Por primera vez, una sesión del Consejo Universitario General se efectuó de manera virtual
Claudia Peralta, Karina de la Paz y David Sandoval
El Consejo Universitario General (CUG) de la Universidad Veracruzana (UV) llevó a efecto una sesión inédita: por primera vez, el máximo órgano de autoridad de esta casa de estudios sesionó en modalidad virtual, con los consejeros de todos los campus enlazados mediante el sistema de videoconferencias, para efectuar la sesión solemne en que el filósofo francés Gilles Lipovetsky y el historiador mexicano Alfredo López Austin recibieron el Doctorado Honoris Causa.
El 24 de abril, a unas cuantas horas de inaugurar la XXII Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) y sesionando en la nueva sede del evento editorial más importante del país, el Complejo Deportivo Omega, los universitarios efectuaron una ceremonia en la que el filósofo, tras recibir la distinción, se refirió al mensaje de la rectora Sara Ladrón de Guevara, y dijo: “… usted insistió en el papel de la tradición y soy particularmente sensible a que este homenaje tome lugar en un espacio sobre lo que me interesa en gran medida, que es el libro.
”Creo que hay que buscar otros estatus de la vida intelectual, esta distinción puede recompensar a eruditos con pensamientos amplios, pero no es mi caso”, aseveró.
Según sus propias palabras, su trabajo es uno con el pasado que está en los libros y añadió. “¿Qué seríamos sin los dos milenios de intelectualidad contenida en los libros?”.
Que las ideas no sean privilegio de eruditos
Lipovetsky habló incluso de su condición de intelectual: “Para los filósofos soy un sociólogo; para los sociólogos, un filósofo, me caracterizo por un nomadismo intelectual”, resaltó al reiterar su emoción por recibir el título Honoris Causa.
En el futuro necesitamos que las ideas se difundan en las sociedades y no sean el privilegio de eruditos. “Difundir las ideas no es decir a la gente lo que tiene que pensar, es proponer pensamientos que cada uno tiene la libertad de retomar desde su propio horizonte”, nos nutrimos del pensamiento de los demás pero no con el fin de la tradición milenaria de repetir las cosas, sino usar el pasado e inventar un nuevo futuro y que cada uno lo haga con sus propios pensamientos y problemáticas, eso es magnífico”, concluyó.
José Luis Martínez Suárez, director general del Área Académica de Humanidades, dio una semblanza del filósofo y sociólogo francés; destacó su aporte a la reflexión contemporánea y la importancia de la cultura contra los efectos excesivos del consumo, para trascender la mera identidad del consumidor.
“A lo largo de su numerosa y valiosa obra, Lipovetsky ha conformado un estilo y algo más: un hábitat, un territorio imaginario, una inconfundible esfera mental y anímica en la cual, como en un microcosmos, se reproducen y amplían otras esferas de la sensibilidad y el conocimiento”, afirmó el funcionario.
UV, formadora de pensamiento, ciencia, creación y conciencia
A continuación se hizo entrega de la misma distinción a Alfredo López Austin, quien en su intervención expresó que hace más de 50 años, en la búsqueda de su vocación académica, a sus maestros historiadores tuvo que sumar antropólogos, como el veracruzano Roberto Williams García.
“Hoy quiero recordarlo, y con su memoria formar una vez más mi propia imagen de Xalapa, porque las ciudades tienen también paisajes internos, íntimos; y así, junto a sus callejones reflejados en la lluvia, sus flores, el Parque Juárez, su música, sus mercados, la Universidad, Los Berros, las fachadas neoclásicas y la incomparable cocina veracruzana, se mezclan palabras y rostros de viejos amigos –Roberto, Carlo Antonio Castro, Félix (Báez-Jorge), muchos más–, de cuya amplia cultura tanto he aprendido.”
El autor de Los mitos del tlacuache dijo que otro gozo, el mayor de todos, es el origen de este reconocimiento, pues se lo otorga una universidad pública. Para él, en un país agobiado por la paulatina pérdida de conciencia social, derivada de la política económica que nos envuelve, es ésta la que inculca el valor total de la existencia del ser humano.
Manifestó que la universidad pública fundada en la ciencia, muestra que la naturaleza del hombre es social, que el origen de la especie se encuentra en la existencia y que el lenguaje, centro fundamental del desarrollo del pensamiento, es producto de una comunidad que fue construyendo el ámbito regido por la palabra.
“En México, las universidades públicas son el pilar de nuestra cultura, de nuestra ciencia y de nuestras artes”, dijo.
En su opinión, la Universidad Veracruzana es formadora de pensamiento, ciencia, creación y conciencia. Es, además, difusora del arte y las letras, custodio de nuestro patrimonio cultural y de la obra de los antiguos habitantes de la región del Golfo de México.
En la UV, queremos trazar y volver a trazar los caminos hacia el cambio profundo: Rectora
En su mensaje de bienvenida para los condecorados, Sara Ladrón de Guevara expresó: “El día de hoy, la UV entrega su máxima distinción a dos excepcionales personajes del mundo de las ideas. Significativamente, uno ha dedicado su quehacer al pensamiento mesoamericano, y el otro, al pensamiento europeo, las dos tradiciones que nos dan identidad”.
Destacó que en la UV “estamos haciendo de la tradición y de la innovación dos de los ejes rectores de nuestra labor diaria, para trazar y volver a trazar los caminos hacia el cambio profundo que requiere nuestra máxima casa de estudios, conscientes de las exigencias y necesidades de nuestra comunidad universitaria y de la sociedad a la que nos debemos”.
Asistieron en el presídium Nemesio Domínguez Domínguez, subsecretario de Desarrollo Cultural de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), en representación de gobierno del estado; Isabel Lagarriga Attias, investigadora del Instituto Nacional de Antropología e Historia, y Cristina Oehmichen Bazán, directora del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM.
Por parte de la UV estuvieron presentes Leticia Rodríguez Audirac, secretaria Académica; Clementina Guerrero García, secretaria de Administración y Finanzas, y Beatriz Rodríguez Villafuerte, vicerrectora del campus Orizaba-Córdoba.