|
|
Un momento para avanzar: exceder
nuestras limitaciones auto impuestas
Traducción Rosben Olivera
|
En
la ya clásica película de Clint Eastwood, Magnum
Force (una apreciada película de 1973) Eastwood, quien
interpretaba al detective Harry Callahan, pronuncia la frase: Un
hombre debe conocer sus limitaciones. Ciertamente existe sabiduría
en esas palabras, sin embargo, ¿cómo sabemos cuáles
son nuestras verdaderas limitaciones, físicas, mentales y espirituales?.
Sólo que tomemos tiempo para reflexionar sobre la naturaleza
de nuestras habilidades.
Un amigo que tuve en Wall Street era un alcohólico en recuperación.
Él compartió conmigo algo que llamaba la oración
para la serenidad: Dios, otórgame la serenidad para aceptar
las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las cosas que
puedo, y la sabiduría para saber la diferencia. Una cosa
es conocer nuestras limitaciones, otra muy diferente es aceptar falsos
límites cuando de hecho la mayor parte de nuestro potencial
nunca se utiliza.
Albert Einstein, un tipo un tanto listo, comentó una vez que:
Sólo dos cosas son infinitas, el universo y la estupidez
humana, y no estoy muy seguro acerca de la primera. Y así
nos dejó, en los cuernos de un dilema.
Para mejorar nuestra vida hay que exceder nuestras limitaciones auto
impuestas sin caer en soluciones rápidas que parece que todo
lo resuelven como regresar nuestro reloj biológico o ganar
un millón de dólares. La solución es cuestión
de días.
Comprometerse con un programa de cambio de vida, bien vale la pena
tanto por el dinero como por el esfuerzo, siempre y cuando el plan
sea algo realista. Por ejemplo; de acuerdo a mi edad, mi altura y
mis preferencias actuales, yo nunca seré reclutado por la NBA
(la Asociación Nacional de Baloncesto en los Estados Unidos).
Esto no es un pensamiento negativo, es un pensamiento práctico.
Jugar baloncesto en la nba toma años de práctica y dedicación.
En su mayoría, la edad de los jugadores reclutados oscila entre
los 18 y 21 años, ningún esquema desarrollado en este
2004, me conducirá a jugar en la nba. Ninguno. Punto.
Repito, este no es un pensamiento negativo, es un pensamiento realista.
Un plan práctico para mí, quizá sea uno que tome
en consideración mi preferencia por el deporte y contextualice
mi edad actual y mis habilidades físicas. Si me inclinara a
mejorar mi juego en el baloncesto seguramente podría. Estoy
seguro que mis habilidades mejorarían significativamente si
utilizó un plan útil, práctico y completo. Eventualmente,
seré capaz de lograr ingresar a una liga amateur competitiva
para personas de mi edad. No dudo que con la práctica quizás
sea capaz de competir con personas más jóvenes dentro
de mi rama, pero, y este es un pero muy grande, no voy a lograr entrar
en la nba, no hasta que la ciencia haya vislumbrado como regresar
el reloj biológico y en este caso hablamos de regresarlo mucho
tiempo atrás.
No es que me considere un viejo, pero necesitó mil años
de práctica. Por supuesto, cabe la posibilidad de que algún
día algunos dispositivos puedan ser implantados de forma intramuscular,
los cuales incrementen mi cociente de habilidad corporal. Probablemente
suceda algún día, pero por ahora sólo es ciencia-ficción.
Por lo tanto, jugar baloncesto profesional simplemente no es una opción.
Esa es la realidad.
Para exceder nuestras propias limitaciones necesitamos considerar
nuestras habilidades vastamente subestimadas por nosotros mismos,
idear un plan (muchas veces con la ayuda de personas honestas y con
conocimiento) y aplicarlo para que podamos liberar el cúmulo
de tesoros que puede ser nuestro destino. El desafío permanente,
es evadir a aquellos que se aprovecharían de nuestro deseo
y quieran vendernos una solución rápida sin trabajo,
sin esfuerzo y que nos promete que podemos convertirnos en cualquiera
que deseemos ser.
Lo mejor a lo que puedes aspirar convertirte es en el mejor que tú
puedas ser. Eso debería ser más que suficiente, de hecho
sería un sueño hecho realidad.
Exceder nuestras limitaciones autoimpuestas es esencial en un ambiente
académico, donde a menudo funcionamos como si fuéramos
la suma total de nuestras calificaciones pasadas. Un estudiante de
siete puede llegar a ser uno de diez con un plan, esfuerzo enfocado
y fe en sí mismo. Intentar convertirse en el próximo
Albert Einstein o Stephen Hawking no es realmente relevante. Lo que
sí es relevante es aprobar tus pasiones, aprender cuáles
son tus habilidades creativas y enfocar tus energías para hacer
que tus sueños sean realidad.
No seré reclutado por la nba este año, pero te diré
algo, podría empezar a jugar baloncesto otra vez. Quizá
te vea en las canchas. Quién sabe, con suficiente práctica
podría derrotarte. No voy a limitarme a mí mismo. Tú
no deberías hacerlo. Planea exceder tus limitaciones auto impuestas
ahora mismo.
¿Tienes preguntas o comentarios? Puedes localizarme en: excelencia_humana@hotmail.com.
|
|
|
|
|
|
|
|
|