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Certificación y producción orgánica,
nuevos retos del campo
Ricardo Luna
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La
producción del fruto litchi empieza a tener éxito entre
los consumidores que buscan alternativas novedosas y atractivas para
el paladar, dijo Rubén Ángel Mandujano Barrios en la
conferencia Certificación de productos orgánicos,
caso exitoso de Litchi en Veracruz, la cual formó parte
de la Segunda Semana de la Ciencia y Tecnología, convocada
por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Mandujano Barrios, productor en el Rancho Alegre Mandumec, ubicado
en Lechugillas, municipio de Vega de Alatorre, explicó que
desde hace seis años se dedica este rancho a la producción
orgánica de este fruto. Para ello cuenta con una certificación
por parte del Consejo Estatal Veracruzano de Agricultura Orgánica,
lo que les ha permitido comercializar sus productos ya con el valor
agregado de ser orgánicos.
Lo anterior significa que para su producción no se aplica productos
químicos de síntesis en la huerta y por lo tanto el
producto final, en este caso los litchis, no llevan residuos tóxicos
que pongan en riesgo la salud humana o en su caso, los recursos naturales.
Informó que el litchi, fruto procedente de China, tiene poco
tiempo de cultivarse en nuestro país, alrededor de 100 años
y las primeras plantaciones se dieron en Sinaloa. En Veracruz, la
mayoría de las huertas de este fruto que se empezó a
cultivar recientemente en México hace 30 años
son jóvenes que no pasan de la década. La gente apenas
lo empieza a conocer. Es un fruto agridulce de sabor sumamente agradable,
cuya cosecha se da alrededor de mayo y junio.
Ya que aún mucha gente no conoce el litchi, agregó Mandujano,
debe hacerse una labor educativa a fin de que el consumidor aprecie
este fruto, y con ello se garantice el mercado nacional y se atienda
el mercado internacional.El ingeniero agrónomo estimó
que en México se debe estar cultivando alrededor de unas dos
mil hectáreas y en Veracruz unas seiscientas.
El árbol del litchi dura muchos años. En China, existen
árboles milenarios con más de cien años de vida
y sus frutos aún se siguen comercializando: por cierto
a muy buenos precios, aseguró.
Por su parte, Omar Martínez Nieves secretario de Producción
y Certificación del Consejo Estatal Veracruzano de Agricultura
Orgánica, también invitado a la conferencia, aseguró
en entrevista que en el estado de Veracruz se ha empezado a gestar
un importante movimiento por certificar los productos del campo y
que, de hecho, cada vez más productores se preocupan por cultivar
de forma orgánica.
Se sabe que los productos orgánicos tienen un valor agregado
para los compradores, de ahí que se registre un sobre precio
en el mercado, pero para eso hace falta contar con una certificación
de que lo que se ofrece realmente al mercado son productos orgánicos.
Asimismo con la certificación, dijo el entrevistado, más
productores estarán preparados para cumplir con las normas
que en inocuidad se han empezado a promover en los Estados Unidos
para los productos del campo de nuestro país, misma que se
aplicaría a partir de 2004.
Entre los productos que más se certifican están el café,
litchi, papaya, carne, leche orgánica, productos trasformados
como abono orgánico, insecticidas biológicos, entre
muchos más. Pero están en boga los productos no tradicionales,
los cuales tienen una amplia demanda en países como EU, Alemania
y los pertenecientes a la Unión Europea. |
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