|
|
Proyecto
de Desarrollo Urbano y Cultural para Plan del Río
Buscan rescatar nuestro pasado
Ricardo Luna Aburto |
|
Durante
muchos años, al recorrer la carretera que va del puerto de
Veracruz a la ciudad de Xalapa, la poderosa atracción que ejercen
las elevaciones de la región me hicieron fijar la mirada hacia
lo que parecía una pequeña fortaleza cubierta de maleza,
ubicada en el poblado conocido como Plan del Río.
Con el paso del tiempo y preguntando a las personas de la localidad
sobre el origen y utilidad de la maltrecha |
barbacana,
la historia se fue despejando: se trataba de un pequeño fortín
militar que en la época de la Independencia sirvió para
resguardar las mercaderías que provenían de la Ciudad
de México, siendo incluso en tiempos de la Conquista el camino
por donde varios cargamentos preciosos salieron de nuestro país
hacia Europa.
Sin embargo, según nos explica Alfonso García y García,
del Instituto de Antropología de la uv, Plan del Río
es una de las comunidades que, aunque pequeñas, siempre han
tenido un lugar importante dentro de la historia de nuestro país.
Por ejemplo, este sitio fue cuna de culturas prehispánicas,
según lo demuestran los restos de edificios, materiales cerámicos
y líticos encontrados en el lugar.
No obstante, su historia es poco conocida por el casi nulo trabajo
arqueológico e histórico en el sitio. La historia indica
que después de la llegada de Hernán Cortés a
Veracruz, Plan del Río se convirtió en un lugar propiamente
de paso. Fue la ruta por la cual este conquistador llegó a
Tenochtitlán, a través de los caminos prehispánicos
que se conocían en aquel momento. |
 |
Algunos
nombres
A Plan del Río se le conocía antiguamente como el Plan,
porque su composición superficial reúne una serie de
valles y elevaciones naturales a su alrededor.
Entre 1525 y 1530, en las cartografías de la época aparece
ya como la "Penja" del Plan del Río, uno de los tantos
nombres que se le han dado a esta comunidad.
Durante los siglos XVI y XVII se le conoció como el Plan y
La Venta de Arroyo, y no fue sino hasta el XVIII cuando se |
le
dio el nombre de Plan del Río, calificativo que describe bastante
bien al lugar por su orografía, ya que la comunidad se asienta
en una planicie, rodeada de elevaciones y del río Grande, afluente
que según cronistas tenía agua cristalina y de buen
sabor.
Su historia
Durante la Independencia, esta comunidad siguió siendo camino
obligado de las mercaderías que procedían del altiplano
al puerto de Veracruz, de donde se trasladaban al puerto de Cádiz,
España.
A partir de 1810, cuando inició el movimiento independentista
en México, los insurgentes ocuparon y controlaron todo ese
territorio, por lo que las líneas comerciales entre Veracruz
y Cádiz se suspendieron.
Para 1814 llegó al puerto de Veracruz un brigadier caraquense
de nombre Fernando Miyares y Mancebo, al frente de una compañía
de 2 mil soldados, divididos en cuatro órdenes militares. Ellos
iniciaron un recorrido de inspección entre Veracruz y Xalapa
y se dieron cuenta de lo inestable que se encuentraba el Camino Real,
debido a la incursión de rebeldes al mando de Guadalupe Victoria.
Al dar cuenta de ello a sus superiores, Fernando Miyares comenzó
la construcción de un camino de Perote al puerto de Veracruz,
con una serie de estaciones militares y fortificaciones para restablecer
el orden y el comercio en la zona.
Así, este brigadier mandó construir una serie de baluartes
que inician en Perote (la Fortaleza de San Carlos), La Joya, El Lencero,
Cerro Gordo, Plan del Río, El Órgano, Rinconada, La
Calera, La Antigua, hasta llegar al puerto de Veracruz.
Estas obras se terminaron aproximadamente en 1815, y uno de los edificios
más importantes dentro de las construcciones militares que
se ubican en esta franja es precisamente el de Plan del Río. |
Según
Alfonso García y García, Plan del Río
y su baluarte son claro ejemplo de las construcciones militares
del siglo XIX en la entidad |
|
 |
Fortificación
única
Alfonso García y García indica que, como parte de los
trabajos que se han iniciado en la zona (proyecto de Desarrollo Urbano
y Cultural para ese municipio), han encontrado una fortificación
única en su tipo, pues cuenta con dos niveles en forma heptagonal.
A diferencia de otras fortificaciones, señala, el edificio
presenta una construcción destinada propiamente a la |
asignación
militar o estrategia militar, de ahí que su ubicación
estuviera flanqueada por dos de los principales ríos de la
región.
Agrega el investigador que esto refuerza lo que en algunas crónicas
se menciona: "No había punto que no estuviera al alcance
del fusil o del cañón; el fortín tenía
un punto geográfico sumamente estratégico, lo que lo
convierte en la construcción militar más importante
de
la zona".
Considerado atípico desde el punto de vista arquitectónico,
el fortín podía albergar hasta 80 soldados, y almacenar
hasta 30 mil raciones de comida, 230 mil cartuchos de fusil, 500 tiros
de cañón y 600 granadas. Estaba construido con base
en materiales no perecederos como piedra, mortero de cal y arena,
y el acceso principal se encontraba en el segundo nivel, a fin de
resguardar la edificación. Tal y como lo presentan las construcciones
de San Juan de Ulúa o la Fortaleza de San Carlos. |
A Plan
del Río se le conocía antiguamente como el Plan,
porque su composición superficial reúne una
serie de valles y de elevaciones naturales a su alrededor |
|
|
Actualmente,
la fortificación conserva sus paredones originales y es muy
posible restaurarla, pues según los análisis estructurales
que se han hecho, contaba con un sistema de viguerías que ya
no existe pero que se puede reinstalar, para consolidar su reconstrucción.
El coordinador del proyecto de restauración del fortín
de Órdenes Militares, en colaboración con los investigadores
Luis Sánchez Olvera, José Eliseo Castillo Fuentes y
José Manuel Castillo Fuentes, sostiene que el proyecto de consolidación
para este fortín incluye detener el proceso de deterioro del
único edificio militar del siglo xix en nuestro estado.
Otra ventaja es que su rehabilitación podría generar
atracción turística en la región, misma que la
comunidad |
La restauración
de este fortín serviría como detonante
económico para la zona, al convertir al museo de sitio
en un elemento captador de recursos invaluables |
|
podría
utilizar para su bienestar, así como consolidarlo como un símbolo
que le dé realce a la región. Se pretende reconstruir
el inmueble y convertirlo en museo de sitio donde se difundan los
hechos sociales y culturales relevantes de la región durante
el siglo xix. Lo anterior serviría como detonante económico
en la zona, al convertir al museo en un elemento captador de recursos
económicos para los habitantes de Plan del Río, Veracruz. |
Alfonso
García y García indica
que esta es una fortificación única
en su tipo, pues cuenta con dos niveles en forma heptagonal |
|
|
|
|