Veracruz
Alma Martínez Maldonado
Bernardo García Díaz, del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales y Premio al Decano 2016 del Área Académica de Humanidades, afirmó que conocer el pasado nos permite mirar hacia el futuro reconociendo nuestra riqueza cultural y social.
Al compartir sus conocimientos e investigaciones con jóvenes de la Facultad de Pedagogía, el investigador los exhortó a interesarse por conocer la historia de las cosas, de las ciudades y del país.
“No tiene sentido atesorar el conocimiento, particularmente la historia, debe difundirse y compartirse.”
García Díaz, quien ha realizado diversas investigaciones sobre las ciudades de Veracruz y Orizaba, dijo que “la historia es una enseñanza importante en el área de humanidades que nos da firmeza para afianzarnos al futuro”.
Ejemplificó la relevancia de la historia al compartir información sobre la ciudad de Tlacotalpan, compilada en el libro de su autoría Tlacotalpan y el renacimiento del son jarocho en Sotavento.
Indicó que el son jarocho es una muestra de la riqueza de Veracruz y habló sobre grupos musicales que han contribuido a su florecimiento en la región del Sotavento como Mono Blanco y Los Cojolites.
En cuanto a Tlacotalpan, explicó su riqueza histórica y por qué fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Detalló que su tráfico fluvial de veleros y vapores en siglos pasados, así como la camaradería de sus habitantes, contribuyó a una arquitectura valiosa, una presencia relevante de artistas y tradiciones ricas que han traspasado fronteras.
Puntualizó que en la época actual es importante retomar la riqueza cultural de cada pueblo y evidenciarla a través de manifestaciones visuales y públicas.
Antes de concluir reafirmó que los investigadores de la historia han coadyuvado a reivindicar y revalorar la cultura jarocha.