|
|
Pasado que se saborea en el presente:
Café
Alma Espinosa |
La
necesidad de construir nuevos mercados para el consumo del café
es una tarea imperiosa tanto para las políticas de Estado como
para productores y comercializadores de este producto que históricamente
ha conquistado distintas culturas en todo el mundo y que poco a poco
eleva su calidad para satisfacer a los paladares más exigentes.
En el marco
de la Expocafé Universitaria. Retos y alternativas del sector
que se celebra desde el pasado 21 de octubre, Susana Córdova
Santamaría, catedrática de la Universidad Autónoma
de Chapingo Campus Huatusco, comentó que la principal labor
de los productores y comercializadores del café es conquistar
y popularizar su consumo.
Al tiempo que se acrecienta su consumo, se trabaja en la elevación
de la calidad con el esfuerzo conjunto de investigadores, académicos
y cafetaleros que hasta nuestros días, con tal de obtener mayores
ganancias, no ponen especial atención en la selección
de los mejores granos, provocando así la eliminación
de un mercado mayor de consumidores.
A pesar de que recientemente se ha visto una proliferación
de cafeterías en el Distrito Federal, su consumo no se ha incrementado
en las demás zonas de la República Mexicana, incluso
hay estados como Hidalgo o Chihuahua en los que el café de
calidad no es considerado como un producto atractivo, contrario a
lo que sucede con los solubles. Por esta razón es que se deben
incrementar las campañas de difusión en estos lugares
que deberán estar acompañadas de imágenes y textos
perfectamente bien elaborados para crear una cultura de consumo del
buen café.
Al referirse a las políticas públicas, la académica
señaló que éstas, además de impulsar la
producción de granos con gran calidad y su exportación,
deberían ubicar al productor como tal, sin distinciones de
mayor o menor, pues son ellos los que saben del producto y merecen
tener un espacio en dichas normativas.
En nuestro estado, dijo, se visualiza una tendencia a la agricultura
orgánica, pues son los productores quienes buscan los medios
alternativos de producción. Aun así, se debe trabajar
en replantear el papel de los consumidores, pues ancestralmente arrastramos
el mal consumo del café, lo que se nota al endulzar el líquido
cuando éste tiene que disfrutarse sin azúcar.
En la sala de videoconferencias de la USBI-Xalapa también se
dio cita el catador de café Avelino Hernández quien
comentó que el aromático es pasado que se saborea en
el presente, pero no hemos podido traspasar el umbral de los sentidos
para dar la importancia que el café tiene. Lamentó que
desde décadas atrás no se haya comenzado con la cultura
del consumo de café de calidad, por lo que ahora hay que replantearlo.
Ahora que se le presta atención a dicha situación surgen
las deficiencias de la cultura productora y los enormes atrasos tecnológicos
que son más notorios cuando se compite en mercados internacionales.
Comentó que durante varios años ha desarrollado un proyecto
llamado El fascinante sabor regional, en el que se involucran
a pequeños productores que adoptan una mentalidad de empresarios.
De igual forma se pretende dar una entidad al café, es decir,
que se reconozca el sabor del aromático a través de
su lugar de origen.
En su exposición Fernanda Aldana, quien trabaja en la difusión
de programas para el consumo del café comentó que los
consumidores no advierten los problemas que aquejan a los productores,
quienes han disminuido su asistencia a las exposiciones que se realizan
para promocionar el aromático grano. |
|
|
|
|