Año 3 • No. 87 • enero 13 de 2002 Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


 Páginas Centrales

 Información General

 
 
Foro Académico

 
Arte Universitario  

 
Observatorio
 de la Ciencia

 Internautas

 
Date Vuelo

 
Contraportada


 Números Anteriores


 Créditos

 
La historia se construye: Michael Ducey
Iván Javier Maldonado Rosales

Michael Ducey.
Sotavento “es una revista de gran calidad, posee un trasfondo teórico bastante bien desarrollado y creo que hace una contribución muy significativa a la comunidad histórica y social en México. Entre quienes les interesa la historia y las cuestiones sociales en México tiene buen nombre”, dijo el historiador Michael Ducey a propósito de la presentación de dicha publicación, órgano oficial del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la Universidad Veracruzana.

A partir de los ejes que maneja esta revista de estudios regionales, se conversó con el doctor Ducey, quien es investigador de la Universidad de
Colorado en Denver y se ha especializado en la historia de México, particularmente en el estado de Veracruz durante los siglos XVII y XIX.

Antes se concebía a la historia como un gran proceso que hacía tabula rasa de lo regional, y ahora pareciera que estamos ante un cambio, interesa la historia de los hombres, se le cuestionó a Ducey. “Aquí van varias cuestiones. Primero, la historia siempre se ha escrito tradicionalmente en México y en muchos países con propósitos políticos, como fomentar la idea de nación. Así que en ese proyecto, lo parcial, lo interesante de cada localidad se perdía ante la gran máquina nacional que era la historia”, comentó el investigador.

Ducey agregó que para entender el pasado hay que tener en cuenta otro elemento: “Que tradicionalmente se había visto a la historia como una historia de progreso que, en el caso de México, empieza con los aztecas y va paso por paso hasta llegar a Vicente Fox”, producto de una visión del progreso del modelo de evolución.

Subrayó que hace 40 ó 50 años sí había historiadores, pero muy pocos, “la mayoría de los que se dedicaban a la historia eran políticos o estaban involucrados de alguna manera en ese proyecto del Estado”, pero en dos generaciones esto ha cambiado mucho. “Ahora hay institutos como el de la Universidad Veracruzana donde se está llevando a cabo investigación seria en historia y en otras cuestiones sociales”.

Por un lado, “hay un grupo nuevo de historiadores, por otro, se ha visto en muchos países el desarrollo de una visión más compleja de los procesos históricos, y para entender eso lo que hemos hecho es ponernos la historia nacional, del progreso y la evolución ante los hechos en los archivos”, afirmó el autor de Comunidades indias y ayuntamientos en la Huasteca mexicana: rebeliones de sujeto, pronunciamientos, y guerra de la casta.
Ir al archivo y encontrar documentos “no quiere decir
que se ha encontrado la verdad ni la historia: el documento nada más es una entrada al pasado”
En ese proceso han surgido las diferencias, las distinciones, la experiencia regional, todas las particularidades de lo local. “Eso es lo que ha cambiado en el enfoque, realmente hay un cambio porque hay más historiadores profesionales que están viendo en los archivos y descubriendo cómo se experimentó el cambio en México. Por eso surge ese interés hacia los procesos locales, porque estamos viendo que en cada uno, los efectos de las cuestiones que se iban dando en el contexto nacional eran distintos”.

Michael Ducey aseguró “que la historia se construye”, y que el hecho de ir al archivo y encontrar documentos “no quiere decir que se ha encontrado la verdad ni la historia: el documento nada más es una entrada al pasado”.

Su experiencia como investigador lo llevó a concluir que “cada actor social va creando la historia para justificar sus acciones y también para tener una información que le da una idea sobre cómo debe actuar ante la sociedad”. Por esto cuando los actores sociales presentan sus proyectos y quejas ante el gobierno casi siempre tienen una visión histórica, lo cual también se constata en los artículos de Sotavento.

He aquí la función del historiador, la que tiene que captar la construcción de tales procesos con el fin de entender cuál era la lógica de cada grupo, explicar porqué tenían determinada visión sin reparar si era equivocada o no, señaló el entrevistado.

Observó que el gran cambio ocurrido en América Latina y en México “es que se ha abierto mucho el campo para que la gente pueda hablar. Creo que no es tanto que antes no tenía voz o historia, sino que no llegaba a nuestros oídos. Porque, de hecho, cuando uno busca por ejemplo en el siglo XIX, se puede encontrar que, incluso en situaciones bastante represivas, la gente manejaba un discurso acerca de los hechos del pasado para justificarse o reclamar ante el Estado sus derechos”.

Ahora hay más oportunidades para hablar de eso porque existe más campo, y en México, durante los últimos 20 años, “muchos archivos estatales han abierto sus puertas, eso nos da oportunidad de investigar el pasado”, explicó.