Veracruz • Boca del Río
Alma Martínez Maldonado
El pintor y escultor Abel Zavala, egresado de Facultad de Artes Plásticas, presentó su obra Guardapelo, una experiencia que invita a ver, tocar e inclusive oler las piezas que se encuentran en el interior de la galería de arte de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de Veracruz.
“Guardapelo quiere provocar una experiencia sensorial primaria y que el público aprecie aspectos tan sencillos como el color, la textura, la luz incidiendo sobre la obra; pretende además despojar a las piezas de toda narrativa”, explicó el autor.
Las esculturas se integran al espacio de la galería de arte de la USBI, se puede transitar entre ellas y no incluye sólo la vista, también es una experiencia táctil.
El innovador proyecto surgió del interés por trabajar el arte matérico –donde el protagonista de la obra es la materia–, el lenguaje de los materiales y los principios del minimalismo.
Zavala mencionó: “Utilicé principalmente el pelo de perro porque me parece que es un territorio poco explorado y que tiene muchas posibilidades. La idea me surgió de observar a los perros, de ver su pelo ondulado cuando caminan, los diversos colores que tienen, las diferentes formas y texturas de cada raza”.
En la inauguración, el vicerrector Alfonso Pérez Morales aplaudió la creatividad del egresado de la UV y sostuvo que las esculturas invitan a disfrutarlas no sólo visualmente, sino también de forma táctil. “Te pone a pensar, el arte es algo que provoca, que hace que uno tenga una reacción hacia lo que observa”.
El proceso creativo
Guardapelo está conformada por 55 piezas de diferentes formatos, “hay piezas de seis metros, otras de dos, unas que incluso caben en la palma de la mano”.
El proceso para elaborarlas duró cuatro años e incluyó la recolección del material, clasificación y elaboración de las piezas. El pelo utilizado es principalmente de perro, sin embargo hay esculturas de alpaca, borrego y peribuey.
El pelo está lavado y deshilado, la técnica usada para armar la pieza es el felting –se introduce el material con agujas que hacen que las fibras se entrelacen y se unan al soporte–. “Lo que yo hice son bordados sobre estructuras textiles y la obra terminada trata de integrarse a los espacios, es escultura expandida”, detalló Abel.
El joven escultor nació en 1986, ha trabajado con pintura, cerámica y escultura; ha expuesto en Inglaterra, Japón, Estados Unidos, España y México.
Desde pequeño incursionó en el arte, sin embargo fue en 2004 que lo hizo de forma profesional, cuando ingresó a la carrera de Artes Plásticas en la UV.
“El arte es un terreno que me ha dejado muchas satisfacciones porque aquí puedo ser y hablar como quiera, no estoy supeditado a nada. Es un campo de total libertad”, concluyó.