Año 3 • No. 120 • octubre 20 de 2003 Xalapa • Veracruz • México
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Inexistente la cooperación entre
municipios: Valencia Carmona
Edgar Onofre Fernández

Salvador Valencia Carmona (centro) se pronunció porque la Constitución de cada país garantice la autonomía municipal.
Una inexistente cooperación entre ayuntamientos y la posición de los alcaldes para que nadie más intervenga en los asuntos municipales, entorpecen el desarrollo regional en nuestro país, aseguró este jueves Salvador Valencia Carmona como parte de su introducción a la mesa redonda “El Municipio y sus retos en el siglo XXI” organizada por la Universidad Veracruzana.

En la mesa redonda, donde cuatro de los más connotados juristas en materia de derecho municipal de América Latina y Europa se dieron cita en la USBI-Xalapa,
como una extensión académica del Primer Congreso de Derecho Municipal, celebrado en el Distrito Federal, Valencia Carmona destacó las conclusiones a que llegaron los ponentes durante dicho congreso:

La constitución de cada país debe garantizar la autonomía municipal, las formas de gobierno de cada uno de ellos tienen que ser flexibles y adaptarse a las particularidades de la región e implantar el servicio civil de carrera en los ayuntamientos. Se requiere mayor fortaleza económica para los municipios, se debe instituir la cooperación entre municipios, mejorarse la justicia impartida en los ayuntamientos y establecer mecanismos de participación ciudadana, según enlistó.

Destacó, además, la importancia de la gestión municipal en nuestro país dadas las circunstancias políticas actuales, donde el poder legislativo está jugando un papel que no había tenido, y el número de municipios que existen en México: dos mil 431.

El primero en exponer la experiencia de su país en materia de derecho municipal, Antonio María Hernández, presidente de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional, advirtió que las federaciones deben delegar el poder tributario hacia las provincias y éstas al municipio pues “si no hay autonomía financiera, no existe la autonomía municipal”.

Hernández, profesor de la Universidad de Córdoba, Argentina, también aseguró que en América Latina existe una profunda distancia entre norma y realidad y resaltó que las leyes no se cumplen e, inclusive, existe un profundo desprecio, lo que exhibe un subdesarrollo cultural.

Agregó que un buen régimen municipal no puede pensar que la Federación es capaz de establecer un orden municipal homogéneo válido en todo el país y destacó que el ejercicio de gestión municipal debe sustentarse en los principios de autonomía, eficacia del mecanismo gubernamental y la plena participación ciudadana.

El jurista argentino, sin embargo, aseguró que el municipio cada día será más importante en la organización social contemporánea pues “la globalización impone modelos culturales, antes que modelos económicos, y ello obliga al nacimiento de la expresión local: debemos pensar globalmente y actuar localmente para defender las identidades”.

Hernández, por último, dijo que una sociedad más humana, una ciudad más humana –la obra cultural del hombre por antonomasia, según calificó–, necesita municipios activos y vigorosos.

Jorge Lozano Miralles, de la Universidad de Jaén, España, por su parte, al compartir la experiencia española en la materia, dijo que los municipios ibéricos tienen garantizada su autonomía desde la Constitución y que, incluso, les permite acudir a tribunales superiores para defender su condición autónoma.

Destacó la creación de consejos vecinales como mecanismos de participación ciudadana y la existencia del servicio civil de carrera que permite que algunos funcionarios permanezcan en el municipio toda su vida y que los proyectos de desarrollo municipal no se detengan con la sucesión del munícipe, aunque resaltó que no existe un mecanismo que evalúe esta trayectoria.

Lozano Miralles dijo que el ayuntamiento en España no tiene autonomía financiera y que, de hecho, está mal financiado, pero destacó que este nivel de gobierno, en todos los países, es el que está más cerca del ciudadano.

Gerard Marcou, de la Universidad de París y miembro del Equipo de Investigación sobre Administración Local en Europa, destacó que en Francia el papel de los municipios en la organización social y política es fuerte y aseguró que la organización de los niveles de gobierno franceses –municipio, departamento y región– responde a realidades económicas y que la injerencia política de las regiones no disminuye el papel del municipio.

El especialista francés resaltó la herencia de autonomía municipal que dejó la Revolución Francesa desde el siglo XVIII y que permite un amplio margen de libertad a los casi 36 mil municipios que tiene el país galo y resaltó que el peso del sector público local es de gran importancia en Francia.

Marcou dijo que el sólido funcionamiento del municipio francés está basado en la existencia de una red de servicios del Estado que funciona, sobre todo, en los niveles menores de gobierno, la cooperación entre municipios que ha establecido cerca de 15 mil establecimientos públicos en todo el país y la delegación de algunos servicios a la iniciativa privada desde el siglo XIX, vigilados por el gobierno, como transporte, luz y agua, y que los municipios franceses obtienen más del 50 por ciento de los recursos obtenidos a través de los impuestos.

Sin embargo, Marcou hizo hincapié en que el desarrollo urbano es uno de los más importantes problemas de los municipios franceses y que la noción de autonomía, aunque existe en la práctica, no es utilizada por el derecho público francés pues se opone a la unificación del país que establece la ley.

José Palomino Manchego, de la Universidad San Marcos en el Perú, a su vez, destacó que los municipios tienen un significado sociológico más que político, pues son los entes locales los que dan vida al Estado, aseguró y, para enfatizar la importancia de los municipios en la vida de América latina, dijo que España sembró cabildos y cosechó naciones.

En pos de la autonomía municipal, el legista peruano advirtió que no debe haber intromisión de los gobiernos centrales en los asuntos municipales y aseguró que es necesario que los estados de América Latina establezcan una carta de autonomía municipal, tal y como lo hicieron en Europa.

Palomino Manchego aseguró que los mecanismos de participación ciudadana deben ser reconocidos en Latinoamérica y que debemos estar pendientes de las acciones del gobierno central sin desmerecer a entes municipales, además de que explicó que temas como urbanismo, salud, educación y servicios deben establecerse atentos a la vida cotidiana de los municipios.

Hacia el final de la mesa redonda, Raúl Arias Lovillo, secretario Académico de la UV, aseguró que el tema municipal es parte de la agenda universitaria y advirtió que “si buscamos mejorar la calidad de vida en Veracruz, tenemos que mejorar la célula. De lo contrario, puede presentarse la muerte del cuerpo entero”, además de que destacó las actividades que la Universidad viene realizando en materia de asesoría para la gestión municipal.