| Año 3 • No. 136 • abril 19 de 2004 | Xalapa • Veracruz • México |
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Sabar,
noche de danza africana y percusión Gina Sotelo |
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| Una
vez más la armonía unió a los cuerpos y conciencias
de quienes tuvieron la oportunidad de conocer de cerca al músico
Lamine Thiam y contagiarse de los energéticos ritmos de la
danza y percusión Sabar. Lamine fue invitado a impartir un taller de baile ya tambor como parte de las actividades del primer encuentro África en México, que con el tema "Paradigmas cambiantes de la población afromestiza en México", organizó recientemente la Fundación y el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UV. La noche africana contó con la participación de más de 20 percusionistas y bailarinas, quienes durante una semana asistieron a las clases del senegalés. Sabar es una de las tantas danzas tradicionales del Sur de África, celebración que por su carácter festivo –los ritmos dictados por el tambor– es ideal para festejar la vida y el amor y se interpreta en bautizos y bodas principalmente. Visiblemente emocionado del resultado de estos cursos, Lamine habló de su experiencia con los músicos y bailarinas de México: "Me encantó visitar Xalapa y conocer a la gente de este lugar. Aquí encontré excelentes percusionistas, gente muy cálida". Lamine Thiam tiene en Nueva York una compañía de danza con la que piensa a mediano plazo regresar al estado, especialmente porque descubrió en la gente esa tercera raíz que da identidad al pueblo veracruzano: "En todos lados veo África. Es gracias a la música que la gente se une, esa es la razón que me tiene aquí, hay espíritu vivo de los africanos en cada veracruzano, es algo que se tiene en la sangre y que sigue vivo". De este singular baile, el Sabar, Lamine afirmó que es sencillo en tanto que uno ame la música: "Yo amo bailar, es parte de mí, por eso es que quiero llevar estos ritmos a todo el mundo. Cualquiera, si ama la música, puede también ser parte del Sabar". |
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