Museo
hecho con el esfuerzo de la comunidad
La Fomeca se dio a la tarea de buscar un local para establecer
el museo. Primero pensó en la estación de ferrocarril,
ya que era otorgada para usos culturales, pero como no fue posible
se dirigieron a la fábrica, la cual ya no utiliza sus instalaciones
al cien por ciento y les ofreció tres bodegas de algodón.
A partir
de ahí, Fomeca empezó a ganar becas, la primera
fue la Pacmyc y la segunda una del Fondo Estatal para la
Cultura y las Artes, luego otra del Fonca-Conaculta,
y actualmente otra más de la misma institución con
la que continúan las labores. Además, el grupo trabaja
para obtener sus propios recursos a través de sus publicaciones,
la venta de discos y la organización de bailes. Además
cuentan con el apoyo de la sociedad civil y el Instituto de Investigaciones
Histórico Sociales (IIH-S), por lo que se puede decir que
éste es un museo hecho con el esfuerzo de la comunidad.
Con la
más reciente beca el próximo 30 de agosto –fiesta
patronal de Santa Rosa de Lima– Fomeca planea inaugurar
la segunda fase del museo: las tres salas temporales se convertirán
en definitivas y abarcarán el periodo histórico de
1930 a 1990. Además, los domingos, con el apoyo del Ivec,
se brindan recorridos gratuitos hechos con títeres, para
que la familia asista y conozca el museo, el cual refuerza la iniciativa
local y regional de los habitantes del valle de Orizaba a partir
del conocimiento de sus raíces económicas, sociales
y culturales, así como el rescate de fotografías,
documentos, maquinaria industrial, objetos y testimonios orales
referentes a la historia del siglo XX de Ciudad Mendoza y en general
del valle.
El museo
está instalado en una superficie de 900 metros cuadrados
y las tres primeras salas contienen la historia de los empresarios
originarios de Barcelonnette, pueblo francés situado al pie
de los Alpes, quienes montaron las fábricas, migración
muy importante para México porque se dedicaron al comercio
e instalaron las primeras tiendas departamentales como Liverpool
y El Palacio de Hierro. La segunda está dedicada a lo social,
guarda testimonios de cómo se fundó el pueblo con
migrantes de Puebla, Tlaxcala y de diferentes estados, quienes llegaron
a la fábrica Santa Rosa a trabajar.
La tercera
contiene las tensiones que pasaron al iniciar la industrialización:
el nacimiento de la clase obrera, la cual, dadas las condiciones
de trabajo, trajo como consecuencia convulsiones sociales, de ahí
la famosa huelga del 7 de enero de 1907 de Río Blanco, antecedente
de la Revolución Mexicana. Esas salas contienen la historia
de la región hasta 1920 aproximadamente, cuando nacieron
los sindicatos.
El museo
también cuenta con tres salas temporales, donde está
la exposición sobre el museo de Barcelonnette y dos salas
más con la muestra que les facilitó el Ayuntamiento
y pueblo de Maltrata, municipio vecino de Ciudad Mendoza, donde
el año pasado encontraron los restos de un mamut y donde
un grupo de arqueólogos de la UV y de la UNAM están
trabajando en un proyecto de rescate de vestigios prehispánicos.
Hermanamiento
Ciudad Mendoza-Barcelonnette
Gracias al apoyo de la UV, a través del IIH-S, el primero
de mayo el Museo Comunitario de Ciudad Mendoza se hermanó
con el de Barcelonnette, Francia. En
la ceremonia estuvieron presentes el cónsul general de Francia
en México, Jean Marie Martinet; la directora del Museo de
Barcelonnette, Hélen Homps-Brousse; la presidenta de la fundación
Raíces, Minuch Suverville y el director del Museo de Ciudad
Mendoza, Bernardo García Díaz.
La relación entre ambas poblaciones es tan fuerte que el
28 de abril de 2001, cuando se inauguró el museo, vino una
delegación de 40 personas de Barcelonnette, quienes donaron
objetos, fotografías y otros materiales.
Este convenio contempla un intercambio cultural de exposiciones
entre ambos museos, así como la edición de textos
en francés y español sobre la historia de la región
y los empresarios de Barcelonnette. Se prevé, además,
echar a andar un programa educativo entre jóvenes de enseñanza
media vía Internet y, posteriormente, un intercambio físico
para los mejores estudiantes.
Así, los museos no hicieron más que aprovechar los
lazos que han unido a ambas poblaciones desde hace más de
un siglo. El museo está ubicado en la calle Ocho de Marzo
sin número, a un costado del Palacio Municipal y se le puede
visitar de martes a domingo de 10:00 a 17:00 horas.
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