Carlos Hugo Hermida Rosales
Freya Olivares Saucedo y Rubén Hernández Flores, egresados de la Facultad de Pedagogía, presentaron la tesis “Malestar docente en los maestros de la Facultad de Pedagogía de la Universidad Veracruzana, región Xalapa, sistema escolarizado”, en el “Foro de presentación de documentos recepcionales periodo escolar Febrero-Julio 2016” que se llevó a cabo del 4 al 6 de julio en dicha entidad académica.
Los jóvenes universitarios, quienes fueron asesorados por la académica Silvia Ivette Grappin Navarro, coincidieron en que el malestar docente es una realidad cada vez más visible pero que ha sido poco estudiada.
Dentro de su trabajo, los egresados analizaron cómo se manifiesta tal situación en catedráticos de la Facultad de Pedagogía de la UV región Xalapa, y expusieron propuestas para reducirla.
Freya Olivares comentó que el malestar docente es un fenómeno en el que se presenta incomodidad, sensación de molestia física y anímica por parte de los profesores, durante el desempeño de sus actividades laborales.
Agregó que debido a las actuales políticas universitarias, los docentes de Pedagogía deben diversificar sus funciones y ello les genera una mayor carga de trabajo, al mismo tiempo que su situación laboral es cada vez más inestable.
Explicó que el malestar se debe a que algunos profesores tienen una actitud de negación a lo que se vive en su entorno académico, lo cual llega a confundirlos ya que, por un lado, identifican los síntomas que les generan incomodidad y, por otro, los aprueban.
Rubén Hernández mencionó que dentro de las situaciones particulares que generan malestar se encuentra el cambio de instalaciones de la Facultad al Campus Arco Sur, ya que no existe mucha variedad en servicios de comida o papelería, aunado a que muchos de los catedráticos deben recorrer una mayor distancia de su hogar al trabajo.
Añadió que situaciones personales como enfermedades, fracturas en relaciones docentes, estrés y cansancio, son otras de las causas del malestar.
El joven expresó que existen varias opciones para remediar esto, como impulsar el desempeño docente a través de incentivos económicos y así mejorar la práctica académica, acondicionar áreas para el desenvolvimiento que impulsen el crecimiento profesional, pero sobre todo, realizar proyectos en los que la comunidad estudiantil y el personal que labora en la Facultad de Pedagogía valoren la práctica docente y lo que ésta amerita.
La asesora Silvia Ivette Grappin afirmó que la situación del malestar docente es generalizada en el país y la UV no se ha quedado al margen; resaltó la importancia de que los profesionales en pedagogía intervengan en este tipo de situaciones para prevenirlas y ayudar a solucionarlas.
Aseguró que el pedagogo necesita abrirse nuevos campos de intervención profesional y en ese sentido debe atender las temáticas emergentes que el propio contexto le plantea; si en este momento la situación indica un foco de atención
para el profesional de la pedagogía, hacia allí deben dirigirse sus estudios e intervenciones profesionales.