Paola Cortés Pérez
Georgina Valdespino Aguilera, responsable del Área de Propiedad Industrial de la Coordinación General de Vinculación y Desarrollo Institucional de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), afirmó que no es casualidad que los países con mejores condiciones económicas son aquellos que tienen más registros de patentes.
En el evento “Patentes, registros que trascienden”, organizado por estudiantes de la Facultad de Ciencias Administrativas y Sociales (FCAS), Valdespino Aguilera dictó la conferencia “Potencial tecnológico de las IES: el caso de las patentes”, en la sala de videoconferencias de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI), el 1 de junio.
Pablo Francisco Álvarez, coordinador de la agencia Grado Seis, explicó que el evento fue organizado a lo largo de ocho meses por estudiantes de la Licenciatura en Publicidad y Relaciones Públicas, como parte de sus actividades correspondientes a dos experiencias educativas.
La actividad fue inaugurada por la directora general del Área Académica Económico-Administrativa, Liliana Betancourt Trevedhan, acompañada del director de Desarrollo Académico e Innovación Educativa, José Antonio Hernanz Moral; de la directora general de Vinculación, Rebeca Hernández Arámburo; del director general del Consejo Veracruzano de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico (Coveicydet), José Manuel Velasco Toro, y la directora de FCAS, Martha Patricia Domínguez Chenge.
Georgina Valdespino mencionó que en 2011 la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) dio a conocer que en los países que se clasifican de ingreso alto, de acuerdo al Banco Mundial (que tienen ingresos per cápita de mil 276 dólares), el 80 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) se debe a productos y/o servicios derivados de la innovación, de ahí la importancia de este tema.
Explicó que de acuerdo a la OMPI, la patente es un derecho exclusivo concedido a una invención, es decir, a un producto o procedimiento que aporta una nueva manera de hacer algo o una nueva solución técnica a un problema.
Señaló que el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) determina los requisitos que debe cubrir una invención para ser patentable: ser novedosa, tener una actividad intensiva, tener una aplicación industrial y contar con una descripción detallada sobre el producto. Su vigencia es por 20 años y es improrrogable.
“Actualmente el sistema de patentes es muy importante porque se podrá generar más conocimiento y capital humano más calificado”, resaltó.
Sin embargo, reconoció que para las universidades públicas es complicado patentar porque sus recursos económicos son insuficientes, dado que el costo de la solicitud es superior a los tres mil 400 pesos y en otros países es de alrededor de tres mil dólares.
A nivel mundial los países que están en los primeros lugares de solicitudes de patentes, dijo, son China, Estados Unidos, Japón, Corea y Alemania. Mientras que los países con mayor número de patentes registradas son Estados Unidos, China, Japón y Reino Unido; México ocupa el lugar número 15.
En cuanto a universidades, Valdespino Aguilera indicó que la Universidad de California, en Estados Unidos, fue la primera en obtener un registro de patente y es la que posee mayor cantidad; tan sólo hasta 2012 había obtenido siete mil 586 registros y en 2006 generó alrededor de 62 millones de dólares por concepto de regalías.