Saúl Castillo Aguilar experimenta con mezclas asfálticas y analiza la operación de una pista de ensayo de pavimentos
Susana Castillo Lagos
Saúl Castillo Aguilar, profesor de la Facultad de Ingeniería Civil (FIC), región Xalapa, realiza una estancia sabática en el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX) de Madrid, España, espacio en el que experimenta con mezclas asfálticas y analiza la operación y uso de una pista de ensayo de pavimentos a escala real.
El académico especializado en el comportamiento mecánico y auscultación de pavimentos, inició su investigación en agosto de 2015 y la concluirá en julio del presente año. Su principal motivación, compartió, es adquirir los conocimientos para diseñar una pista similar para México, pues en el país no existe el equipo ni las condiciones para realizar las pruebas antes citadas.
“Es necesario que México se empiece a preocupar por tener cada vez más y mejores carreteras, que cumplan con la normatividad y, sobre todo, brinden un servicio de calidad.”
Respecto del porqué realizar la estancia en el CEDEX, comentó que éste es “uno de los centros de investigación en infraestructura carretera que cuenta con los mejores laboratorios, máquinas, equipos de ensayo y espacios para auscultación superficial y estructural”.
Desde 1988, precisó, el centro cuenta con una pista de ensayo acelerado para pavimento a escala real, así como con “todos y cada uno de los equipos más modernos para ensayar materiales pétreos, asfálticos, mezclas asfálticas, concretos hidráulicos, suelos, entre otros”.
Castillo Aguilar describió que la pista es ovalada, cuenta con dos curvas y dos rectas de tres secciones cada una, con una longitud de 288 metros, un ancho de ocho metros y dos vehículos a escala real para simulación del tráfico.
Además, tiene 350 sensores distribuidos en toda su estructura de pavimento a escala real, los cuales miden: deformación permanente, fisuras, módulos, capacidad portante, drenaje, textura e irregularidad, entre otras características.
El investigador trabaja en el laboratorio del CEDEX, abocado a conocer la operación y uso del equipo de pista de ensayo a escala real.
“Actualmente opero la pista de forma personal, conociendo cada una de las partes que la componen, tanto estructurales como mecánicas. También investigo sobre mezclas asfálticas empleando materiales reciclados del tipo RAP (Pavimento Asfáltico Recuperado, por sus siglas en inglés), mediante el uso de dos mezclas, una templada y otra caliente, así como materiales asfálticos con rejuvenecedor tipo Regener Proas y fibras acrílicas proporcionadas por Kaltex Fibers de México, compactadas con cargas dinámicas y estáticas de acuerdo a la normatividad española vigente.”
Estos procesos sirven para conocer las características mecánicas de los pavimentos, tales como: sensibilidad al agua, módulos dinámicos y resilientes, deformabilidad permanente, fisuración (ensayo Fénix) y resistencias a tensión y tracción, así como la auscultación superficial evaluada con los equipos del Centro de Estudios del Transporte (CET), organización integrada al CEDEX “dedicada a las tareas de asistencia técnica especializada, investigación y desarrollo tecnológico e innovación en materia de carreteras y transporte en general” de España.
Como parte de su proyecto, Saúl Castillo realizó un análisis comparativo de diferentes mezclas asfálticas, lo cual le servirá para integrar un catálogo de pavimentos en México mediante el sistema de modelaje de elemento finito u otros métodos. Para este punto se incorporará un estudiante de la Maestría en Vías Terrestres de la FIC Xalapa al CEDEX, quien colaborará con el investigador.
“Los primeros cuatro meses de la estancia sabática adquirí el conocimiento básico para poder realizar las prácticas con el equipo de trabajo de la pista de ensayo. También participé en dos proyectos de suma importancia para el CET”.
El primero de ellos se titula Lifesure, “consiste en desarrollar tecnologías que permitan fabricar de modo eficiente mezclas asfálticas templadas recicladas a tasa total (100 por ciento) en capas base, intermedia y de rodadura aptas para vías urbanas”.
El segundo, consiste “en el control estructural de la carretera Ma-30 (Mallorca) construida con escorias provenientes de la incineración de residuos urbanos”.
Al hablar del estado que guarda la infraestructura carretera en Veracruz y en el país, Saúl Castillo dijo que ésta se encuentra en malas condiciones, está construida con materiales inadecuados –pues no duran el tiempo o periodo estimado para proyectos de ese tipo–, características que, en suma, hacen que el servicio ofrecido a los usuarios no sea el esperado.
Si bien los estudios en el rubro son necesarios pues generan información útil y viable de aplicar, lamentó que los tomadores de decisiones hagan caso omiso. “Sé que cuando un investigador se acerca a las autoridades estatales y federales encargadas de la infraestructura del transporte, al parecer a éstas les interesa, te escuchan, te ponen atención, reciben el proyecto, pero ahí queda: encerrado en un archivero o cajón de escritorio, nunca hay recurso para hacer investigación de calidad”.
Esta última contribuiría a que los pavimentos cuenten con mayor calidad en su modelización, diseño, construcción y rehabilitación. Además, “ayudaría a tener mejores ingenieros y estudiantes que se motiven para alcanzar sus metas, objetivos y propuestas”, afirmó.
Falta de recursos no es pretexto
En 2005, Saúl Castillo patentó en Holanda una nueva técnica de reciclaje de pavimento frío (http://bit.ly/1UiYFRL), entre 2009 y 2010 compartió hallazgos para aumentar la resistencia del pavimento (http://bit.ly/1RXOLEq y ttp://bit.ly/1WEIXil), investigaciones a las que no se les pudo dar el seguimiento requerido por falta de recursos materiales, económicos y humanos.
“La falta de estos rubros en las universidades, nuestro estado y país, impiden la generación de investigación de patente, pues los recursos son insuficientes para lograr investigación de calidad.”
El universitario compartió que para obtener la estancia en el CEDEX realizó gestiones en varias instancias, sin embargo no fue apoyado. “Sólo la Universidad Veracruzana me dio mi año sabático, con goce de sueldo, es lo único con lo que cuento para hacer parte de esta actividad; el resto de los gastos y recursos los cubro yo, pues considero que cuando uno se propone y quiere hacer algo por sí mismo, por su Universidad, su estado o país, sí se puede, pero se necesita un esfuerzo y sacrificio extra, que es lo que puedo decirles a mis colegas y alumnos de esta gran institución”.
Por todo lo anterior y por la experiencia positiva, en términos de apoyo, que ha tenido en anteriores estancias en otros centros de investigación internacional, Saúl Castillo reiteró que sí hace falta que el gobierno ponga más interés en este rubro, pero que la falta de éste no es pretexto para emprender proyectos que contribuyan al desarrollo social.