Paola Cortés Pérez
Graciela Hierro, fundadora y directora –hasta su muerte– del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), estaba convencida de que el diálogo es la base de la política feminista.
En ello coincidieron la escritora Francesca Gargallo Celentani y Benno de Keijzer Fokker, al participar en la presentación del libro Maestra, filósofa, feminista. Graciela Hierro: un homenaje, de autores varios, coeditado por la UNAM y el PUEG, durante la Feria Internacional del Libro Universitario.
Francesca Gargallo, escritora y una de las grandes feministas latinoamericanas, precisó que en octubre de este año se cumplirán 12 años del fallecimiento de Graciela Hierro, quien en sus palabras “fue nuestra maestra, asumía posiciones siempre más profundas sobre los cambios que se daban, impulsada por su feminismo”.
Comentó que fue Hierro quien “nos abrió la mente” ante las políticas de diálogo, esto es, dejó como enseñanza que el diálogo es la base de la política feminista. Sobre el libro, mencionó que en él se recuperan los escritos sobre el feminismo que Graciela Hierro desarrolló como filosofía ética que organiza la educación e informa a la política.
“En el libro Gracias a la vida, Graciela escribió que desde muy joven se dio cuenta que ama a su género y así lo dijo ‘Amo a mi género, entiendo a las mujeres, quisiera estrecharlas como si fueran mis hijas y darles sabios consejos… Así se ha ido originando mi devoción a la causa de las mujeres, que me ha convertido en feminista de tiempo completo’.”
Benno de Keijzer, investigador adscrito al Instituto de Salud Pública de la Universidad Veracruzana (UV), señaló que es un texto accesible que fue escrito sólo para mujeres, aunque también los varones pueden aprender mucho de los artículos en él contenidos.
“Uno de los grandes temas que aborda es la violencia dentro de la universidad, que sigue sin tocarse de frente porque es difícil confrontar el poder masculino en las instituciones de educación superior. Uno de los principales problemas es el hostigamiento sexual y laboral.”
Por último, el también especialista en temas de masculinidad, dijo que Graciela Hierro es considerada la madre y –luego– abuela por algunas feministas, “ella insta a todas las mujeres a quitarse el hiyab o velo islámico de la ignorancia”.