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Estudian
en la UV la neurofisiología de la reproducción
Conocer
el funcionamiento del organismo, fundamental para evitar sus disfunciones
Edith
Escalón |
Conocer
el funcionamiento del organismo y la conducta sexual masculina resulta
fundamental para evitar sus disfunciones, aseguró Jorge Manzo
Dennes, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, quien dirige
en el Instituto de Neuroetología de la Universidad Veracruzana
la línea de investigación Neurofisiología de
la reproducción.
Básicamente estudiamos la conducta sexual masculina,
pero lo que en realidad nos interesa es ver es cómo el organismo
se organiza internamente para que se pueda ejecutar la conducta sexual
masculina; particularmente, estamos trabajando con el sistema nervioso,
que implica las relaciones entre el cerebro, la médula espinal,
los nervios, los músculos y las hormonas sexuales, por supuesto.
Según dijo, las aplicaciones prácticas de la investigación
son muchas, ya que el objetivo de todo este trabajo es buscar más
información sobre cómo opera el organismo para encontrar
soluciones a los problemas de disfunción sexual masculina.
No nos vamos muy lejos, gracias a investigaciones como esta
ha sido posible crear tratamientos como el Viagra, que revolucionó
incluso los patrones de conducta masculinos, señaló.
Explicó que el sistema reproductor es altamente complejo y
tiene un elaborado sistema fisiológico, controlado por la integración
de vías neurales y endócrinas. Aunque la organización
y funcionamiento de este sistema ha sido tema de investigación
desde el siglo pasado, el entendimiento que se tiene de tales procesos
aún es escaso.
Es importante señalar que, derivados de esta línea de
investigación, se han integrado proyectos cada vez más
vinculados con los efectos mortales que produce la lesión de
alguna parte de este circuito, incluyendo al más severo de
ellos, la lesión de la médula espinal.
Jorge Manzo afirmó que la línea de investigación
tiene varios objetivos específicos que pueden integrarse en
varios bloques: la caracterización de la organización
macroscópica y microscópica de las estructuras reproductivas;
el registro de la actividad eléctrica de nervios y músculos
que participan en el control de la reproducción; el papel que
juegan músculos y nervios en el control de la ejecución
motora de la cópula y el potencial de fertilidad de los sujetos,
esto con el fin de plantear nuevos modelos funcionales del sistema
reproductor que sirvan a la vez para integrar nuevas hipótesis
de investigación.
Añadió que la conducta sexual se inicia cuando la fuente
de estimulación de uno de los miembros de la pareja, usualmente
la hembra, estimula sistemas sensoriales del macho, habitualmente
las vías olfatorias, auditivas y visuales: La estimulación
adecuada de estos sistemas produce el desencadenamiento de conductas
masculinas que tienen el propósito de iniciar y, si la disposición
de la hembra lo permite, culminar con la cópula.
Es por ello que en esta línea de investigación se estudian
temas relacionados con el sustrato neural de la conducta sexual, partiendo
del momento de la estimulación sensorial hasta la ejecución
de los patrones motores de la cópula y bases fisiológicas
subyacentes.
El investigador comentó que esta actividad académica
se realiza en la rata, una de las especies más estudiadas y
conocida; sin embargo, todavía hay mucho por hacer. A
pesar de los numerosos estudios, el conocimiento que se tiene sigue
aún estando lejos de ser completo y más lejos de analizar
en su totalidad las diferentes áreas centrales y periféricas
que participan en el control de la reproducción.
Pueden obtener más informes en torno a esta investigación
en el Instituto de Neuroetología de la Universidad Veracruzana,
Apartado Postal 566, Xalapa, Veracruz, cp 91001, teléfonos
(01-228) 812-5748 y 813-5157, fax 812-5748, o en la página
electrónica www.uv.mx. |
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