuesto por García Hernández recomienda colocar 16 trampas por hectárea; éstas deberán ser instaladas en un lugar sombreado y sujetas en el tercer medio de la planta.
“El modelo de trampa lo decide el productor, puede ser de platillo o de botella; como están hechas de plástico, no exceden los 60 pesos por hectárea, incluso estos precios se pueden reducir con la utilización de materiales reciclados”, explicó el investigador.
El éxito de la Trampa cazabrocas ha sido validado y difundido por la Dirección General de Sanidad Vegetal de México, que evaluó este trabajo y lo integró como una alternativa más de control para la broca del grano de café al publicarlo en la Norma Oficial 002 fito 2000, además de su inclusión en el manual técnico del Manejo integral de la broca del café en México.

LA TRAMPA
Dentro de la trampa se coloca un cuadrito
de corcho, de tres por tres centímetros, empapado en un líquido atrayente que
se hace mezclando alcoholes etílico y metílico con café cereza maduro trillado. La proporción para la mezcla es de 400 mililitros de alcohol metílico y 600 mililitros de alcohol etílico por cada kilo de café cereza. La mezcla se remueve media hora para lograr la homogeneidad y posteriormente se cuela y se almacena en un lugar fresco y sombreado.

Visita a finca de café

Los productores que han trabajado con esta técnica, en su aplicación práctica en campo, afirmaron que es efectiva.
Magdaleno Texo, encargado de la fabricación y posterior colocación de las trampas en la finca Costa Rica, en Tuzamapan, Coatepec, explicó que tienen dos meses poniendo trampas, cambiándolas constantemente para que la broca no se reproduzca, y los resultados han sido favorables.
“Sí resultan las trampas, a veces cuando vamos a cambiar las trampas, cada ocho o 10 días, vemos que hay recolectadas unas mil brocas. Con las trampas sí se va combatiendo”.
Comentó que para la construcción de las plantas ocupan dos botellas de refresco, una de un litro y una de dos litros: “La de a litro sirve para acumular la broca y se utiliza el pico de la botella a manera de cono con un agujero para que el insecto pueda oler el corcho y se introduzca en la trampa; también usamos la trampa de platillo, que es más favorable porque la cubre para que no se le meta el agua cuando llueve.
UN POCO DE HISTORIA
Esta plaga apareció por primera vez en Veracruz, en el municipio de Tezonapan, y debido a la libre movilización del producto, esta plaga empieza a volverse un problema para la cafeticultura estatal, al dispersarse en aproximadamente 80 mil de las 152 mil 400 hectáreas cultivadas de café extendidas en 82 municipios del estado
“Uno trata simplemente de combatir lo que es la broca, haciendo lo indispensable, poniendo 16 trampas por hectáreas y cambiándolas regularmente. En nuestro caso, hay una besana (primer surco del área de cultivo) llamada La Cruz, donde al cambiar el corcho me di cuenta que estaba plagada, así que le puse más trampas, para que cayera más la broca y no afectara el café que ya está naciendo”.
Por su parte, Carlos Hernández Yáñez, administrador general de las fincas, afirmó que desde que García Hernández los asesoró en el uso de las trampas, el control de la broca ha funcionado mejor: “Siento que es efectivo porque es mejor que echar químicos y no daña al café. Desde el momento que nos indicaron cómo se debía trabajar, capacité personal para aplicar estas trampas y nos han funcionado muy bien en las 29 hectáreas que tenemos”, aseveró.
La trampa cazabrocas, es validada y difundida
por la Dirección General de Sanidad Vegetal de México