Año 3 • No. 106 • junio 16 de 2003
Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


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Desde lo ético hasta lo penal
Ser químico clínico, una gran responsabilidad
Édgar Onofre Fernández

La responsabilidad del personal que labora en los laboratorios de análisis químico-clínicos va más allá de la que tiene con quien solicita su servicio, incluso tiene un carácter jurídico regulado por la Secretaría de Salubridad y Asistencia, ya que los reportes de laboratorio llegan a cobrar carácter de documento legal y las sanciones penales por un error en el diagnóstico químico pueden llegar hasta el homicidio imprudencial, advirtió Patricia Trujillo, académica de la Universidad Veracruzana, durante su conferencia “Normatividad y ética en laboratorio clínico”.

Trujillo enfatizó que el compromiso del profesional de los análisis químico-clínicos no sólo es con quien solicita sus servicios, sino también con los médicos que


Patricia Trujillo, académica de la Universidad Veracruzana.
diagnostican y buscan soluciones a partir de los resultados de los exámenes. “Una muestra constituye una parte de la vida del paciente, y su análisis tiene consecuencias tanto para el paciente como para el médico que basa su dictamen en ellos”, afirmó.
Las sanciones penales por un error en el diagnóstico químico pueden llegar hasta el homicidio imprudencial
Como ejes rectores de la vida profesional del químico clínico ubicó a la honestidad, veracidad y pertinencia, además de que convocó a estudiantes y académicos a reconocer sus capacidades y limitaciones para aceptar o no responsabilidades en el laboratorio.

También convocó a hacer de la ética un ejercicio cotidiano, pero enfatizó que eso depende del conocimiento, del desarrollo de habilidades y del grado de madurez personal que permite trastocar una visión individualista por otra de carácter social, el yo por el nosotros.

Hacia el final, la ponente enlistó algunos elementos que fortalecen la seguridad en el laboratorio, como la confianza en el propio conocimiento y el establecimiento de medidas para identificar las sustancias tóxicas que se manejan en el campo de trabajo.

Sustentada en el Museo de Antropología de Xalapa, dentro del XXV aniversario de la Facultad de Bioanálisis de la Universidad Veracruzana e inserta en las Jornadas de Química Clínica, la ponencia de la académica universitaria estuvo orientada sobre todo a la ética como parte medular de las actividades del químico clínico.