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Nuestra
Otra Voz:
El
lazo con la raíz populuca-mixe
Karina Arriaga Murrieta |
Ejemplo
de tenacidad, responsabilidad y gran sentido de compromiso es Silvestre
Felipe Severo, quien, originario de Sayula de Alemán, a sus
23 años cursa la carrera de Pedagogía en el Sistema
de Enseñanza Abierta.
Pese a lo joven que es, cuenta con mucha experiencia en cuestiones
de educación básica en zonas y poblaciones indígenas,
gracias a su labor como instructor comunitario. Pero de Felipe destaca,
sobre todo, el lazo ineludible con su comunidad, el cual se puede
apreciar cuando habla sobre ésta:
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![](images/FelipeSilvestreSevero(nuestra%20otra%20voz).gif)
Silvestre
Felipe Severo. |
Mi
tierra, donde hace mucho calor, cuenta con alrededor de 50 mil habitantes
pero aún no es ciudad, sigue siendo un pueblo al que le falta
infraestructura. Las calles son de terracería en su mayoría,
y algo que destaca es la iglesia con su torre de 40 metros. Casi no
hay tiendas o servicios como en las grandes ciudades y pueden verse
en los alrededores casitas de barro muy sencillas.
Aunque tenemos muchas preocupaciones somos alegres, dicharacheros
y amables. La mayoría somos indígenas, hablamos populuca
mixe y hay un gran
orgullo por ello.
Por otra parte, casi no hay empleo, la gente es muy humilde.
Los padres de familia y sus hijos varones se dedican a cultivar el
campo. La mayoría se emplea como peón con la gente que
tiene ganado, que son la minoría; eso es en cuanto a los hombres.
En lo que se refiere a las mujeres, ellas han logrado crear
una nueva forma de obtener ingresos, de lo cual me siento muy orgulloso.
Elaboran la carne de cerdo en chile ancho que se lleva a las grandes
ciudades. Es muy emocionante ver cómo se levantan muy temprano,
a las cuatro o tres de la mañana, a traer la carne para prepararla.
A las ocho de la noche la carne ya está lista, tras tasajearla
y meterla en el horno de barro para su correspondiente secado. Al
otro día se van de madrugada a vender su producto.
El 15 de mayo hay una feria en honor del patrono del pueblo,
San Isidro Labrador, día en que los fieles elaboran comida
y bebidas tradicionales como el popo (bebida espumosa y fría
con cacao y arroz). También se hace muchos tamales, uno de
los más populares es el Kajocopak (cabeza de tigre),
hecho con la masa normal y frijoles negros tiernos.
Por otra parte, me parece importante destacar que hubo un tiempo
en el que casi no se le dio la importancia debida a la educación
y a la preservación de la lengua popoluca mixe en Sayula, creo
que a causa de las políticas del gobierno. Ahora han fundado
más escuelas y por medio de la sec se entregan a los niños
de primaria libros en su lengua materna. Lo malo es que los profesores
no conocen el popoluca mixe. Además, a veces ni siquiera les
dan un programa para guiarse y así poder explicar a sus alumnos.
Durante mi labor como instructor comunitario me di cuenta de
las carencias que existen en las zonas rurales e indígenas
respecto a la educación. Desde los 14 años empecé
a dar clases de alfabetización para obtener algunos ingresos.
Más tarde, para poder pagarme la preparatoria, presenté
el examen para poder ser instructor comunitario; después de
que me aceptaron, fui enviado a Uxpanapa, donde aprendí a sobrevivir,
pues allí carecían de casi todos los servicios, además
de comprometerme con lo que hacía. Desde entonces fui instructor
en otros lugares y capacitador-tutor de apoyo académico, e
incluso tuve la fortuna de laborar en Sayula de Alemán.
Hace falta tener vocación para dedicarse a la enseñanza,
hay que preocuparse por los niños y jóvenes a los que
se educa, sin anteponer el interés personal. Por medio de la
educación es posible transformar y formar mejores personas
que aprecien y valoren su entorno. |
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