La institución ganó el Premio “Carlos Maciel Espinosa al servicio social universitario 2014”, en la categoría Nacional Estudiantil
David Sandoval Rodríguez y Luis Enrique Romano Páez
La Universidad Veracruzana (UV), a través de la Dirección General de Vinculación, realizó el Primer Foro “Tu experiencia comunitaria”, en el que los universitarios compartieron y difundieron sus vivencias relacionadas con los diversos proyectos de vinculación que mantiene la institución.
Las actividades se realizaron los días 6 y 7 de noviembre en el auditorio de la Facultad de Arquitectura. En la inauguración, Rebeca Hernández Arámburo, directora general de Vinculación, recalcó: “Para nosotros es muy importante este espacio de aprendizaje y reaprendizaje, sabemos que en el hacer se aprende pero en la reflexión que hacemos, también”.
Señaló que el conocimiento que se construye en el aula debe ser llevado a la práctica para buscar la solución de problemas y mejoras en el entorno, “ése es el sentido de la vinculación en la Universidad, no está centrada en la obtención de fondos o en una visión asistencialista, se interesa en resolver las problemáticas del entorno y regresar a nuestra institución todos aquellos aprendizajes respecto a cómo nos estamos formando como profesionistas”.
Asimismo, resaltó que la vinculación debe tener una postura socio-académica, con énfasis en atender las necesidades sociales y reconocer las características de cada uno de los espacios a donde llega, como también enfatiza su realimentación hacia el quehacer universitario, “es un ciclo que tiene en la docencia y en la investigación”.
A su vez, Octavio Ochoa Contreras, secretario de la Rectoría, mencionó que el trabajo de vinculación de la Universidad ha obtenido premios y reconocimientos por su apoyo a las comunidades. Implica no solamente ir a las comunidades sino regresar a la academia: “Es en ese sentido que nuestra Universidad asume como una de sus dimensiones transversales la responsabilidad social, la clara conciencia de que cada uno de sus estudiantes, académicos y trabajadores, somos ciudadanos que formamos parte de una comunidad a la que nuestro quehacer impacta significativamente, y eso jamás tenemos que perderlo de vista”.
Esta responsabilidad social ha caracterizado a la institución, subrayó, desde sus inicios, siempre pendiente de los grupos vulnerables, a través de múltiples acciones que promueven el desarrollo humano que garantice una mejor calidad de vida recuperando los saberes y tradiciones de las comunidades.
El funcionario anunció que la UV fue reconocida recientemente con el Premio “Carlos Maciel Espinosa al servicio social universitario 2014”, en la categoría Nacional Estudiantil, con el proyecto “Diagnóstico integral de salud, Casa de la Universidad Molino de San Roque”.
Cabe mencionar que Carlos Maciel Espinosa fue un chiapaneco altruista. A continuación, Héctor Cruz González, jefe del Departamento de Vinculación Comunitaria, presentó la conferencia “Las perspectivas de la vinculación”, en la que destacó que la UV ha definido el término desde una postura socio-académica. “La vinculación es un proceso de ida y vuelta, que tiene que regresar a la academia para saber si efectivamente la formación que le damos a los estudiantes se ajusta a las condiciones del país, especialmente de nuestra región”, observó Cruz González.
Para llevar a cabo tal objetivo ha sido fundamental la implementación del Modelo Educativo Integral y Flexible (MEIF) y que el servicio social sea una experiencia educativa, ya que permite conocer los logros del estudiante al trabajar en comunidad.
UV-Peraj reiteró compromiso con zonas vulnerables En el foro participó Yeudiel Domínguez Pérez, alumno del tercer semestre de la Maestría en Arquitectura, quien habló de su participación en el programa UV-Peraj. El programa Peraj “Adopta un amig@” nació en Israel en 1974 con un proyecto de un grupo de académicos y estudiantes del Instituto Weizmann de Ciencias, cuyas actividades se encaminan a los niños y jóvenes de comunidades en desarrollo o necesitadas de apoyo.
En la UV, el programa arrancó en 2009 en la Casa Molino de San Roque. El objetivo es favorecer a niños de quinto y sexto grado de primaria para desarrollar su potencial y ampliar su mundividencia, mediante la instauración de una relación significativa con un joven universitario que participa como su tutor.
Yeudiel Domínguez participó con la ponencia “Un proyecto comunitario”, durante la cual expuso su trabajo en la Casa UV, apoyado con imágenes de un niño de nombre Gonzalo, quien recibió apoyo del programa, así como de las actividades que realizaron a lo largo de su estancia.
Mencionó que el sitio se encuentra en una reserva natural en la periferia de Xalapa, donde hay altos índices de violencia, criminalidad y adicciones.
Estos factores, lamentó, propician que muchos niños y jóvenes opten por vivir de lo que las calles les dan y no asistir a la escuela.
De ahí la importancia del programa UV-Peraj. El programa contemplaba tres ejes principales: la lectoescritura, el lógico-matemático y el ambiental.
Domínguez Pérez también fue parte de la coordinación de grupo al siguiente año. Consideró que era importante sumar cuatro elementos: el físico, los deseos, las emociones y el intelecto, de esta manera se complementarían todos los ejes. Una de las actividades sobresalientes fue la creación de un cortometraje, actividad donde cada niño escribió una historia y con base en ello se creó el producto audiovisual con todos sus personajes.
Los vestuarios, el maquillaje y la dinámica ayudaron a fortalecer la autoestima de muchos niños, ya que éstos se dieron cuenta de la enorme capacidad que tienen.
Los resultados se vieron reflejados en el mejoramiento académico y el desarrollo personal de los niños. Finalmente, después de permanecer un periodo de dos años y finalizar su servicio, Yeudiel Domínguez decidió que lo más justo era dedicar su tesis a su experiencia como tutor de niños y jóvenes desfavorecidos, por lo que considera que este programa ayudó a que ganaran todos.
Durante el Foro de Vinculación Comunitaria también se habló de las Brigadas Universitarias de Servicio Social (BUSS), agrupaciones de estudiantes que llevan a cabo su servicio social por un periodo de seis meses, un año, o más, con el objetivo de reforzar su formación profesional y promover los procesos de desarrollo en regiones indígenas, rurales y urbanas del estado de Veracruz.
Entre sus objetivos están: reafirmar la formación profesional y humana de los jóvenes, por medio de la convivencia con personas en condiciones desfavorables; impulsar el desarrollo sostenido a las familias que viven en los medios indígena, rural y urbano, con metodologías participativas y de autogestión; aumentar la participación de estudiantes, docentes e investigadores en proyectos dirigidos a la aplicación de conocimiento; y promover el desarrollo de estas regiones.
El proyecto actualmente cuenta con ocho casas ubicadas en las cuatro regiones de la UV, una de ellas la de Molino de San Roque. Los participantes de este proyecto son estudiantes de varias carreras de la UV que cumplen con el requisito para llevar a cabo su servicio social, con disponibilidad de tiempo de cuatro horas diarias en el lapso de 10 meses, interés en el trabajo con menores de edad y un promedio de calificación de ocho, mínimo.
Los Centros Comunitarios Digitales (CCD) son una herramienta del programa Casas UV integradas por aulas de acceso público a Internet, conectados mediante una plataforma que difunde el conocimiento y uso de las tecnologías de información y comunicación (TIC).
Los CCD proponen educación a distancia en línea, en cooperación con el Instituto Consorcio Clavijero, taller de habilidades intelectuales para el examen de ingreso a la UV, alfabetización digital, capacitación en el uso de TIC, tutorías y asesoría académica en línea, y gestión y trámites académicos administrativos en línea.