Enero-Marzo 2006, Nueva época No. 97 Xalapa • Veracruz • México
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En el Instituto de Salud Pública
Estudian un nuevo y más eficaz diagnóstico de la tuberculosis
Juan Carlos Plata

Es entre 25 y 30 por ciento más eficiente y casi 50 por ciento más rápido
que otros
Investigadores del Instituto de Salud Pública de la Universidad Veracruzana (UV) realizan pruebas de detección de la bacteria que ocasiona la tuberculosis, utilizando un método llamado diagnóstico de tuberculosis por reacción en cadena de polimerasa, también conocido como PCR, que ha demostrado ser más rápido y eficaz para la detección de la enfermedad.

Roberto Zenteno, miembro del Instituto de Salud Pública de la UV.
El investigador Roberto Zenteno explicó que el procedimiento consiste en estudiar una muestra de mucosa de los pacientes, de la cual se extrae el ADN y, a través de un procedimiento llamado reacción en cadena de polimerasa –que “fotocopia” esas muestras de ADN si contienen la bacteria–, se puede saber si la persona está infectada o no.

Este método es mucho más rápido y más efectivo que las convencionales baciloscopías que se realizan en todos los laboratorios de los sistemas de salud del país y que tardan hasta cinco días en dar un resultado certero en un 60 o 70 por ciento de los casos, mientras que con el diagnóstico de PCR hay resultados confiables en un 93 por ciento en dos días y medio.

Además de estos sistemas de detección existen: el de “cultivo rápido”, que trabaja mediante una reacción radiactiva; el medio de cultivo tradicional que puede tardar hasta ocho semanas en arrojar un resultado; y el método de detección de anticuerpos, en el que se hace una prueba con suero extraído de los pacientes y mezclado con antígenos de tuberculosis, y si se da una reacción quiere decir que se está contagiado.

“La tuberculosis es ocasionada por un grupo de bacterias llamado complejo mycobacterium. Hay como 70 especies diferentes, de las cuales por lo menos 25 pueden infectar al ser humano. Además, es una enfermedad infecto-contagiosa que tiene un comportamiento muy diferente a todos los padecimientos que conocemos; por ejemplo, una gripa tiene un tiempo de desarrollo de enfermedad de cinco días máximo, y la tuberculosis tiene un periodo muy grande de latencia”, aseguró Zenteno Cuevas.

Factores de riesgo
Según el propio investigador, actualmente, hay por lo menos dos factores que han incrementado el número de casos de tuberculosis en el mundo (entre ocho y 10 millones de nuevos casos al año, de los cuales mueren alrededor de tres millones): la proliferación del VIH-Sida –la tuberculosis puede estar en el organismo y no desarrollar una infección, pero se dispara cuando hay una disminución en las defensas del individuo– y la drogo-resistencia, que han desarrollado algunas de las especies de la bacteria.

En México, dicha enfermedad es endémica (se reportan al año entre 15 y 20 mil casos, y en Veracruz, alrededor de mil 500 casos anuales) y está muy asociada a la pobreza, pues una persona de escasos recursos es, regularmente, una persona desnutrida y eso impacta directamente al sistema inmunológico, y al bajar las defensas se dispara la posibilidad de una infección.

Zenteno Cuevas dijo que la vacuna BCG –que es la que se utiliza universalmente para prevenir la tuberculosis– tiene un rango de protección de cero a 80 por ciento, es decir, que aun cuando se está vacunado se tiene un 20 por ciento de probabilidad de que se desarrolle la infección. “Por si fuera poco, la protección que da la vacuna disminuye con la edad; después de los 20 años es prácticamente inútil contra una infección, por lo que de esa edad en adelante la defensa queda a cargo del sistema inmunológico”.

Tiene como cuatro años que se descubrió el genoma completo de la bacteria de la tuberculosis, dijo el investigador; “esto va a permitir analizar fragmentos del ADN y saber para qué codifican, y si son para proteínas que tienen que ver con la interacción con las células con las que ataca, se podrán desarrollar nuevas vacunas”, afirmó.