Exponen Tierra y Fuego, muestra
colectiva de jóvenes ceramistas
Gina Sotelo

con espinas metálicas, de Norma Salas; “Cuento”, instalación de Fernanda Pliego, en la que convergen diferentes elementos: estrellas que penden de un árbol, un sol que descansa con los ojos cerrados dentro de una jaula y una luna que duerme sentada en una banca de un parque; “Atam”, pieza de sutil trabajo que evoca un conjunto de árboles fraccionados con estilo delicado, elaborada por Renata Casiano; o “Cabeza”, expresivo rostro realizado por Pablo Rosales que muestra marcadísimos rasgos, profunda mirada y descomunales dientes, que en su conjunto resultan una atractiva figura que observa con mirada un tanto molesta.

Rabí Montoya presentó “Caja humana”, realista ejercicio en el que los pies y manos que lo conforman parecen cobrar vida, fuerza, pasión y energía. “Met...a…mor…fosis” es la pieza que elaboró Noé Hernández; se trata de una escultura poliforme y policromática hecha en cerámica. Mariana Tornella presentó una pieza, sin título, con forma de pera que tiene una hendidura atravesada por un sinnúmero de pequeñas ramas; en ella, el barro se erige en su tono natural como elemento principal fusionándose en un todo con las pequeñas estacas de madera.