| Año 3 • No. 132 • marzo 8 de 2004 | Xalapa • Veracruz • México |
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La
Facultad de Antropología
en el 60 aniversario de la UV Francisco Javier Kuri Camacho |
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| Durante
el presente año, la Facultad de Antropología se suma
con beneplácito a las actividades conmemorativas que darán
realce a las funciones sustantivas de nuestra institución,
la cual fue fundada en 1944. El presente texto pretende ser una muestra de los logros, obstáculos y debates de nuestra institución en la formación profesional de antropólogos así como su incidencia en la sociedad. El proceso de investigación antropológica, así como la enseñanza-aprendizaje en la entidad veracruzana, cuenta con varios antecedentes que se remontan a la primera mitad del siglo XX, la fundación del Instituto, Escuela y Museo de antropología puede marcarse en 1957. Estas dependencias iniciaron una de las tradiciones académicas más antiguas del país, sólo precedida por la del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), con sede en la ciudad de México. Este año, la facultad recibirá al congreso más importante de la antropología nacional: Mesa Redonda de la Sociedad Mexicana de Antropología, evento académico y científico que reúne a cerca de 900 ponentes procedentes de todo el país y de diferentes nacionalidades, todos ellos especialistas en antropología social, antropología física, arqueología, lingüística, historia, etnohistoria, etnología, museografía, epigrafía, historia del arte y restauración, entre otras disciplinas y ciencias humanísticas. El congreso ya se realizó en Xalapa, en 1953 y 1973, y al obtener nuevamente la sede se reitera la relevancia y prestigio académico que tiene nuestra institución ante las sociedades y asociaciones nacionales relacionadas con el quehacer antropológico. Cabe recordar que recientemente la Facultad de Antropología también fue la entidad anfitriona del Congreso Internacional de Mayistas (2001) y del Congreso Centroamericano de Antropología (2002), eventos que, en cada caso, permitieron reunir a casi 300 científicos de distintos países del mundo. Ambos congresos se celebraron por primera vez fuera del ámbito geográfico donde solían realizarse, lo que permitió estrechar los lazos interinstitucionales y generar nuevas líneas y enfoques de investigación. Gracias al apoyo de las autoridades universitarias y a la entusiasta participación de nuestros académicos en los comités organizadores y en la presentación de ponencias, contamos con la honrosa visita de personajes como Rigoberta Menchú, Maricela Ayala, Carlos Navarrete y Beatriz de la Fuente, entre otros destacados especialistas de nivel mundial. Actualmente, la facultad mantiene una constante presencia en la Red Mexicana de Instituciones de Formación de Antropólogos (Redmifa), lo cual permitirá consolidar nuevas oportunidades de intercambio académico para profesores y alumnos de las cuatro carreras que actualmente ofrece este plantel: Antropología Social, Arqueología, Antropología Lingüística y Antropología Histórica. Este año, se espera que la mayor parte de los alumnos de la primera generación del Modelo Educativo Integral Flexible (MEIF) obtenga su título de licenciatura, bajo la dirección de un cuerpo docente en franco proceso de consolidación, pues casi todos los profesores cuentan con estudios y títulos de posgrado. Como prueba evidente del reconocimiento externo a la consolidación de la facultad puede citarse los recientes eventos científicos y las distinciones otorgadas a alumnos y miembros de nuestro personal docente. El Premio Nacional “Alfonso Caso” del INAH, recientemente concedido a uno de nuestros profesores, Roberto Lunagómez Reyes, el cual se suma a otros reconocimientos similares obtenidos por egresados o profesores de nuestra entidad académica, entre los cuales está Yolanda López Aguilar (Premio Nacional inah 1992), Omar Ruiz Gordillo (Premio Nacional “Francisco De la Maza”, 1996) y Enriqueta Cerón Velásquez (Premio Nacional “Wigberto Jiménez Moreno”, 1991). Sobre el primero, aunque en esta ocasión fue compartido con tres arqueólogos, la Facultad de Antropología se encuentra complacida porque el reconocimiento a Lunagómez refleja la vinculación que nuestra entidad mantiene con prestigiados organismos, como el Instituto Investigaciones Antropológicas (IIA) de la Universidad Nacional Autónoma de México(UNAM). La apertura que nuestro plantel ha procurado mantener desde su fundación en 1957, ha permitido sumar esfuerzos y obtener los recursos humanos y materiales para el desarrollo de investigaciones de alto nivel. Como ejemplo puede citarse tres proyectos arqueológicos desarrollados en los últimos diez años: en 1995, bajo la dirección de Richard Diehl (University of Alamaba) y Sergio Vásquez Zárate (UV), se exploró el importante sitio arqueológico de La Mojarra, con fondos auspiciados por la National Geographic Society. Desde 1998, Yamile Lira López, Investigadora y profesora de nuestra universidad, trabaja activamente en un proyecto interdisciplinario que se desarrolla en el Valle de Maltrata, en coordinación con el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la unam y fondos del Conacyt. Roberto Lunagómez ha participado desde 1991, en el Proyecto Arqueológico San Lorenzo Tenochtitlan, dirigido por Ann Cyphers del iia-unam, que se ha desarrollado con el apoyo económico de diversas instituciones y fundaciones nacionales y extranjeras. En estos proyectos se han incorporado alumnos de nuestra facultad, quienes en su oportunidad obtuvieron su título de licenciatura, con estudios emanados de estos trabajos interinstitucionales. El reciente énfasis de nuestra comunidad académica por la difusión y extensión ha permitido obtener otros recursos y distinciones, como el Premio “Librado Basilio” 2002 que obtuvo la alumna Ericka Carrillo Rodríguez, el premio Conaculta-inba-Cenart, conseguido en 2002 por David Triano Seceña, o el apoyo pacmyc concedido a Omar Melo Martínez en 2003. Por otra parte, la vinculación entre docentes, investigadores y alumnos con los sectores sociales, ha empezado a operar positivamente en lugares como Puente Nacional, Misantla, Los Tuxtlas y Aguacaliente (Municipio de Emiliano Zapata), donde se han emprendido proyectos interdisciplinarios sobre el patrimonio cultural de la población. Finalmente, es importante subrayar la creciente colaboración académica entre el Instituto y la Facultad de Antropología. El año pasado, ambas dependencias organizaron el XII Foro anual de docencia, investigación, extensión y difusión, evento que permitió reunir a un alto número de investigadores, docentes, alumnos y egresados de nuestra entidad. En los últimos semestres, la participación de investigadores del instituto, en apoyo a las labores de docencia, alcanzó su más alto nivel en la historia y se espera que este acercamiento entre las entidades hermanas fortalezca recíprocamente a los cuerpos académicos, líneas de investigación e instancias colegiadas. |
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