| Año 3 • No. 96 • marzo 24 de 2003 | Xalapa • Veracruz • México |
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 El surrealismo soy yo |
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 Salvador Dalí. |
La
obra artística de Salvador Dalí, quien es considerado
como uno de los grandes pintores del siglo XX y máximo exponente
del surrealismo, está de visita en esta ciudad capital, mediante
la exposición Salvador Dalí: El Surrealismo soy
yo. Ilustraciones de la Divina Comedia, en la Pinacoteca Diego
Rivera. La Divina Comedia, de Dante Alighieri, es una obra grande por la universalidad del espíritu que la anima, por el formidable aliento poético que la transita de principio a fin, por las creaciones que contiene, fruto de una imaginación realmente sobrehumana, y por la inigualada belleza de los tercetos en que está compuesta. |
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Por
todo ello es considerada con toda justicia como la enciclopedia
poética de la cultura occidental de la Edad Media, y como
una epopeya del conocimiento. El ingenio de Dante recogió en soberbios endecasílabos no sólo el alma, sino también los temas que inspiraban en su tiempo toda la creación cultural: artes plásticas, poesía, historia, vida contemporánea, derecho, política, filosofía y teología. Así pues, ante el reto de ilustrar esta obra se eligió a Salvador Dalí. La elección no pudo ser más atinada, pues las ilustraciones que hizo para La Divina Comedia son fruto de una imaginación realmente sobrehumana. Estos grabados contienen los paisajes más sublimes del romanticismo simbolista, el monstruo más deforme de la imaginación surrealista y el dibujo más exacto. |
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Las
imágenes dalinianas operan a través de la paradoja,
poniendo en evidencia lo inquietante mediante la contradicción;
de ahí su gusto por las imágenes dobles o invisibles,
es decir, aquéllas que pueden leerse de manera distinta según
cómo se las mire. El exceso egocéntrico de Dalí no es sólo un disfraz extravagante, es la condición necesaria de su delirio paranoico, la consecuencia de un buceo permanente en las fuentes de la memoria y el deseo de dar sustancia crítica a su obra. Los sueños y las obsesiones son |
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personales
y, en principio, intransferibles. El método paranoico-crítico
y el lenguaje de la tradición pictórica son los instrumentos
de los que se vale Dalí para dar a ese mundo un valor universal,
cifrándolo en claves accesibles para el público. Salvador Dalí: El Surrealismo soy yo. Ilustraciones de la Divina Comedia es parte de las actividades que se desarrollan en el marco del Primer Festival de los Sueños, organizado por el Instituto Veracruzano de la Cultura, a través de la Galería de Arte Contemporáneo. |
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