Carlos Hugo Hermida Rosales
Juan Carlos Noa Carrazana y Norma Flores Estévez, investigadores del Instituto de Biotecnología y Ecología Aplicada (Inbioteca), colaboraron con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), Unidad Irapuato, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) para lograr la obtención de un par de patentes, concernientes al uso de diagnósticos múltiples para la detección de patógenos virales.
Las patentes otorgadas por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) son el título número 333785 “Métodos para el diagnóstico múltiple y diferenciado de los virus del mosaico común (BCMV) y del mosaico común necrótico del frijol (BCMNV)”, con fecha de vencimiento al 5 de abril de 2030.
Además, el título número 339505 “Método para el diagnóstico múltiple y diferenciado de los virus del mosaico de la papaya (PapMV) y de la mancha anular de la papaya (PRSV)”, con fecha de vencimiento al 26 de agosto de 2030.
Juan Carlos Noa, director del Inbioteca, explicó que para obtener la patente número 339505 se revisaron cultivos de papaya en 14 estados del país, en los cuales esta fruta constituye un producto agrícola de suma importancia para el desarrollo de las economías locales de algunas de sus regiones.
El investigador relató que entre los principales problemas que tienen estos cultivos, se encuentra la presencia del virus del mosaico de la papaya y de la mancha anular de la papaya, enfermedades virales que vienen mezcladas entre sí.
Noa Carrazana compartió que para obtener esta patente se mezclaron habilidades y conocimientos de la biología molecular y la patología de cultivo; se llegó al punto de que a partir de un análisis integrado de equipo múltiple con ayuda de iniciadores moleculares, se puede realizar un diagnóstico simultáneo de los virus PapMV y PRSV y así reducir costos en este proceso.
El investigador comentó que la patente ya posee un uso en el sistema de monitoreo de salud vegetal en el país a través de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), lo cual permite a esta dependencia establecer de manera eficiente y consolidada si las papayas que se distribuyen en el mercado están libres de virus, por medio de un diagnóstico eficiente, concreto y preciso, que además ahorra tiempo y recursos.
Manifestó que esto beneficia a una gran cadena de actores, la cual incluye a los productores de esta fruta, sus comercializadores y consumidores, quienes obtienen un espécimen sano y con propiedades organolépticas ideales para su consumo.
Por su parte, Norma Flores narró que el título número 333785 consiste en una serie de métodos para diagnosticar los virus del mosaico común (BCMV) y del mosaico común necrótico del frijol (BCMNV), que son los que atacan con mayor severidad a esta leguminosa y disminuyen su producción, lo cual repercute en la economía de quienes se dedican a su cultivo.
La investigadora mencionó que para detectar estos virus se debían llevar a cabo reacciones separadas para cada uno, ya que los síntomas de ambos son muy parecidos y es difícil delimitar cuál es el que los causa; esta patente permite detectar por medio de una sola reacción cuál de los dos o si ambos causan perjuicios a la planta.
Cabe destacar que mediante ambas patentes se apoyará a exportadores de papaya y frijol para que alcancen con mayor facilidad estándares internacionales requeridos para que estos productos puedan comercializarse en otros países.
Asimismo, gracias a estos trabajos la Universidad ha fortalecido sus relaciones con el Cinvestav, que ahora incluyen una red de trabajo sobre virología de plantas que involucra a investigadores de ambas instituciones.