Año 3 • No. 120 • octubre 20 de 2003 Xalapa • Veracruz • México
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  Editado por la UV
Honra de sierva, para revelar ambigüedades
de género
Alma Espinosa

Claudia Domínguez, Corina Michenea, autora de Honra de sierva, y Mayeli Beverido, durante la FILU. 		Sin llegar a ser una mera confesión insulsa, Honra de sierva es un texto que juega con el lenguaje y las imágenes que tradicionalmente ingresan en la educación sentimental de las mujeres desde niñas. Con una crudeza irónica, la autora, Corina Michelena, convierte en poemas muchos de los inconfesables deseos que luchan por emerger y revela las ambigüedades de hombres y mujeres.

Dotada de instrumentos mágicos como un espejo, una palmatoria y un cuenco
con una hoja verde, Claudia Domínguez desmenuzó Honra de sierva, al participar en la presentación del libro en la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU 2003). Se sirvió del espejo, que llamó símbolo de la imaginación y la conciencia, para reproducir los reflejos del mundo visible, para comparar las sugerencias de Corina y escapar del original.

Debido a que el texto está dividido en cuatro partes, Claudia Domínguez, ganadora del Premio Estatal de Periodismo en el género Entrevista, utilizó la palmatoria para iluminar su camino en la lectura de los poemas que van más allá de ser una mera confesión u oportunidad para arremeter contra lo masculino.
Claudia Domínguez y Maliyel Beverido se reunieron con la autora Corina Michelena para dar a conocer la nueva edición del texto impregnado de humor negro
Para comprender más allá de lo primeramente visible en Honra de Sierva, la periodista y académica de la UV, comentó que el cuenco con la hoja flotante podría ayudar a: “Interpretar al modo de los chamanes y diagnosticar qué es lo que pasa, cuál es la enfermedad o mejor aún, el veredicto de lectura”.

La presentadora extrajo de Honra de sierva algunos poemas que resaltan el sentido del humor de la autora, que a veces se torna demasiado negro. En el texto, concluyó, es evidente: “La exigencia paradójica por la restitución de la dignidad arrebatada, la honra de la sierva, no de la servidumbre”.

A decir de Maliyel Beverido, quien también acompañó a la autora en la presentación, a Honra de sierva no hay que verlo como un manifiesto formal o retórico, sino que es una exposición de 18 poemas impregnados de humor, sutileza, que dan cuenta de los avatares de la feminidad. Todo ello sin olvidar la visión lúdica de la poesía.

Recordó que en el año 2000, al ser publicada la obra se hizo merecedora a premios y adelantó que en esta nueva edición 2003, a cargo de la Universidad Veracruzana, conquistará principalmente al público femenino. A petición de Maliyel Beverido, Corina Michelena dio lectura sentida, aunque apenada, a varios de sus poemas como “La espalda”, “Para bien y para mal”, “Levántate y anda” “Coser y cantar”.