Año 3 • No. 127 • enero 12 de 2003 Xalapa • Veracruz • México
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Asistió como testigo de honor el gobernador Miguel Alemán Velazco
Otorga la UV Medalla al Mérito
a Henestrosa y José Iturriaga
Edgar Onofre Fernández
La obra intelectual de Andrés Henestrosa y José Iturriaga transforma y revela, a través de una mirada crítica y certera, el conocimiento y la belleza que subyacen en la memoria histórica y en la tradición cultural de nuestros pueblos. Con esas palabras, el rector de la Universidad Veracruzana, Víctor Arredondo, se refirió a estos dos personajes indiscutibles de la vida cultural y política de México, a quienes se honró con la Medalla al Mérito UV, por considerar que su contribución al conocimiento es modelo para las generaciones presentes y venideras.

Los galardonados: Henestrosa e Iturriaga, momentos antes de recibir la Medalla al Mérito UV.

En presencia del gobernador Miguel Alemán Velazco, Arredondo destacó que el conocimiento compartido por ambos a través de su obra “nos brinda las claves para comprender la evolución de un país que emprendió cambios vertiginosos, guiado por su propia condición histórica y por la acción decidida de hombres como los que hoy reciben nuestro homenaje”.

En presencia de la comunidad académica universitaria, el rector de la uv resaltó la coincidencia de ambos en su amor absoluto por sus respectivos lugares de origen, a los que buscan beneficiar con trabajo, propuestas y acciones de mejoramiento materializadas en hechos, y destacó diversas semejanzas y paralelismos, como los serios obstáculos que ambos enfrentaron en su infancia y juventud: Andrés Henestrosa habló exclusivamente lenguas indígenas hasta la edad de 15 años y José Iturriaga se vio obligado a trabajar en diversos oficios para subsistir aún antes de cumplir los ocho.


El rector Víctor Arredondo, aseguró que la obra
de Henestrosa e Iturriaga nos brinda claves para
la comprensión de la historia de México.
“No es éste el único paralelismo entre ellos. En su formación encontramos, en uno y otro caso, la influencia de docentes tan ilustres como José Vasconcelos, Antonio Caso, Manuel Rodríguez Lozano, Mariano Alcocer, Manuel Herrera y Lazo, Jorge Gaxiola, Eduardo Nicol, Joaquín Xirau, José Gaos, Juan de la Encina y José Moreno Villa, entre otros”, agregó.

Andrés Henestrosa, dijo, es miembro de una generación que cambió la visión de nuestro país: en su obra destacan sus aportaciones al indigenismo, que recuperó no sólo por su propio pasado indígena, sino como parte central de su obra, desde una reflexión sobre el espíritu liberal y el estudio y la valoración de las expresiones nacionales. “En pocos escritores mexicanos confluyen de manera tan afortunada las dos vertientes étnicas que conforman nuestra nacionalidad –la indígena y la española– como en Andrés Henestrosa”, aseguró.

Arredondo destacó las facetas de profesor, funcionario público y periodista en la vida del escritor oaxaqueño, pero, sobre todo, en sus obras Los hombres que dispersó la danza y Retrato de mi madre, se revele como un escritor completo, cuyo amor por los libros le ha marcado indeleblemente. “Aunque renuente a aceptarlo, a Andrés Henestrosa se deben algunas de las páginas más bellas de la literatura mexicana”.

De José Iturriaga, dijo que ha labrado una trayectoria en la que el denominador común parece ser el haber puesto su persona, su talento y su capacidad al servicio de la causa pública. Obras suyas como El tirano en la América Latina y La estructura social y cultural de México son obras fundamentales en su trayectoria, y ha dedicado especial atención a la visión histórica que los norteamericanos han tenido sobre nuestro país, a partir de los discursos que diputados y senadores de Estados Unidos han pronunciado en el seno del Congreso, que conforma un monumental proyecto de investigación.
Cerró la UV el 2003 con broche de oro, pues en noviembre pasado impuso la Medalla al Mérito Universidad Veracruzana a dos destacados intelectuales mexicanos: Andrés Henestrosa y José Iturriaga
Henestrosa concilia en su pecho a sus abuelos y pacifica su sangre: Iturriaga
Andrés Henestrosa integró en sí mismo el mestizaje cultural de México y logró reconciliar en su pecho a sus abuelos y pacificar la sangre que lleva dentro: no es un escritor descastado y posee una honda emoción popular y humanista, dijo José Iturriaga al presentar al escritor oaxaqueño galardonado por la UV.

