Anaid Alina Muñoz Cervantes
Karina de la Paz Reyes Díaz
El alto promedio de 9.1 que obtuvo Anaid Alina Muñoz Cervantes, estudiante de la Facultad de Matemáticas, le permitió ser beneficiada con una beca para asistir al Verano de la Investigación en el Departamento de Matemática (Demat) y en el Centro de Investigación de Matemáticas (Cimat), ambos con sede en Guanajuato.
En entrevista, la estudiante del quinto semestre compartió que trabaja por sus metas a corto, mediano y largo plazo, que son concluir satisfactoriamente su licenciatura, continuar con el posgrado y desenvolverse en la investigación y aplicación, pero todas tienen un fin común: contribuir desde las matemáticas al cambio social.
Su reciente estancia de investigación (del 21 de junio al 5 de agosto) en aquel “paraíso ñoño” le incrementó el entusiasmo para seguir explorando las aportaciones que las matemáticas pueden tener en otras disciplinas y generar nuevo conocimiento que contribuya a la mejora social.
El Demat es parte de la Sede Valenciana, División de Ciencias Naturales y Exactas, de la Universidad de Guanajuato, mientras que el Cimat es un centro de investigación autónomo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. El primero ofrece sólo títulos académicos de licenciatura y el segundo de posgrado (como maestrías y doctorados en matemática y computación), su estrecha colaboración “es la clave de la fortaleza de ambas instituciones”, según la página oficial.
Anaid Alina desde pequeña tuvo un gusto por esta ciencia, en buena medida contribuyó el Club de Matemáticas que a la fecha ofrece esta Facultad de manera gratuita a niños y jóvenes; pero cuando llegó el momento de elegir una profesión se planteó: “¿Qué es necesario para la mayoría de las cosas que quiero hacer?”. Entre sus opciones también estaba Letras Españolas y Filosofía.
No obstante, “me di cuenta de que podía aplicar las matemáticas en cualquier área del conocimiento”, justificó, y por ello se abocó a tal licenciatura. Aunque los primeros dos semestres transcurrieron sin inconvenientes, en el tercero le surgieron ciertas dudas que implicaban continuar o no con el programa educativo.
Explicó que las materias de ese ciclo escolar no le convencían del todo, salvo una de ellas, Álgebra Lineal, que le causó mucho interés y le motivó a seguir. Ya en cuarto semestre se dio a la tarea de buscar en Internet convocatorias de becas, y se encontró con la del Verano de la Investigación del Demat y Cimat. “Son oportunidades que tenemos a la mano, sí existen”, subrayó a manera de mensaje para sus compañeros estudiantes.
Eligió trabajar con el investigador José Elías Rodríguez Muñoz en el área Extracción del ADN semántico de textos, que consiste en tomar discursos, analizarlos con métodos estadísticos e identificar qué están queriendo decir. Concretamente, trabajó con notas periodísticas referentes al conflicto magisterial en Oaxaca. A la par, tomó el curso Probabilidad, Estadística y Análisis Topológico de Datos en el Cimat.
“Cuando llegué allá no conocía a nadie. Tenía miedo de encontrarme con el investigador, no servir y que nadie me pudiera ayudar. Cuando nos vimos por primera ocasión me preguntó qué hacía y él detalló a qué se dedicaba. Me dijo ‘todo esto lo vamos a programar en el lenguaje R’ y yo sólo pensé ‘¡Oh!, no. Ése no lo he manejado’. Me asusté un poco pero pensé ‘sí puedo’.”
Por ello, Anaid Alina consultó vía telefónica con sus compañeros de la Facultad, sobre todo con Abraham Toriz Cruz, y se dispuso a aprender dicho lenguaje, lo que le permitió confirmar “la buena formación que se fomenta en la Facultad de Matemáticas de la UV”.
Además, dicha estancia académica le causó “intriga” por estudiar cómo se da la vinculación de las matemáticas con otras ciencias. “Quiero ir probando cosas y ver qué es lo que más me gusta, porque esto de la extracción del ADN semántico de textos es bellísimo, pero también me gustaría probar en otras áreas”.
“Quiero dedicarme a aplicar las matemáticas para ayudar y hacer algo en el mundo. Un cambio. Quizá no radical, pero sí contribuir”, insistió. “Sé que si quiero dedicarme a hacer eso, lo más seguro es irme fuera de México, lo cual lamento, porque lo importante es contribuir al desarrollo del país, pero las condiciones no siempre lo permiten”, concluyó.