A causa de la roya
David Sandoval Rodríguez
En 20 años la roya del café podría desaparecer la producción de esta planta en la región central de Veracruz, señaló Miguel Armando López Ramírez, director del Instituto de Investigaciones Forestales (Inifor).
En entrevista para Universo, el investigador agregó que elaboró una propuesta que se entregó a las autoridades estatales, pero a la fecha no ha obtenido respuesta, por ello participó en el Foro Regional sobre la Roya del Café que organizó Radio Teocelo, con la plática «Erradicación de la roya de café con bases científicas».
«La roya del café es un hongo parásito en la región que comprende las localidades de Teocelo, Huatusco y Xico; a la fecha están infestadas las plantaciones al 60 por ciento y no hay qué hacer, se pronostica que si no se hace algo en 20 años nos vamos a quedar sin café; hay formas de mitigarlo. Hace dos años realicé una propuesta, pero no me han hecho caso», destacó.
Comentó que existen ejemplos de erradicación de este tipo de enfermedades, uno de ellos ocurrió durante el siglo pasado en Estados Unidos con la roya del trigo, el cual es considerado uno de los principales cultivos de aquel país, ya que sostiene prácticamente su economía en el sector agrícola.
«Esta roya arrasó con los trigales tremendamente, estaban en peligro de caer en la ruina económica y se pusieron a estudiar el ciclo de vida de la roya; se dieron cuenta que una parte de su ciclo la pasaba en un árbol y otra parte sobre el trigo, parasitando. Entonces emprendieron una campaña de erradicación del árbol conocido como berberis; muchos millones de árboles fueron quemados y lograron cortar el ciclo de la roya, que todavía aparece pero ya no causa ese gran problema, ahora es controlable y cohabitable.»
Otro ejemplo de un manejo exitoso son los castaños, considerados de suma importancia para los estadounidenses, desde el punto de vista cultural y alimenticio. «Son muy apreciados pero algún agricultor optó por traer castaños de Asia, alguno tenía un parásito y empezó a afectar los bosques, a tal grado que estuvieron a punto de extinguirse hace casi 10 años».
Los científicos descubrieron que podían cultivar una especie no tan agresiva de ese hongo y lograron que se cruzaran con la roya, lo cultivaron en laboratorio para después liberarlo en los bosques, de tal manera que se recombinó genéticamente con la especie parásita y la neutralizó; esta nueva relación genética atacaba el castaño, incluso lo deformaba pero no lo destruía, así lograron controlar la epidemia, detalló.
Roya forzó a los ingleses a preferir el té La roya del café apareció en 1869 en las islas de Java y Sumatra y de ahí comenzó a propagarse, de hecho provocó que en el imperio británico se cambiara la costumbre de tomar café y comenzaran a tomar té a las cinco de la tarde, apuntó.
Como se terminó el café, resultó ser más costoso importarlo desde el sudeste asiático, entonces los empresarios optaron por cambiar al té y donde había cafetales comenzaron a sembrar los insumos para producirlo.
No obstante, precisó que las royas son muy específicas, aquella que ataca al café solamente lo hace en este cultivo, al igual que la del trigo, «casi cada planta cultivada tiene su roya, existe roya en el maíz, la caña de azúcar, el sorgo, el frijol; hay más de nueve mil especies clasificadas en el mundo y se supone que existen más que no han sido descubiertas, en casi todos los casos no se conocen sus ciclos de vida».
Respecto de la investigación actual, reconoció que «se puede decir que todavía estamos en pañales y somos pocos los expertos en este tema», aunque se saben algunas cosas; por ejemplo, al parecer su tipo de suelo tiene mayor acidez, el ataque de la roya es más agresivo porque genera que los nutrientes no lleguen fácilmente a los árboles o a los cafetales.
La roya del café es erradicable
El investigador explicó que su propuesta se basa en que la roya del café es erradicable, «lo que sucede es que no se ha estudiado su ciclo de vida, a los técnicos les falta actualización y lo digo con toda seguridad porque soy experto en royas, la he estudiando desde hace más de 20 años, es una de mis áreas de especialización que estudié en la Universidad Purdue, en Indiana, Estados Unidos, donde están los mejores científicos de roya del continente, y en la Universidad de Tsukuba en Japón, donde está el grupo de investigación más fuerte sobre el tema».
Inclusive, Naohide Hiratsuka, científico que forma parte de este grupo en el Instituto Agrícola y Forestal de dicha universidad, ha impartido cursos al Inifor, apuntó.
«Es muy probable que la roya del café tenga un hospedero alternativo, como la roya del trigo, y pase una parte de su ciclo de vida en otra planta que no tiene relación con el café, se supone que puede ser en una orquídea pero hay que demostrarlo, por ello desde hace dos años presenté un proyecto al gobierno que fue recibido pero no ha tenido respuesta.»
El académico opinó que probablemente esta falta de interés se deba a que, por otro lado, es un gran negocio vender fungicidas, «que poca efectividad tienen para controlar la roya, por eso se requieren de esfuerzos comunitarios para tomar control de este parásito y nosotros proponemos que se puede erradicar definitivamente».
De ponerse en marcha la estrategia propuesta en su proyecto, tomaría una década obtener los resultados, no obstante para ello es necesario la disposición de las autoridades y los medios económicos requeridos.
Por otro lado, los expertos estadounidenses ya han pronosticado que hay mucha probabilidad de que se termine la cafeticultura en América Latina durante los próximos 20 años. «Preocupa muchísimo porque todas esas personas que se quedarán sin trabajo se irán a Estados Unidos a buscar empleo como inmigrantes ilegales».
López Ramírez puntualizó que «lo que hace falta para llevar a cabo un programa efectivo en contra de esta plaga es la voluntad de las autoridades y romper con la corrupción, gran cáncer de nuestro país, definitivamente».
No obstante, se ha continuado el trabajo desde otras áreas, y al respecto comentó que ha asistido a numerosas reuniones con los campesinos, permitiéndole conocer más acerca de las problemáticas específicas.
«Como lo planteó la rectora Sara Ladrón de Guevara en el Plan de Trabajo Estratégico 2013-2017, la idea es que los investigadores salgamos al campo; entonces estamos saliendo de los laboratorios a ver qué pasa y cuáles son las problemáticas, los productores ven con muy buenos ojos a quienes representamos a la Universidad Veracruzana.»
Manifestó que al parecer nadie había planteado esta propuesta a los cafeticultores y ha venido abriendo los ojos a los productores, mostrando alternativas importantes, «ésa es la función que ha hecho la UV por nuestro medio: abrir los ojos a otras perspectivas importantes, porque además la institución tiene gran potencial en esta vinculación ya que cuando se suman varios investigadores se pueden obtener soluciones integrales a los problemas».