La Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana (UV) llevó a efecto la segunda edición de su seminario “Retos de las universidades públicas” con la participación de Julia Tagüeña Parga, directora adjunta de Desarrollo Científico del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), y Leobardo Serrano Carreón, investigador del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El tema del seminario de este año fue “Desarrollo de la investigación y de la transferencia de la tecnología en México” y en el marco de éste los investigadores coincidieron: En nuestro país la ciencia está, en efecto, al servicio de la sociedad y, por tanto, requiere de mayor apoyo.
La segunda edición del seminario de la Junta se llevó a efecto en el auditorio del Museo de Antropología de Xalapa (MAX) encabezada por la presidenta en turno, Elena Rustrián Portilla, y con la presencia de la rectora, Sara Ladrón de Guevara, así como de los miembros de la Junta de Gobierno: Ricardo Corzo Ramírez, secretario; Violeta Trinidad Pardío Sedas, Federico B. Roesch Dietlen y Adalberto Tejeda Martínez, además de las secretarias Leticia Rodríguez Audirac y Clementina Guerrero García, el secretario Octavio Ochoa Contreras y directores generales y miembros de la comunidad universitaria.
Elena Rustrián mencionó que Veracruz ocupa bajas posiciones en materia de Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, desarrollo humano y competitividad y ciencia, tecnología e innovación y al respecto señaló: “Para cualquiera de los veracruzanos estos datos son insatisfactorios y han motivado en buena parte la realización de este seminario”.
Por su parte, Julia Tagüeña explicó que la agenda del Conacyt está dirigida hacia una sociedad del conocimiento que, a su vez, impacta en una economía del conocimiento.
Detalló que de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), al 2015 México invierte el 0.56 por ciento del PIB, no obstante países que han registrado un desarrollo científico y tecnológico en las últimas décadas, como el caso de Corea, han invertido el uno por ciento en dicho rubro.
También destacó la importancia de que la aportación de la iniciativa privada se vea reflejada en ciencia y tecnología, puesto que se ha demostrado que en los países con mayor desarrollo es más grande que la pública.
Por su parte Leobardo Serrano Carreón, destacó que el trabajo académico y de investigación de las universidades debe enlazarse y formar parte del emprendimiento y consolidación de empresas que garanticen mayor avance a las instituciones públicas de educación superior y al país.
Dentro de este enfoque, mencionó el caso de comercialización de un producto lanzado al mercado en 2012, denominado “Fungifree”, que es el primer biofungicida 100 por ciento mexicano, elaborado por la empresa AB Agrobiotecnia, resultado de la labor científica de la propia UNAM.
Actualmente éste es un organismo enfocado al desarrollo científico y tecnológico de productos y servicios de alto valor agregado.
La reunión terminó con la interacción de la comunidad universitaria que expuso sus dudas para insertarse en la investigación, pero sobre todo en la industria.