La
maestría en Ciencias de la Tierra, que la Universidad Veracruzana
ofrecerá en 2005 en coordinación con la UNAM, será
un detonante fundamental para la investigación vulcanológica
en Veracruz, donde existen actualmente dos volcanes activos, aseguró
Sergio Rodríguez Elizarrarás, experto en vulcanología
y geología aplicada de la UV.
Puesto que la actividad volcánica implica un peligro latente
para la población, deben ser prioritarios los estudios de
este tipo, y por tanto, el formar especialistas en el campo, comentó
el investigador al participar en las actividades de la Semana de
las Ciencias de la Tierra en la UV.
Aseguró que aunque desde hace más de 10 años
hay investigadores que trabajan en la parte vulcanológica
y publican avances de investigación sobre zonas volcánicas
en Veracruz: “Los problemas son tan complejos, el terreno
es tan abrupto y a veces de tan difícil acceso que nunca
es suficiente lo que se hace”. De hecho, desde la creación
del Centro de Ciencias de la Tierra de la UV, en 1999, la investigación
vulcanológica ha crecido notablemente, dijo, no sólo
por la necesidad de entender el fenómeno que genera la actividad
volcánica, sino por los riesgos que implica el desconocimiento
de los mismos.
Elizarrarás destacó entonces la colaboración
que el propio centro ha desarrollado con Protección Civil
del Gobierno del Estado, misma que ha permitido apoyo mutuo para
monitoreos volcánicos y ha establecido las bases para la
toma de decisiones en torno a situaciones de riesgos en poblados
veracruzanos.
Recordó cuando en Tlachichilco, en la parte norte del estado,
el Centro de Ciencias de la Tierra alertó a los encargados
de protección civil de posibles deslizamientos de laderas
que afectarían a cientos de personas, mismas que fueron evacuadas
de inmediato lo que evitó así una catástrofe
mayor: “Es importante saber cómo y cuándo reubicar,
pero no sólo eso, sino además determinar qué
puede ocurrir en un sitio y elaborar mapas de riesgo como el que
existe para la zona del Pico de Orizaba, donde se tienen ubicadas
las poblaciones que podrían eventualmente estar en peligro
en caso de actividad volcánica”.
Cabe mencionar que es justamente el Centro de Ciencias de la Tierra
de la UV el que tiene a su cargo las tres estaciones de monitoreo
sísmico en el Pico de Orizaba, las cuales emiten reportes
periódicos para dar a conocer cualquier actividad anormal
del volcán. |