“En una minucia de Andrés cabe el genio, el ingenio y la belleza toda”, aseguró Iturriaga al contrastar comentarios

De Henestrosa se dijo posee una honda emoción popular y humanista, además de que en el estilo de sus minucias caben la verdad y belleza.
negativos a la producción cautelosa del oaxaqueño frente a un estilo que prefiere, explicó, exprimir su pensamiento, por eso se acerca al aforismo: “Andrés prefiere pensar la palabra antes que escribirla y esto no lo hace ágrafo, sino prudente y cortés con sus lectores”.

Al contrario de otros escritores que han enarbolado lo popular y después se han pasado a la acera de enfrente, Andrés se mantiene en su gusto por la cultura popular y rechaza cualquier postura exquisita, afirmó Iturriaga, y destacó la incorporación de Henestrosa a la cultura occidental hacia los 12 años de edad, cuando aprendió, en una jugarreta del destino, la lengua española a través de un árabe que vendía ropa en abonos. De ahí, explicó Iturriaga, nació la urgencia de Henestrosa por dominar el español que lo llevó, con los años, a ocupar de manera digna una poltrona en la Academia Mexicana de la Lengua.

El también arquitecto e historiador comentó algunas ideas que grandes nombres de la literatura en lengua española expusieron acerca de la obra de Henestrosa: “Pablo Neruda dijo que Retrato de mi madre era una obra maestra de las letras hispanoamericanas, Miguel Ángel Asturias aseguró que Henestrosa se había anticipado a todos al incorporar leyendas y mitos de las culturas indígenas. José Martínez Ruiz, Azorín, lo propuso como un filósofo esclarecedor del mestizaje, mientras que Octavio Paz se mostró siempre seducido por la vigencia de su obra, la emoción de su relectura 40 años después y la maestría de su pluma que se acercaba, desde sus inicios, a la perfección”.
Henestrosa, uno de los escritores indispensables en la incorporación de la cultura indígena a la literatura mexicana, ha recibido las medallas “Elías Sourasky”, Ciudad de México, “Ponciano Arriaga”, “Ignacio Manuel Altamirano”, “Benito Juárez”, “René Cassin” y “Belisario Domínguez”, así como el premio internacional “Alfonso Reyes”. Su libro Retrato de mi madre es, junto a Visión de Anáhuac de Alfonso Reyes y Canek de Emilio Abreu Gómez, la obra mexicana más editada en el extranjero.

De José Iturriaga sus críticos han destacado el éxito con que cultiva lo mismo la historia, la filología, la geografía, la estadística y el folklor.
Todo cuanto escribe José Iturriaga apunta a servir a México: Henestrosa
Al destacar el perfil de su amigo José Iturriaga, Henestrosa dijo que es un intelectual cabal que ha armonizado los sueños de su juventud y se ha traducido a sí mismo a través de la historia: ha cultivado con igual éxito la filología, la historia, la geografía, la estadística, el folklor, todo cuanto escribe, apunta a servir a México.

Aseguró que con Iturriaga, contemporáneo, colega y amigo cercano, lo hermana el amor a México y el deseo de que nuestro país “se llegue a realizar en la manera en que lo soñaron Vicente Guerrero y José María Morelos: a esta estirpe pertenece Pepe Iturriaga”.

Con Iturriaga, dijo, siempre hay una obra que espera y citó al poeta Rubén Darío, “cuando una musa da a luz, las demás quedan encinta”, para mostrar que Iturriaga ha sido un inventor de sueños que ha vuelto realidad poco a poco. El escritor oaxaqueño destacó que Iturriaga se ha propuesto hacer la historia de las relaciones entre México y Estados Unidos, un pueblo al que, dijo, es sano guardar un poquito de odio.

Dijo que José Iturriaga representó en distintas ocasiones a nuestro país en foros nacionales e internacionales, fue embajador de México en la Unión Soviética y Portugal, y es uno de los más importantes divulgadores de la ciencia en México. Ha publicado, entre otros, La estructura social y cultural de México, texto obligado para quienes buscan ahondar en la composición social mexicana.

Además de la presea otorgada por la UV, José Ezequiel Iturriaga Sauco ha sido merecedor de la medalla “Belisario Domínguez” que otorga el Senado de la República, y la Medalla Ciudad de México por su contribución en la recuperación del Centro Histórico de la capital.