Karina de la Paz Reyes
La Facultad de Derecho realizó una ceremonia luctuosa in memoriam de Yolanda Owseykoff Miranda, el 25 de febrero en el Aula Magna “Guillermo Ortiz Mayagoitia”, que lució abarrotada de estudiantes, docentes, administrativos y familiares, quienes mostraron el respeto y admiración por la extinta jurista.
La ceremonia fue presidida por el director de la Facultad, José Luis Cuevas Gayosso; la secretaria Académica de la misma, Gloria Lira González; la alumna Mónica De la Maza Farías, en representación de la comunidad estudiantil; Juan Luis Hernández Owseykoff y Jesús Guillermo Arévalo Owseykoff, hijos de la homenajeada in memoriam.
“Cuando la elegí como catedrática, sabía que tendría frente a mí a una maestra reconocida y admirada por estudiantes y maestros, pues cuando preguntaba por ella los comentarios eran acerca de la entrega y dedicación no sólo a la abogacía, sino también a la docencia, pero sobre todo al amor por forjar estudiantes de excelencia, comprometidos y capaces”, relató Mónica De la Maza.
“La maestra deja un gran vacío para su familia, para sus amigos, para toda la comunidad estudiantil y para el acervo de nuestra casa de estudios, que hoy la recuerda y que nunca la olvidará por su legado profesional”, añadió la universitaria.
Gloria Lira, a nombre de la comunidad académica, leyó una semblanza de Yolanda Owseykoff, cuya vida “nos deja frutos tan bellos que perdurarán por toda la eternidad”.
Precisó que nació el 14 de abril de 1951 en Nueva Rosita, Coahuila; hija de un inmigrante de la desaparecida Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
“Yolanda Owseykoff más que logros, más que estudios, más que conocimiento y excelencia, nos deja un legado de lucha, de coraje y valentía. Ella nos enseñó que jamás es demasiado tarde para empezar y nunca es demasiado pronto para hacer algo.”
En el acto su hijo Juan Luis relató que a los 32 años su madre todavía no era licenciada en Derecho, y a los 59 ya había realizado tres doctorados en Derecho Internacional y dos maestrías.
“Valoren el tiempo que tienen, quédense con lo que mi madre les haya enseñado, poco, mucho, valioso o no valioso. Quédense con cada una de sus palabras sobre el Derecho, el Derecho Internacional, sobre cualquiera de las materias que daba con mucho cariño”, les dijo a los universitarios.
El joven pidió a los universitarios que tomen en cuenta el ejemplo de Owseykoff Miranda y lo hagan realidad cuando lleguen a su campo laboral: “Ella veía en cada uno de ustedes, sus alumnos, una posibilidad para nuestro México, una oportunidad para nuestra sociedad; ésa era la razón por la que mi mamá era casi un militar con ustedes, porque representan el futuro.
”Yo sólo les pido que en cada uno premanezca el recuerdo de la honestidad, la franqueza y la rectitud de mi madre, porque así era ella, así vivió. Y murió con una valentía impresionante. Cuando le dijeron que no quedaban más que unas semanas, con valentía lo afrontó y creo que todos debemos darle honor a eso. Más que un minuto de silencio les pido para mi madre un minuto de aplausos.”
Enseguida el director de la Facultad, José Luis Cuevas, entregó un reconocimiento post mortem a los familiares de Yolanda Owseykoff, por su destacada trayectoria académica en la Facultad.
“Yolanda fue reconocida por los mejores juzgadores que tenemos los docentes, ustedes, nuestros queridos alumnos; el balance siempre fue positivo. Tenemos una pérdida importante, pero también un legado, el ejemplo de una mujer íntegra y comprometida con las instituciones de educación a las que sirvió y con su familia, a la que tanto protegió”, concluyó Cuevas Gayosso.