Paola Cortés Pérez
Es urgente crear espacios de diálogo y reflexión colectiva, en donde adultos y jóvenes generen acciones para atender la violencia, la cual está presente en la mayoría de los ámbitos sociales de la vida cotidiana de niños y jóvenes, declaró Elba Alvarado, profesora-investigadora de la Universidad Pedagógica Veracruzana (UPV).
Lo anterior tuvo lugar durante la presentación de los libros La gestión de la violencia en las escuelas de educación básica en Veracruz; Elementos conceptuales y metodológicos para el estudio de la violencia en las escuelas y La gestión integradora contra la violencia en las escuelas: algunas herramientas para directivos y otros actores escolares, coordinados por José Alfredo Zavaleta Betancourt, Ernesto Treviño Ronzón y Modesta Jiménez Orozco, editados por la Universidad Veracruzana y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
El evento se llevó a cabo el 21 de mayo en el Auditorio “Gonzalo Aguirre Beltrán” del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales (IIH-S) de esta casa de estudios. Cabe mencionar que estos títulos fueron resultado del proyecto de investigación “La violencia en las escuelas de educación básica en Veracruz”, financiado por el Conacyt y realizado en cuatro zonas metropolitanas de la entidad: Veracruz, Xalapa, Poza Rica y Coatzacoalcos.
Alvarado dijo que la escuela aún está a tiempo de poner atención al proceso de preparación de los adolescentes para la vida adulta, “es tiempo de cultivar en ellos el espíritu crítico, para transitar hacia una nueva ciudadanía. ”La realidad nos demanda un giro profundo para que niños y adolescentes puedan transitar por un tiempo histórico social de crisis civilizatorio, no depende de modificaciones superficiales pero sí de una oportuna anticipación de valorar el principio de precaución, de la participación consciente y el diálogo intenso entre los involucrados.”
En tanto, Fabio Fuentes, jefe de la Dirección de Centros Regionales de Estudio de la UPV, expresó: “Es claro que la escuela ya no alimenta lo mejor de nosotros mismos”.
Para una mayor comprensión del fenómeno de la violencia escolar, apuntó que los autores recuperan informes de organismos nacionales e internacionales, lo cual posibilita tener una perspectiva estadística que da cuenta del tamaño de la problemática.
Según la investigación realizada en escuelas primarias y secundarias de las zonas de Xalapa, Veracruz, Poza Rica y Coatzacoalcos, las ofensas, las amenazas, el lenguaje soez y las agresiones verbales son comunes, de acuerdo a los testimonios de directores y profesores.
En la categoría de robo, señaló, los más frecuentes son de objetos de valor entre los alumnos, como son prendas de vestir, celulares, chamarras, uniforme, etcétera. En la categoría de riñas, apuntó que son muy comunes a la hora de la salida y se presentan entre alumnos, alumnos con vecinos, vecinos con vecinos integrantes de pandillas.
Con relación al bullying y ciberbullying, puntualizó que los directivos escolares aseguraron que es poco frecuente en los planteles educativos, sin embargo las intimidaciones durante el recreo son frecuentes.
“Esto resulta significativo para la comprensión y conocimiento del fenómeno de la violencia escolar, pues constituyen puntos de referencia ineludibles para el diseño de estrategias de mediación e intervención del problema”, concluyó.