| Año 3 • No. 90 • febrero 3 de 2003 | Xalapa • Veracruz • México | Publicación
Semanal |
| Acreditan
dos carreras de la UV en Veracruz Alma Espinosa Arroyo |
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Veracruz,
Ver.- La Universidad Veracruzana consiguió,
nuevamente, acreditar dos de sus programas de licenciatura,ambos
aprobados por el Consejo de Acreditación de la Enseñanza
en Contaduría y Administración (Caceca). |
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La
Facultad de Administración de Empresas, Empresas Turísticas
y Sistemas Computacionales de Veracruz redobló sus esfuerzos
para conseguir que dos de sus programas lograran insertarse en la
lista de las licenciaturas idóneas para la formación
de los futuros profesionales. |
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Tras
la línea estratégica de Aseguramiento de la calidad
y los resultados de los programas académicos que impulsa
la Rectoría, la Facultad de Administración de Empresas
decidió emprender el camino de la acreditación.
Su directora, Liliana Betancourt Trevedhan, comentó que
para lograr la meta se buscó al Caceca, organismo dependiente
de la Asociación Nacional de Facultades y Escuelas de Contaduría
y Administración (ANFECA). Los puntos a revisar para acreditar las licenciaturas de Administración de Empresas y Administración de Empresas Turísticas fueron la planta académica y estudiantes, programa de licenciatura, formación integral, recursos financieros, recursos-eficiencia, extensión-investigación e información adicional. Cada una de las variables estuvo conformada por más de una categoría y a partir de ellas se cuestionó una serie de criterios, que sumaron 150 en total. |
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De
acuerdo con las líneas del Caceca, la variable que
se considera de mayor peso es la referente a los estudiantes. En
este caso se evalúa la administración, calidad en
el desempeño, apoyo académico, índices de titulación,
estímulos, reconocimientos y mecanismos de vinculación.
“Estas categorías tienen un total de 32 criterios que son los cuestionamientos a sustentarse documentalmente y son |
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corroborados
de manera aleatoria con entrevistas, que se desarrollan durante
el proceso con alumnos, profesores, personal, funcionarios y empresarios
de la propia entidad”. Liliana Betancourt agregó que en el proceso de acreditación se presentaron parámetros difíciles de cumplir, como el caso de los criterios de investigación. Esto se debe a que en la dependencia la actividad apenas está en la etapa de formación de cuerpos académicos para la generación y aplicación del conocimiento. Sin embargo, los puntos determinantes para lograr la acreditación fueron la calidad y nivel de la actividad docente, eficiencia terminal, deserción, rendimiento escolar, consistencia de la misión, políticas, valores y objetivos de la facultad, instancias de organización adecuada, demanda del mercado de trabajo, vinculación con el sector productivo, ingresos propios, actualización de biblioteca e infraestructura tecnológica. |
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Desde
el inicio El programa de Administración de Empresas fue acreditado en octubre de 2002 y el de Administración de Empresas Turísticas en diciembre del mismo año. Sin embargo, será hasta finales de febrero o inicios de marzo cuando el documento oficial de acreditación sea entregado a las autoridades universitarias. ¿Cómo surge la iniciativa de acreditar los programas académicos por instancias externas a la propia Universidad Veracruzana? A decir de Liliana Betancourt, “la acreditación en México y en otros países constituye un procedimiento para verificar la calidad, garantizar la confiabilidad social del esfuerzo educativo en la formación de profesionistas y comprobar la existencia de parámetros institucionales de desempeño. Además, también es útil en la verificación de la correspondencia entre los objetivos y resultados de la acción universitaria”. Por esta razón, la actual administración de la UV, encabezada por el rector Víctor A. Arredondo, se ha dado a la tarea de realizar las peticiones oficiales ante los organismos correspondientes. Ese fue el caso de la Facultad de Administración de Empresas y Empresas Turísticas de la región Veracruz. |
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Luego,
el Consejo de Acreditación de la Enseñanza en Contaduría
y Administración proporcionó el instrumento guía
para preparar un informe de autoevaluación, que fue enviado
para su análisis. La información fue revisada y se
verificó mediante una visita de campo que realizó
el organismo. Gracias a la presencia de los asesores del comité se logró percibir las fallas que |
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permanecían
en la facultad, a través de las recomendaciones que expidieron.
A partir de entonces todo el personal de la dependencia universitaria
se enfocó a dar atención a las observaciones. Una vez realizadas las implantaciones y cambios sugeridos se recibió la visita evaluadora para la acreditación final. Cabe mencionar que tal logro se debió al trabajo e interés de académicos, alumnos, personal administrativo, técnico y manual. Desde 2001 se dieron los primeros pasos encaminados a la acreditación. En primer lugar se capacitaron a dos académicos en Procesos de Evaluación y posteriormente se conformaron grupos de trabajo. Por fortuna, expresó la directora de la facultad, fue de gran ayuda que la comunidad universitaria contara con la cultura de construir indicadores de evaluación y a partir de ellos cumplir con los requerimientos necesarios. Betancourt Trevedhan resaltó que permanentemente “estamos preocupados por satisfacer las expectativas de la sociedad con resultados académicos y productos educativos de calidad. Con estos procesos damos certidumbre a nuestros estudiantes y egresados, y comprobamos que la escuela cumple con estándares de calidad académica para impartir sus programas”. Reconoció que falta mucho por hacer, pues estos procesos promueven el desarrollo permanente y las necesidades de la sociedad cambian. Y para atender las querellas de la población, los universitarios deben mantener programas tendentes al aseguramiento de la calidad, lo cual requiere de recursos económicos que se consiguen con mayor facilidad si los programas de las facultades están acreditados. |
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